PEMAE U2 Contenido
PEMAE U2 Contenido
PEMAE U2 Contenido
Séptimo semestre
Clave 29143740
Índice
Presentación.................................................................................................................................................................................................... 2
2.1. La energía dinamizadora de los ecosistemas ........................................................................................................................................... 4
2.2. Concepto de sistemas productivos ......................................................................................................................................................... 13
2.3. Los sistemas como productores de alimentos ......................................................................................................................................... 32
Presentación
Por tanto, en la presente unidad se analizarán las implicaciones de los flujos de energía y la materia en los ecosistemas y su importancia en
el sostenimiento de la vida.
En primer término, se describirán los flujos de energía y los procesos biogeoquímicos del medio ambiente entre los ecosistemas,
explicando la forma en que la energía los dinamiza. Posteriormente, se distinguirá el concepto de sistema productivo, así como los
elementos que lo conforman y algunos indicadores de medición. En el marco de los sistemas productivos, se analizará el papel que ha
jugado la población en éste.
Una vez ubicado el concepto de sistema productivo, se explicarán los sistemas como productores de alimentos, en donde confluyen
factores de biomasa, suelo, fauna, flora, agua, etcétera. Para finalizar, el (la) estudiante analizará el impacto generado en la sociedad,
desde el punto de vista sociocultural y contrastará el estilo de vida y consumo del entorno rural y urbano.
De acuerdo con Enríquez (2008), los ecosistemas son un conjunto interdependiente de comunidades biológicas capaces de adaptarse a
cambios endógenos y exógenos. Para funcionar de manera adecuada, los ecosistemas necesitan:
Por otro lado, en un ecosistema, las comunidades biológicas están compuestas por poblaciones de diferentes especies, ligadas a un área
en particular. Mientras que las poblaciones son un conjunto de individuos de una misma especie, que comparte un área determinada con la
capacidad de intercambiar genes a través de la reproducción.
Para que un ecosistema se mantenga en el tiempo, es necesario el intercambio de energía y materia entre los organismos y su ambiente;
para lograrlo, se fija y se transfiere energía proveniente del Sol. Las plantas verdes fijan la energía solar por medio de la fotosíntesis,
acumulándose como biomasa vegetal. Los organismos no fotosintéticos convierten estas reservas de energía en biomasa heterótrofa.
El ecosistema se mantiene en funcionamiento a través del flujo de energía, el cual fluye a través de la cadena alimenticia en una sola
dirección:
Va siempre desde la energía aportada por el Sol, a través de productores a descomponedores. La energía se introduce en
el ecosistema en forma de energía luminosa y sale en forma de energía calorífica. Esta energía ya no puede ser reutilizada
para mantener otro ecosistema en funcionamiento.
Fotosíntesis Biomasa
Proceso que consiste en captar Materia orgánica en un proceso
la energía solar por la clorofila y biológico, espontáneo o provocado,
transformar la energía luminosa utilizado como fuente de energía.
en química.
Fotosíntesis y biomasa
Cadena trófica
Nivel trófico
Durante las etapas en las que un organismo se alimenta y es devorado, la energía fluye desde un nivel trófico a otro. Las plantas verdes u
otros organismos que realizan la fotosíntesis utilizan energía solar para elaborar hidratos de carbono para satisfacer sus necesidades. La
mayor parte de esta energía química se procesa en el metabolismo y se pierde en forma de calor en la respiración. Las plantas convierten
la energía restante en biomasa, sobre el suelo como tejido leñoso y herbáceo y, bajo éste, como raíces. Por último, este material, que es
energía almacenada, se transfiere al segundo nivel trófico, que comprende a los herbívoros que pastan, los descomponedores y los que se
alimentan de detritos.
Si bien la mayor parte de la energía asimilada en el segundo nivel trófico se pierde de nuevo en forma de calor en la respiración, una
porción se convierte en biomasa. En cada nivel trófico los organismos convierten menos energía en biomasa que la que reciben. Por lo
tanto, cuantos más pasos se produzcan entre el productor y el consumidor final, la energía que queda disponible es menor. Rara vez
existen más de cuatro eslabones o cinco niveles en una red trófica. Con el tiempo, toda la energía que fluye a través de los niveles tróficos
se pierde en forma de calor. El proceso por medio del cual la energía pierde su capacidad de generar trabajo útil se denomina entropía
(medida del grado de desorden o aleatoriedad de un sistema).
