Ejemplo de Teorización
Ejemplo de Teorización
Ejemplo de Teorización
La Teoría:
El fin último de una tesis doctoral es generar una teoría tal y como lo expresa Bunge
(1981), “Una teoría puede definirse como un contexto cerrado respecto de las operaciones
lógicas. En otras palabras, una teoría es un conjunto de proposiciones enlazadas lógicamente
entre sí y que poseen referentes en común” (p.51). De igual Morales (2011) afirma que “el
teorizar es el aspecto resaltante de la investigación ya que es el momento en el cual se realiza el
acto científico, el hacer ciencia y el generar conocimiento” (p. 21). Es decir, solo se puede llegar
a construir una buena teoría mediante el ejercicio de la imaginación creativa, apoyándose en la
información que emergió de los informantes a través del análisis hermenéutico.
Cabe decir que la presente teoría se construye a partir de los significados del ser en su
Dasein, es decir los significados que poseen los docentes de prácticas clínicas con relación con
su gestión académica. A razón de lo cual el constructo teórico se desarrolla por medio de
concepciones y principios que emergieron de la aplicación del método hermenéutico. Es posible
que algunos sean la confirmación de situaciones que empíricamente reconocidas y otras la
innovación de nuevas visiones, sin embargo están respaldadas por un análisis hermenéutico y
contextualizada en el área de medicina de la UNEFM.
Comenzaré por presentar dos definiciones básicas para la investigación como los son: la de
Prácticas Clínicas y Gestión académica. Las prácticas clínicas son unidades curriculares
fundamentales en la formación del médico, debido a que en su desarrollo se logran articular los
elementos teóricos y prácticos indispensables para su formación. Esta posee una doble función,
por una parte la formativa y por otra la asistencial.; en la primera ella permite alcanzar las
competencias básicas propias de cada especialidad que se cursa en las micropasantías; mientras
que en la segunda, permite a los estudiantes ayudan en la sanación de los paciente. En este
proceso formativo los estudiantes comienzan el contacto profesional con los pacientes, iniciando
de este modo el desarrollo del tacto requerido para la selección de la información. En la praxis el
pasante debe comenzar a trabajar en el manejo de emociones frente a situaciones complejas que
se le pueden presentar, pero además sirven como motivación y definición de la vocación de
servicio del profesional de la medicina.
1) Planificador, debe elaborar una planificación en cada encuentro considerando los casos
que tiene presente en el servicio y las exigencias del programa.
2) Comprometido con el crecimiento profesional, así estar dispuesto a aprender incluso en
el área de la docencia.
3) Formación pedagógica, poseer la formación que le permita el manejo de estrategias
didácticas en el desarrollo de su actividad docente.
4) Flexibilidad en las funciones que posee al desarrollar la práctica, sea de docente,
médico o asistencial. Dado que en algún momento puede transitar por cualquiera de
estos roles según sea la necesidad que emerja.
5) Manejo de normas de convivencia con los estudiantes y que deben estar claras desde el
inicio, donde se resalten aquellos valores que se consideren imperativo para la
formación.
6) Presentar un contrato académico y evaluativo debe ser elaborado en concordancia con
los propósitos del programa curricular. Este debe ser conocido y estar claro para los
estudiantes.
7) Relacionar los casos clínicos presentes en el centro asistencial de formación para
vincularlos con los las exigencias del curriculum.
8) La relación con los estudiantes debe estar basada en el respeto y compromiso.
9) Determinar las estrategias didácticas propias y adecuadas para cada actividad.
10) Estudiar las técnicas de evaluaciones oportunas y específicas para cada contenido
temático.
El proceso didáctico que defina las prácticas clínicas debe ser participativo, integral,
continuo, exigente y evaluado. En este sentido debe propiciar la participación del estudiante al
proceso como un ente activo; las prácticas deben realizarse en el tiempo planificado para el
aprovechamiento del mismo, de igual forma debe tener un nivel de exigencia acorde con la
responsabilidad que posee el médico. Por último las estrategias de evaluación deben ser claras
pero además integrales que permitan la adquisición de conocimientos habilidades y
competencias requeridas por el profesional en formación.
