Interpretacion Penal
Interpretacion Penal
Interpretacion Penal
Con el ámbito de validez de la ley penal se trata de precisar los alcances y límites de la
ley penal. Primero, ante un problema concreto, se debe saber cuáles son las normas
aplicables (ámbito material), después precisar desde que momento y hasta cuando
está vigente la norma (ámbito temporal), luego determinar en qué demarcación
geográfica o espacio tiene aplicación la norma (ámbito espacial) y, por último, saber a
quién o a quienes se aplica (ámbito personal)2. A este último es que haremos
referencia.
En el caso de la norma penal debido a la taxatividad que le exige al legislador la observancia del
principio de legalidad éste que debe evitar conceptos vagos, abiertos y excesivamente
indeterminados; de la misma manera el intérprete de la ley penal se encuentra condicionado por
el principio en mención, del que derivan exigencias como la determinada por el principio de
prohibición de analogía; sin dejar de lado que en algunos casos la punición o impunidad de las
conductas depende del contenido que se atribuya a los preceptos penales, lo que hace del proceso
interpretativo una actividad sumamente delicada.
Clases de interpretación:
De acuerdo a este criterio, la interpretación puede ser Histórica, Gramatical, Lógica, Sistemática o
Analógica.
b. TELEOLÓGICA O LÓGICA.- También es llamada “interpretación racional”, su objeto es
desentrañar el verdadero sentido de la norma misma que se infiere inductivamente tanto de
su forma como de su contenido, mediante el análisis del texto legal, el estudio de la
exposición de motivos y las actas de los trabajos preparatorios. Este tipo de interpretación
procura descubrir la atmósfera en donde nació la ley a la vida jurídica. Para hacer ese
descubrimiento se recomienda un método histórico debiendo tener presentes los factores
sociológicos, éticos, políticos e históricos, en consonancia con el derecho comparado.
c. HISTÓRICA.- Aquí la norma debe ser considerada en relación con el momento en que se
creo, tomando en cuenta las circunstancias políticas, sociales y económicas de la época .
Graciela Amuchategui ejemplifica este criterio al comentar que "si se quiere interpretar el artículo
308, segundo párrafo, del CPF, que señala el duelo como circunstancia atenuante en los
delitos de lesiones y homicidio, se deberá partir de la época en que se creó dicha norma y las
características de la sociedad en ese periodo."
d. SISTEMÁTICA.- Permite interpretar la ley atendiendo a las conexiones de la misma pero con
la totalidad del ordenamiento jurídico del cual forma parte, incluidos los principios generales
del derecho. Así, este método no es sino un grado más avanzado del método lógico.
De acuerdo a los resultados a los que se llega, la interpretación puede ser: a) declarativa, b) Extensiva, c)
Restrictiva o e) Progresiva.
a. INTERPRETACIÓN DECLARATIVA.- En este rubro la ley dice lo mismo que expresan las palabras
empeladas. Existe identidad entre el texto literal y la voluntad del legislador.
c. INTERPRETACIÓN RESTRICTIVA.- En esta clasificación nos referimos a las normas que emplean
palabras que dicen más que lo pretendido por el legislador (potius dixit quam voluit: "dijo más de lo que
quiso"). Es decir, la letra va más allá de la voluntad legal.
Existe un error al considerar que la ley penal no se interpreta, confundiendo los términos: Interpretación
analógica y aplicación analógica.
Mientras que, por otro lado, la aplicación analógica, consiste en imponer una sanción por un
delito no previsto en la ley, simplemente por semejanza con otro delito, lo que equivale a
crear delitos no establecidos en la norma.
Con respecto a la aplicación analógica de la ley penal, podemos decir que esta práctica está
prohibida constitucionalmente y que de acuerdo al maestro Sergio García Ramírez "De la norma
constitucional se sigue el carácter estrictamente legal del delito, la llamada "continuidad" del
derecho penal y la proscripción de la integración judicial, particularmente al través del
método analógico, enlazado con el derecho penal totalitario."