Flujo de materia
Desde el punto de vista de la termodinámica, la energía se define como la capacidad de hacer un trabajo, éste puede ser físico, mecánico,
biológico o ecológico; la forma como la energía puede manifestarse puede ser lumínica, química, calorífica, mecánica, solar, etcétera.
Para que un ecosistema pueda mantener sus funciones, es indispensable la energía solar, ésta es enviada hacia la Tierra y,
aproximadamente, la mitad de la que logra traspasar la atmósfera y llega a la superficie del planeta es utilizada por los veg etales para llevar
a cabo la fotosíntesis; la energía química resultante de este proceso es utilizada por los organismos consumidores herbívoros
primarios, y estos sirven de alimento a consumidores carnívoros secundarios y terciarios; entonces, la energía se va moviendo hacia
los diferentes niveles tróficos. Durante este movimiento, una parte de la energía sufre otras transformaciones y transferencias, otra se
disipa parcialmente, el resto es liberado por los organismos descomponedores que biodegradan vegetales y animales muertos.
Todos estos cambios de la energía están regidos por la primera y segunda leyes de la termodinámica. Primera: “la energía existente en
el universo es una cantidad constante que no se crea ni se destruye, sólo se transforma”. Segunda: la “transferencia de la energía no es
eficiente de una manera total al cambiar de una manifestación a otra; es decir, parte de la energía no es aprovechada y se pierde en forma
de calor no utilizable”.
Toda manifestación de energía va acompañada de cambios energéticos (metabolismo, crecimiento reproducción, biosíntesis, etcétera).
Además, hay cambios que determinan las condiciones del medio ambiente (clima, vientos, mareas, lluvias, heladas, etcétera).
Cuando la energía fluye a través de los niveles tróficos, una parte de ella se disipa en forma de calor que el sistema no puede aprovechar;
este calor no regresa al Sol; se dice que éste es el flujo unidireccional de la energía.
Cada vez que se transfiere la energía de un nivel trófico a otro ocurre una pérdida del 90%; así, se hace referencia al principio del diezmo
ecológico o ley del diez por ciento. El total de la energía que contiene un nivel trófico de un ecosistema alcanza una magnitud igual a un
décimo de la que corresponde al nivel que le antecede.
Mientras la capacidad económica no exceda los límites de la biósfera, el flujo de energía solar puede revertir en parte el flujo de entropía
dentro de la biósfera. Es decir, la energía del Sol puede convertir nuevamente una parte de los residuos en recursos.
Proceso productivo
Elaborado con base en Hauwermeiren (1999).
Por otro lado, en los ecosistemas hay un constante flujo de materiales inorgánicos, desde el medio ambiente hasta los organismos y
viceversa. Esta circulación y recirculación de los elementos y compuestos químicos en la biósfera recibe el nombre de ciclos
biogeoquímicos, los cuales pueden ser:
(O2)
Ciclo del oxígeno
Gaseoso
Se lleva a cabo Ocurre principalmente en El oxígeno molecular (O)
Sedimentario
En el proceso de la respiración, el oxígeno actúa como aceptor final para los electrones retirados de los átomos de carbono de los
alimentos. El producto es agua. El ciclo se completa en la fotosíntesis, cuando se captura la energía de la luz para alejar los electrones
respecto a los átomos de oxígeno de las moléculas de agua. Los electrones reducen los átomos de carbono (de bióxido de carbon o) a
carbohidratos. Al final, se produce oxígeno molecular, y así el ciclo se completa.
Por cada molécula de oxígeno utilizada en la respiración celular, se libera una molécula de bióxido de carbono. Inversamente, por cada
molécula de bióxido de carbono absorbida en la fotosíntesis, se libera una molécula de oxígeno.
A partir de los fundamentos explicados en este apartado, se debe considerar la importancia que implica la conservación y protección de la
biodiversidad; ello se puede realizar a partir de prácticas de manejo sostenible en los espacios productivos de los corredores biológicos. Por
tanto, en el siguiente apartado, se abordarán los fundamentos de los sistemas productivos, pues su manejo resulta de gran importancia
para el impacto ecológico en el medio ambiente.