Teorización
En una tesis doctoral el fin último es generar una teoría sustancial ligada a un campo de conocimiento,
así lo deja de manifiesto Bunge (1981) cuando expresa que “una teoría puede definirse como un contexto
cerrado respecto de las operaciones lógicas. En otras palabras, una teoría es un conjunto de proposiciones
enlazadas lógicamente entre sí y que poseen referentes en común” (p.51). Al respecto Morales (2011)
afirma que “el teorizar es el aspecto resaltante de la investigación dado a que es el momento donde se
realiza el acto científico, el hacer ciencia y el generar conocimiento” (p.21). Los autores plantean que la
construcción del cuerpo teórico debe estar sustentada en la lógica de las teorías de entrada vinculada con
la información suministrada, además juegan un papel fundamental los estados de conciencia que emergen
a través del análisis hermenéutico, donde incide la creatividad e imaginación del intérprete y el
En el contexto de lo planteado el proceso indagatorio del trabajo aquí presentado, donde fue posible
adentrarme en la realidad yacente de los ambientes laborales universitarios, supuso un compromiso poder
comprender lo allí manifestado, sin embargo al ser una teoría sustantiva la que emerge del ella, devela el
significado de la seguridad y salud ocupacional en estos escenarios, desde el ser del trabajador
universitario, atendiendo a la experiencia vivida por ellos, reflejada desde sus pensamientos,
percepciones, opiniones y juicio particular. En este sentido, el constructo teórico que ha surgido en este
horizontalidad de la data proporcionada por los informantes en la exégesis que en mi rol de intérprete,
permitió el establecimiento de un cuerpo teórico fundamentado como parte del producto científico en este
estudio.
relaciones y principios teóricos, que desde un enfoque argumentativo viene a realizar una propuesta que
permita ampliar el espectro del conocimiento , amparado en una sindéresis acuciosa y profunda de lo que
representa el sensible campo de la seguridad y salud ocupacional, como disciplina indefectible y necesaria
para los ambientes laborales de las organizaciones, en perfecto estado síncrono con la exposición de la
realidad manifestada en este trabajo de investigación, para lo cual se hace necesario realzar la importancia
del establecimiento de los lineamientos de esta disciplina, como medio para proteger tanto la integridad
física, como la psicológica y emocional del trabajador, y al mismo tiempo elevar el desempeño global de
las organizaciones.
En este mismo contexto, los preceptos teóricos aquí establecidos, además de ser una sustentación
explicativa formada por constructos e ideas inherente a la acción disciplinar de la seguridad y salud
ocupacional, basada en la realidad manifestada en los ambientes laborales universitarios, representa por
otra parte, una fuente epistémica de gran alcance para el interés académico-científico y la gestión
organizacional, relativo al estudio de la protección del hombre (como especie) en su quehacer laboral.
Es propicio mencionar que Martínez (2009) presenta la teoría como es una construcción mental
mundo nuevo, esta postura es complementada por Payares (2019) cuando expresa que en el proceso de
generación de teoría pueden resultar: postulados, supuestos, principios, esquemas conceptuales, modelos,
cuerpo de teorías emergentes de carácter axiológico, sostenido en los juicios y proposiciones para la
seguridad y salud ocupacional en las entidades universitarias, donde se entretejen aspectos técnicos,
normativos y legales de esta disciplina y las consideraciones humanas devenidas de la experiencia vivida
comprensivo del leguaje que se conjuga a lo largo de todo el modelo teórico. El mismo, va más allá de
definir conceptualmente la esencia del leguaje que está presente en la temática, persigue además, ubicar el
contexto y los aspectos ligados, funcionalidad, caracterización y un esfuerzo por destacar su relevancia.
Por otro lado este marco nos lleva a un estado de comprensión de los principios fundamentales que se
proponen, y actúan en simbiosis sustancial del modelo teórico que ha emergido. Entre los aspectos a
definir en este marco conceptual se tienen: Ambientes laborales universitarios, contextos adversos,
Al hacer referencia a los ambientes laborales, se considera todos los elementos que envuelve la acción
del trabajo, las interacciones dadas entre el individuo trabajador, con los medios utilizados para adelantar
sus actividades y los objetos destinados a ser modificados o transformados a través de dichos medios. Así
mismo los ambientes laborales están constituidos sobre un tejido de acciones e interacciones sociales,
universitario. Para comprender mejor esto debo referirme a lo expuesto en el artículo 7 párrafo 2 de la ley
de universidades promulgada en el año 1970 donde se define al recinto universitario como “el espacio
académicas, de extensión o administrativas, propias de la institución” es decir la acción del trabajo en los
ambientes laborales universitarios está circunscrita o relacionada a estos grupos funcionales de trabajo.
para tal fin, para lo cual se requiere una fuerza de trabajo determinada. La función docente, por ejemplo,
se materializa de diversas formas, el aula de clases es ambiente laboral tradicional como lugar de trabajo
para el docente, sin embargo la función docente no solo es se limita al aula de clases, las asesorías,
consultas y orientaciones, que forman parte de la función docente, no necesariamente se dan en el aula de
campo o en espacios exteriores a fuera del recinto universitario es también parte de la función docente,
sin dejar de lado tareas de planificación y evaluación de los aprendizajes, que en la mayoría de los casos
Debo destacar que el acto docente también corresponde a los adelantados en los ambientes como
teórica que se expone en el proceso enseñanza-aprendizaje en las diversas modalidades, es decir que la
acción docente en talleres y laboratorios requiere de la interacción con equipos, materiales e insumos en
En este mismo orden de ideas, debo añadir que en la actualidad, el acto de la enseñanza se ha visto
de los ambientes virtuales, todas estas plataformas tecnológicas han hecho que la función docente o el
propio acto de la enseñanza se lleve a cabo de manera remota, apoyada en con todos los recursos
Por otro lado hay se hace necesario destacar, que muchos docentes universitarios puede tener
funciones diversas, es decir desempeñan las actividades propias de la docencia, y al mismo tiempo tienen
funciones administrativas como responsables de una unidad orgánica de la institución, llevada a cabo en
ambientes laborales tales como oficinas. De igual modo el docente puede realizar tareas como
investigador, o apoyo en investigaciones en centros de investigación o ambientes para este fin. Puede
actividades de extensión para poner a la disposición los conocimientos y la investigación en los distintos
ámbitos de la sociedad.