ÁMBITO ESPACIAL.-
La ley Penal se aplica básicamente dentro del territorio nacional, en consecuencia todo delito
perpetrado dentro de los límites de nuestro país ya sea por peruanos o extranjeros es tratado
conforme a la ley penal nacional y excepcionalmente de acuerdo a la extranjera, esto de acuerdo al
principio de territorialidad; por otro lado tenemos el principio del pabellón también llamado "teoría
del territorio flotante" o del "derecho de bandera", que otorga la calidad de territorio nacional ficto
para los efectos de la aplicación de la ley penal a: el de las naves o aeronaves nacionales públicas y
el de las nacionales privadas que se encuentren en altamar o en el espacio aéreo donde ningún
estado ejerza soberanía, siempre y cuando los efectos del acto no afecten al Estado sobrevolado
(Ley de Aeronáutica Civil 30/07/88); se tiene asimismo el principio real o de defensa que se aplica a
ocurrencias suscitadas en el extranjero cuando además de delictivas de acuerdo a la ley peruana,
afectan los intereses del Estado peruano, y cuando el delito es cometido por funcionario o servidor
público en el ejercicio de su cargo (art. 2, inc. 1, C. P.); asimismo se aplica en el caso de los delitos
contra la seguridad o tranquilidad pública, los delitos contra el Estado y la defensa nacional y de los
poderes del Estado y el orden constitucional o contra el orden monetario, sin que cuente la
nacionalidad del agente (títulos XII, XIV, XV y X cap. II del C. P. respectivamente); también opera el
principio de personalidadque se verifica cuando resulta excepcionalmente la extraterritorialidad de
la ley peruana, por la nacionalidad peruana del agente activo, a quien la ley peruana persigue por
haber cometido delito en el extranjero, o a quien la ley peruana protege por ser peruana la víctima de
un delito cometido en su agravio, en el extranjero, por un extranjero; tenemos el principio de
personalidad activa cuando por ser peruano el autor del delito se le aplica la ley peruana (art. 2, inc.
4, C. P.), siempre y cuando el hecho constituya delito en ambos países, sea pasible de extradición y
que el agente ingrese al Perú por cualquier motivo; y se aplica el principio de personalidad
pasivacuando un extranjero delinque en el extranjero en agravio de peruano, bajo las mismas
condiciones previstas en el caso anterior; tenemos en el mismo sentido el principio de
universalidad por el cual se aplica la ley penal del Estado en que se encuentra el sujeto activo que
ha perpetrado un delito previsto y constitutivo además de una infracción al derecho de gentes (delitos
de lesa humanidad) (art. 2, inc. 5, C. P.); tenemos de la misma manera el principio de
representación sobre la base del cual si el Perú deniega una extradición juzgará, conforme a sus
leyes, fundándose en la solidaridad internacional, y como país requerido, al ciudadano extranjero.
ÁMBITO TEMPORAL.-
ÁMBITO PERSONAL.-
El principio general constitucional nos dice que: "Artículo 2.- Derechos fundamentales de la
persona. Toda persona tiene derecho: 2. A la igualdad ante la ley. Nadie debe ser discriminado por
motivo de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de cualquiera otra
índole.". Lo corrobora nuestro Código Penal, en su art. 10: "La Ley Penal se aplica con igualdad.
Las prerrogativas que por razón de la función o cargo se reconocen a ciertas personas habrán
de estar taxativamente previstas en las leyes o tratados internacionales".
Las excepciones al principio de la igualdad ante la ley pueden ser personales o funcionales,
según dependan de la persona de quien goza del privilegio, o de la función que ésta desempeñe.
Como la democracia es la esencia de nuestro Estado, no debemos buscar en él ningún privilegio que
no sea en razón de la función.
Conclusión:
Podemos concluir esta segunda semana manifestando que el Derecho Penal en tanto norma requiere del
elemento interpretativo capaz de escudriñar en su esencia y adjudicarle el sentido que le corresponde.
Asimismo se debe asumir que la aplicación de la norma penal se realiza dentro de los ámbitos espacial,
temporal y personal, cada uno con reglas especiales que deben ser observadas.