Se considera que, en la actualidad, el 50% de las tierras dedicadas a la producción agrícola (cultivos y ganadería), la gestión de recursos
naturales y la formulación de enfoques en México, inevitablemente integra la producción alimentaria y la generación de ingresos por una
parte y, por otra, la conservación de los activos ambientales. Se calcula que nuestro país está clasificado como uno de los cinco países
“megadiversos”, con aproximadamente el 12% de la biodiversidad mundial.
La competencia por los recursos naturales, como la tierra, el agua y los océanos, se está intensificando y, en muchos lugares, está llevando
a la exclusión de los usuarios tradicionales con respecto a recursos y mercados. Los cambios sociales y demográficos en las zonas rurales
también afectan a la mano de obra disponible para la producción. El movimiento creciente de personas y bienes, y los cambios en las
prácticas de producción dan lugar a nuevas amenazas procedentes de plagas, enfermedades y especies exóticas invasivas. El cambio
climático reduce la resistencia de los sistemas de producción y contribuye a la degradación de los recursos naturales. Por otro lado, el
sector agrícola contribuye al cambio climático y padece al mismo tiempo sus efectos.
La mejora de las prácticas y la disminución de la deforestación y la degradación de los bosques ofrecen un potencial importante para la
adaptación al cambio climático y su mitigación. En este sentido, los sistemas de producción sustentables simulan naturaleza para crear una
agroecología, donde la biodiversidad es alta, se reciclan los nutrientes de la planta, el suelo es protegido de la erosión, el agua se conserva
y no se contamina, la labranza se minimiza y la producción de ganado se integra con las plantas perennes y cosechas anuales ( FAO,
2015).
En este sentido, los sistemas económicos juegan un importante papel en la conservación del equilibrio ecológico, pues la economía se
ocupa de administrar los recursos (escasos), con el fin de producir bienes y servicios destinados a la distribución para el consumo entre los
miembros de la sociedad. Los sistemas económicos, desde la visión de la economía tradicional, implican todo un conjunto de relaciones
básicas, técnicas e institucionales, que caracterizan la organización económica de una sociedad, las cuales se componen por:
Los factores productivos (o insumos) son los elementos básicos utilizados en la producción de bienes y servicios. Tradicionalmente, se
consideraron tres categorías:
Factores productivos
Fuente: Hauwermeiren (1999, p. 22).
Dentro del capital, también se considera el “capital humano”, que implica todo lo que contribuye a elevar la capacidad productiva de los
seres humanos, como la educación, salud, experiencia, etcétera. Por tanto, todo lo que coadyuva a generar nuevos conocimientos a través
de la investigación y desarrollo también es considerado parte de los factores productivos. A partir de esta consideración, surge una nueva
definición, la cual incluye cinco factores productivos:
Producción
Un sistema de producción sustentable se refiere a: la capacidad del sistema para mantener su productividad a
pesar de las perturbaciones económicas y naturales externas o internas.
División de Ciencias Sociales y Administrativas / Políticas y Proyectos Sociales 16
Economía del medio ambiente y la ecología
Unidad 2. Los ecosistemas en el sostenimiento de la vida
Contenido nuclear
Desde la visión del medio ambiente se ha ampliado el enfoque del proceso productivo, en éste se incluyen dos aspectos ambientales a
modo de funciones:
b) La asimilación de residuos.
Dentro de los factores importantes de la actividad económica y que determinan el impacto ambiental, se identifican:
b) La estructura de la economía (intensiva en el uso de los recursos naturales y creadora de industrias contaminantes).
Para medir el desarrollo sostenible, se ha propuesto el uso de indicadores. Un indicador es una variable construida que repre senta atributos
de un sistema. En su construcción, debe existir una metodología clara y explícita que pueda representar la realidad que intenta explicar. Un
buen indicador resume, cuantifica y comunica información relevante, haciendo visibles fenómenos de interés de manera simplificada.
La economía ambiental ha intentado proporcionar indicadores únicos o índices de desarrollo sustentable. Estos índices tienen la función de
simplificar y condensar información cuantitativa compleja, normalmente basada en indicadores de estado y evolución de variables
económicas, ambientales, sociales e institucionales, como los proporcionados por la OCDE o la ONU. Su objetivo es servir de guía para la
toma de decisiones y la planificación del desarrollo.
Permiten realizar un diagnóstico de los problemas, así como analizar su evolución, y contribuyen a marcar objetivos de política económica
general. Idealmente, el índice debe proporcionar información acerca del impacto del uso de un determinado recurso independientemente
del origen de la actividad económica que lo genera. En general, se acepta que una aproximación per cápita y no por país es más
adecuada, pues incorpora el efecto de la población. Existen índices de sustentabilidad fuerte, expresados en unidades físicas, e índices de
sustentabilidad débil, habitualmente expresados en unidades monetarias (excepto el Índice de Desarrollo Humano-IDH). A continuación se
presenta un resumen de los indicadores más importantes.
determinada
especie que Considerando que existe:
puede i recursos ambientales = capacidad de absorción de contaminantes o
sobrevivir con
residuos.
los recursos
i recursos naturales = renovables o no renovables.
disponibles en
una
Estos pueden limitar las posibilidades de crecimiento en el futuro, la
determinada
capacidad de carga de un sistema es la población máxima que puede
área.
sobrevivir considerando el recurso más escaso; es decir:
CC = min CC¡
El grado de resiliencia de un ecosistema informa hasta qué punto la
productividad ecológica del mismo permanece inalterada o disminuye de
Capacidad de forma temporal o permanente como resultado de presiones o
resistencia o perturbaciones.
de Las dificultades de cálculo de un índice de biodiversidad para un
recuperación ecosistema son múltiples, comenzando por la ausencia de datos. También
Resiliencia
de un se desconocen las interacciones entre los ecosistemas y la influencia que
determinado ciertas presiones ejercen sobre ellos, premisa imprescindible y dificultad
ecosistema. evidente para la modelación del desarrollo futuro de los mismos. A todo
ello, habrá que añadir la necesidad de terminar un nivel base de
biodiversidad a partir del cual se considera que el sistema es sustentable.
Es una Medida de la carga impuesta por una determinada población sobre los
extensión recursos naturales y el medio ambiente. Representa el área
La huella
ecológica reciente de la biológicamente productiva, de tierra o mar, necesaria para sustentar los
filosofía de la actuales niveles de consumo de recursos y generación de residuos de esa
Ahora bien, el PNN verde (ni su comparación con las tasas de crecimiento del
PNB) proporciona información relevante sobre la sustentabilidad del desarrollo.
Lo único que da son indicadores que proporcionan información para localizar el
origen de los problemas y determinar su magnitud. Sin embargo, la obtención de
esta información demuestra que los recursos y el medio ambiente pueden ser
integrados dentro de las medidas de progreso económico existentes.
Tiene en cuenta
tanto el
Riqueza per crecimiento total
cápita de los recursos,
Una vez obtenida la riqueza total, se calcula la riqueza per cápita. Así, si P es la
como el
crecimiento de población, W la riqueza total e ∆W el ahorro auténtico, el cambio en la riqueza
la población per cápita podría expresarse de la siguiente forma:
Otros índices
Los sistemas productivos se han modificado a través de la historia, y el crecimiento de la población ha sido uno de los principales factores.
Éste ha generado que la tierra cultivable por habitante disminuya de manera constante. Se ha calculado que la mayor presión se ejerce en
el Cercano Oriente y en África, en donde las densidades de población han aumentado el 73 y el 66%, respectivamente, en un periodo de 20
años, las cuales tienen además pocas posibilidades de elevar su producción, por la limitación de sus tierras cultivables y la debilidad de su
infraestructura.
Una cuestión capital en el futuro suministro de alimentos será el uso de los escasos recursos de tierra y agua. Una conclusión inevitable es
que hay que seguir intensificando la producción de alimentos. Los progresos de la ciencia y la tecnología han hecho esto posible en el
pasado, y hay muchas razones para esperar que así será en el futuro. Sin embargo, aun en zonas bien dotadas, el impacto ambie ntal que
los sistemas naturales y humanos pueden tolerar tiene sus límites si la ciencia agrícola no toma en cuenta esos factores.
En el decenio de 1950 se aceptaba como principio fundamental que el alimento debía producirse en las regiones de consumo. Se consideró
que los países en desarrollo estaban especialmente necesitados, y se creyó que las inversiones en tecnologías agrícolas modernas con
sus correspondientes infraestructuras impulsarían el desarrollo y constante suministro de alimentos. Gradualmente, se impusieron las
preocupaciones ecológicas, a medida que el público y las autoridades adquirían conciencia de los graves costos económicos y humanos de
la contaminación y la degradación de recursos.
En los últimos años, ha habido una evolución gradual desde enfoques principalmente tecnológicos de la producción alimentaria hacia otros
que toman en consideración factores ecológicos, sociales y económicos subyacentes. Uno de los elementos centrales en las estrategias
para reducir el impacto ambiental es un mejor equilibrio entre la confianza en la tecnología y enfoques en que la información y la gestión
ocupan un lugar más importante.
Actualmente, las actividades humanas de producción de alimentos adoptan muchas formas: desbroce del terreno, labranza, drenaje,
introducción de nuevas especies vegetales y animales. Sus efectos dependen de la amplitud de la explotación.
La cadena de efectos locales y lejanos complica el vínculo entre alimentación y medio ambiente. Entre los efectos locales se encuentran la
eliminación de la vegetación autóctona, la proliferación de malas hierbas e insectos, compresión del suelo por el pateo de animales o el
paso de maquinaria pesada. Algunos efectos lejanos pueden ser el encenagamiento aguas abajo, a causa de la erosión del suelo, la
escorrentía (por concentración de arroyos hacia zonas más bajas) y la eutroficación o contaminación del terreno y de las aguas de
superficie por exceso de fertilizantes.
En algunos casos, el crecimiento de la población ha hecho que se intensifique el uso de la tierra y aumente su productividad en zonas ya
preparadas para el cultivo. En otros casos, al crecimiento de la población no han correspondido incrementos en la productividad, lo que ha
llevado a aumentar las tierras destinadas a producir alimentos. El siguiente esquema muestra los mecanismos de retroalimentación
resultantes del crecimiento demográfico.
Crecimiento demográfico
Fuente: FAO (1996),
La siguiente figura muestra los elementos que deben ser considerados para que los sistemas productivos sean energéticamente eficientes:
Integración
Nuestros antepasados se trasladaban de sitio en sitio buscando alimentos para satisfacer sus necesidades básicas, hasta que aprendieron
a cultivar el suelo y a criar animales. Desde entonces, hombres y mujeres han dedicado tiempo e inteligencia a desarrollar técnicas e
instrumentos para incrementar la producción de alimentos en cantidades suficientes para superar periodos de escasez.
Las formas en que se utilizan los recursos naturales para producir alimentos dependen de factores humanos, económicos, culturales y
sociales. Esto se evidencia en la gran variedad de cambios realizados en la naturaleza mediante la modificación de paisajes, el uso y la
exclusión de plantas y de especies y variedades animales, y la manipulación de aguas y suelos.
La humanidad ha operado a lo largo de la historia modificaciones estructurales del paisaje; los efectos locales han sido importantes sobre la
superficie terrestre y la hidrología, cuando para obtener una nueva superficie nivelada se remueven la vegetación natural y e l suelo, el
subsuelo, e incluso los estratos geológicos inferiores.
Muchos sistemas agrícolas reflejan las características de sus zonas agroecológicas. Sin embargo, algunos de esos sistemas trascienden
de tales zonas, especialmente la agricultura de regadío, los sistemas de subsistencia, los policultivos, los huertos familiares y la horticultura.
Las prácticas de pesca pueden dañar los hábitats acuáticos. La fauna profunda,
los lechos de hierbas marinas y los arrecifes de coral pueden verse afectados
por el uso intensivo de mecanismos de pesca mecanizados, como redes
barrederas y dragas o el uso de explosivos. Los efectos ambientales de la
acuicultura y de los criaderos de peces proceden básicamente de los sistemas
intensivos (como cría de salmones en jaulas o de camarones en gran escala en
zonas costeras) que conducen al enriquecimiento excesivo del agua en
nutrientes y materia orgánica, la degradación de los humedales y la pérdida de
Pesca
Fuente: http://bit.ly/1HkS2uo diversidad biológica por la introducción de especies exóticas.
Hay fuentes terrestres de contaminación debidas a actividades humanas que influyen adversamente sobre la capacidad de regeneración de
recursos acuáticos en zonas litorales y costeras. La primera causa de reducción de poblaciones de peces es la reducción del hábitat por los
efectos combinados de la contaminación industrial, urbana y agrícola, los vertidos, los embalses y trasvases fluviales, la eliminación de
manglares, la sedimentación, la minería y la deforestación. La degradación del hábitat acuático afecta a los recursos de la pesca, lo mismo
en aguas interiores como grandes ríos o lagos que en aguas litorales o mares cerrados o semicerrados.
La producción de alimentos ha tenido varios efectos importantes, pero opuestos, sobre la diversidad biológica: reduce el ámbito de las
áreas naturales y la diversidad de los ecosistemas y de las especies silvestres que contienen; y desarrolla, a través de siglos de
domesticación y adaptación, una diversidad agrobiológica hecha de variedades naturales de cultivos y animales. Esta diversidad
agrobiológica se ha reducido a medida que las variedades naturales y las razas de animales han sido desplazadas por la introducción de un
número limitado de variedades de alto rendimiento y razas con una base genética más estrecha. Se considera que esta es la causa más
importante de la erosión genética.
Por tanto, es preciso considerar sistemas de producción de alimentos eficientes y resilientes. La resiliencia se define como la capacidad
de un sistema para retornar a las condiciones previas a una perturbación, sin alterar significativamente sus características de
estructura y funcionalidad; es decir, puede regresar a su estado original una vez que la perturbación ha terminado.
Empíricamente, se ha observado que los ecosistemas más complejos (los que poseen mayor número de interacciones entre sus partes),
suelen poseer resiliencias mayores, ya que existe una mayor cantidad de mecanismos autorreguladores.
Para alcanzar estos objetivos, hay que modificar las pautas tradicionales de producción de alimentos. Casi todas las opciones técnicas para
el aumento de la producción alimentaria tienen contrapartidas ecológicas, sociales y económicas, pero pueden conseguirse importantes
beneficios al dar prioridad a prácticas que favorecen características ecológicas, como diversidad, capacidad de recuperación y uso eficiente
de energía.
Aun siendo importantes los efectos directos de la erosión sobre los rendimientos de los
cultivos, los efectos remotos (por ejemplo, sobre recursos pesqueros y los hábitat) son
enormes a nivel de la cuenca fluvial. En ciertos casos, se han llevado a cabo medidas
ecológicas, como setos vivos, fajas de césped y huertos, etcétera.
Para usar el agua de manera sostenible, es preciso que, sobre todo durante periodos de
Suelo y escasez, se mantenga un caudal suficiente para proteger los sistemas fluviales, los lagos y
agua los humedales. Esa agua se utiliza para riego, pesca, preparación de alimentos,
conservación de productos alimenticios y, en algunos casos, para producir energía. Una
mejor captación y retención de aguas (con estanques, diques, pozos, cadenas de retención,
etcétera) y la eficiencia en el uso de éstas (sistemas de irrigación) son fundamentales para
aumentar la producción y abordar la creciente irregularidad de los esquemas de
precipitaciones.
Al elevarse el nivel de vida en muchas partes del mundo, aumentará la demanda de carne y
productos lácteos para el consumo diario. Una alternativa con mejor uso de la energía
consiste en mantener confinados a los animales, y se tiende a usar cultivos forrajeros y
piensos concentrados en lugar del libre apacentamiento. Por otro lado, la pérdida de
recursos genéticos disminuirá la capacidad de los criadores de plantas y animales para
responder a las condiciones cambiantes y demandas de que es objeto la industria
Ganadería alimentaria.
Es importante destacar que se prevé que las emisiones de metano de los rumiantes (que se
duplicarán en el periodo 1990-2050) dificulten la eliminación de restos animales. Los costos
directos e indirectos de la reducción de la contaminación en la industria ganadera se cifran
sólo en el 0.72% de los costos totales, lo que deja un considerable margen para seguir
reduciendo los impactos de este sector.
De acuerdo con Tommasino, Foladori y Taks (2005), la relación entre ser humano y ambiente siempre ha sido contradictoria, pues siempre
se ha destruido para sobrevivir. La especie humana (a diferencia de otras) transforma el medio ambiente externo utilizando instrumentos
que son acumulados de generación en generación. Dicha característica propiamente humana generó, a manera de boomerang, efectos al
interior de la propia especie humana y, de este modo, los instrumentos se apropiaron y monopolizaron generando la división de grupos y
clases sociales, de acuerdo con la relación de propiedad y aprobación de dichos medios de producción, los cuales fueron el medio para
transformar el ambiente externo. De esta manera, el ser humano, al tiempo que transformaba el ambiente externo, se transforma ba a sí
mismo.
La preocupación por los problemas ambientales surge cuando los recursos son utilizados a un mayor ritmo que el de la absorción de la
naturaleza, por tanto, los problemas ambientales surgen de una contradicción entre el ritmo de los ciclos biogeoquímicos y el ritmo
de los ciclos de producción humana para un nivel determinado de desarrollo de las fuerzas productivas, tal y como lo muestra la
siguiente ilustración, donde el problema ambiental tiene su base en la depredación y la contaminación.
El desarrollo de la civilización ha modificado (en muchos casos de manera sustancial) el paisaje terrestre. Las ciudades y poblados, así
como los campos de los que se obtienen los alimentos, han removido a ecosistemas originales. También se ha generado la extinción de
numerosas especies, a la vez que se ha sobrecargado la atmósfera con gases y contaminantes que causan cambios en el clima, todo ello
para el establecimiento y funcionamiento de ciudades y pequeños poblados y su consiguiente crecimiento.
Los problemas ambientales actuales están directamente asociados con el modelo de sociedad industrial, donde la revolución tecnológica,
aunque ha sido eficiente en cuanto a aumentar y optimizar procesos de trabajo desde un punto de vista productivo, ha significado una
fuerte alteración en el orden de las relaciones ambientales, puesto que la producción industrial está presionada por un sistema económico
basado en la capitalización de la productividad. Su principal objetivo es lograr altos niveles de producción, mucho más allá de las
necesidades de la sociedad. En torno a ello, el estilo de vida de las poblaciones no se desenvuelve de la misma manera, dado que los
estilos de vida en las ciudades son distintos a los de poblaciones rurales, por ello se ahondará en esto a continuación.
Un hábitat es el medio en el que vive una población, por ello es de suma importancia considerar lo que representan los poblamientos; se
refieren a las formas en que el ser humano se asienta en un territorio y establece su residencia.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (2015), el número de habitantes que tiene una población determina si ésta
es rural o urbana. Por tanto, se considera que si tiene menos de 2,500 habitantes, será rural, mientras que en la urbana viven más de
2,500 personas. Debido a los constantes movimientos de migración del campo a la ciudad, el número de habitantes de localidades urbanas
se ha incrementado; en tanto, las poblaciones rurales han disminuido.
En 1950, menos del 43% de la población en México vivía en localidades urbanas. En 2010, la cifra se elevó en casi 78%. Mientras que para
la población rural, en 1950 el porcentaje contemplaba el 57%; en 2010 el porcentaje se ubicó en 22%.
La economía encuentra gran influencia en que la población se asiente en un lugar u otro, distinguiéndose dos grupos fundamentales de
acuerdo con la siguiente figura:
POBLAMIENTO
RURAL URBANO
No se producen suficientes recursos económicos para El espacio urbano creció por la emigración procedente
toda la población. Por eso hay importantes corrientes de poblaciones rurales, y su estilo de vida se extendió
migratorias, que se dirigen del campo hacia las por todo el mundo
grandes ciudades del propio país (éxodo rural).
Poblamiento
Rural Urbana
La actividad industrial es La industria ocupa a más del 40% de la población.
poco importante y ocupa En el sector terciario trabaja alrededor del 50% de la PEA.
menos de la tercera parte de Existen mayores posibilidades de encontrar empleo,
la población. numerosos servicios sociales y mayores ofertas culturales y
de ocio.
Las industrias son de tipo Posee una periferia cada vez más urbanizada, lo que ha
tradicional y de bajo facilitado la creación de amplias vías de comunicación y
rendimiento (textil, desarrollo del transporte público. La red de transportes está
alimentaria, etcétera). Otras diversificada, aunque con diferencias entre distintos países.
son de reciente instalación, Se genera gran cantidad de desechos (basura) y residuos
más actualizadas, gaseosos de automóviles, industrias, calefacciones.
aprovechando la Se consumen grandes cantidades de agua, alimentos y
disponibilidad de mano de energía, lo que afecta la disminución de los recursos
obra abundante y barata. naturales.
Contribuye a la degradación y contaminación
El sector terciario o de medioambiental: atmosférica (vehículos e industrias), acústica
servicios es poco productivo. (automóviles y locales de ocio) y de las aguas (vertidos
Predominan las actividades urbanos e industriales).
relacionadas con la El tráfico ocasiona graves problemas de circulación vial.
administración pública y el El acceso a la vivienda constituye, en algunas zonas, una
pequeño comercio. dificultad por su encarecimiento.
Hay problemas para el acceso al empleo, que en ocasiones
Poseen una red de carece de las condiciones adecuadas.
transportes y de La ciudad a veces se identifica con estrés.
comunicaciones insuficiente
y poco variada, lo que
dificulta desplazamientos.
Características de la población rural y urbana
Elaborado con base en s. a. (2009).
Ante el consumo exacerbado, generado principalmente por la excesiva inserción del mercado en la vida cotidiana de las poblaciones
(principalmente urbanas), existe una lógica de sustracción, en donde las comunidades rurales son las más afectadas.
En México, todo apunta a que el proceso de urbanización continuará en ascenso, y de acuerdo a cálculos del INEGI, se espera que las 384
ciudades que componen el sistema urbano nacional absorban el 81.1% del incremento demográfico total del país, mientras que la s grandes
ciudades (de más de un millón de habitantes) sean las que absorban el impacto del incremento demográfico nacional.
Proceso de intercambio
Fuente: http://consumoversusmedioambiente.blogspot.mx/
Recordemos que un estilo de vida sostenible implica un modelo de consumo sostenible. El concepto de estilo de vida sostenible se
refiere a los patrones de comportamiento determinados por las necesidades personales, deseos, motivaciones e interacciones sociales,
condicionados por contextos ambientales y socioeconómicos que apuntan a mejorar el bienestar y la salud de las generaciones presentes y
futuras.
De este modo, la relación del consumo con los estilos de vida se define como modelo de crecimiento, así como por el sistema de
producción, el cual se distingue por ser unidireccional; es decir, consiste en extraer, producir, consumir y desechar recursos. Por tanto, se
debe tener consciencia de que el consumo sin freno eleva el riesgo de agotar recursos naturales, en tanto que el planeta Tierra es un bien
común finito del que parte de la sociedad humana consume mucho y otra consume poco.
Cierre de la unidad
Al concluir la unidad, el (la) estudiante tendrá elementos que le permitirán explicar la importancia de los sistemas de producción de su
entorno a partir de la conceptualización de flujos de energía y su relación con la materia, su importancia en el sostenimiento de la vida, los
sistemas productivos y el desarrollo urbano y rural en el marco del medio ambiente y el consumo, en busca de contribuir a la conservación
y optimización de los recursos con respeto y tolerancia.
La presente unidad aportará el sustento para que el (la) estudiante comprenda con facilidad los apartados de la unidad 3, en donde se
abordará la relación de la macroeconomía y con los efectos generados en el medio ambiente.
Fuentes de consulta
• Dieren, W. (1995). Taking Nature into Account, Towards a Sustainable National Income. A report to the Club of Rome. Amsterdam:
IMSA.
• Enríquez, R. (2008). Introducción al análisis económico de los recursos naturales y del ambiente. Mexicali: Universidad aAutónoma
de baja California. Recuperado de http://fcm.ens.uabc.mx/~enriquez/complementos/cursos/LibroMedioambiente.pdf
• FAO. (1996). Cumbre mundial sobre alimentación. Recuperado de www.fao.org/docrep/003/w2612s/w2612s11.htm
• FAO. (2015). Hacer que la agricultura, la actividad forestal y la pesca sean más productivas y sostenibles. Recuperado de
http://www.fao.org/about/what-we-do/so2/es/
• Hauwermeiren, S. (1999). Manual de economía ecológica (2ª ed.). Quito: Programa de Economía Ecológica/ILDIS/ Abya-
Yala/Instituto de Estudios Ecologistas del Tercer Mundo. Recuperado de
http://fes.zonarix.com:8081/sites/default/files/pdf/indice_libros-manual-de-economia-ecologica_0357.pdf
• Instituto Nacional de Estadística y Geografía. (2015). Población rural y urbana. Recuperado de
http://cuentame.inegi.org.mx/poblacion/rur_urb.aspx?tema=P
• La Gra, J. (1993). Una metodología de evaluación de cadenas agro-alimenticias para la identificación de problemas y proyectos.
USA: University of Idaho.
• Labandeira, X., León, C. y Xosé, M. (2007). Economía ambiental. Madrid: Pearson Educación Recuperado de
http://www.segemar.gov.ar/bibliotecaintemin/LIBROSDIGITALES/ISBN8420536512LabandeiraLeonVasquezPearsonEconomiaAmbi
ental.pdf
• (s. a.). (2009). Características de la vida rural y urbana. Recuperado de https://socialpcpi2.files.wordpress.com/2010/02/bloque-vi-
lugares-distintos.pdf