Asimismo, esta ley al referirse a la función administrativa universitaria, supone una connotación
amplia, y está referido al manejo de los recursos inherentes al funcionamiento de las entidades
universitarias, para lo cual esta dispuestas las distintas unidades, entre ellas las encargadas de administrar
el talento humano, los recursos financieros, el mantenimiento de infraestructura y servicios, entre otros.
Para ello se requiere de trabajadores para desempeñar tareas, por un lado, en las dependencias de
naturaleza administrativas, y por otro lado, aquellos trabajadores destinados a las labores de
mantenimiento, pudiendo ser aquellas de carácter técnico o también de labores elementales como
aseadores, jardineros entre otros. Así entonces puede reconocerse que los ambientes laborales para estos
pasando por ambientes como depósitos, almacenes, talleres de servicios, centro de reproducción, lugares
abiertos como pasillos, jardines y cualquier ambiente universitarios que requiera una función de apoyo
De este modo, mostrada la dinámica laboral y los distintos matices funcionales establecidos en la ley,
podemos definir a los ambientes laborales universitarios, como aquellos espacios destinados a la función
laboral intra-univesritaria, donde los trabajadores interactúan con medios y objetos de trabajo utilizados
para llevar a cabo sus actividades, con el fin de colaborar en el esfuerzo para cumplir los objetivos
Por otro lado, las actividades adelantadas en los ambientes laborales universitarios, suponen una
exposición de los trabajadores en el ejercicio de sus funciones, determinada por las características de los
objetos y medios de trabajo, las condiciones del entorno laboral y su comportamiento en el cumplimiento
de su tarea. De aquí entonces que las situaciones sobrevenidas por las condiciones generales del ambiente
Los ambientes laborales universitarios son espacios donde se llevan a cabo una diversidad de
actividades, por lo tanto su naturaleza también son variadas, concentradas principalmente en las áreas
De este modo, cuando se realizan análisis de los distintos puestos de trabajos, emergen factores que
predisponen a la degradación de la salud con el progreso del tiempo, en ocasiones esto pasa desapercibido
por las rutinas. También pueden esconderse factores, donde se combinen situaciones irregulares, que
puedan derivar, en cualquier momento, en un evento no deseado, que atente, tanto a la integridad del
trabajador, como a los activos materiales de la institución. La aparición de estos factores guarda estrecha
relación con la esencia y la naturaleza del mismo trabajo, e ineludiblemente va a estar latente la
posibilidad de manifestarse situaciones adversas que propicie la degradación de la salud del trabajador,
unos relacionados con aspectos ergonómicos, derivado de posturas en el sitio de trabajo, el prolongado
tiempo en ello, la iluminación del espacio, la ventilación del entorno, o una elevada carga laboral entre
otros.
Por otro lado está la manifestación de los factores físicos; el trabajador se sumerge en una dinámica en
la que interactúa con medios físicos que forma parte del ambiente laboral, en ocasiones una incorrecta
manipulación, o una acción inconsciente, puede desencadenar eventos no deseados. Son variadas las
razones que por factores físicos se torna adversidades, entre otras, la disposición incorrecta de
mobiliarios, falta de orden, inadecuada configuración del ambiente de trabajo; estando siempre latentes
Otros de los factores que constituyen adversidades en los ambientes laborales, son los de orden
psicosociales, vinculados a las excesivas responsabilidades que en muchos casos sostienen trabajadores,
relaciones conflictivas con otros trabajadores, apatía, o disconformidad laboral; de igual modo los
factores psicosociales está vinculada con situaciones externas que este experimentando el trabajadores en
el plano familiar o cualquier otra situación fuera de su trabajo, generando alteraciones psicológicas y
emocionales que lo lleve a un estado de perturbación, reflejándose en su desempeño laboral y con ello
De este modo, a las situaciones alejadas de la armonía entre los elementos que forman parte del
ambiente laboral y los trabajadores, que predisponga la degradación de su salud, se le denomina contextos
laborales adversos. Los contextos laborales adversos se manifiestan en presencia de uno o varios factores
de los antes mencionados, unos percibidos con claridad, otros en sigilosa latencia, haciéndose poco
notorio a la percepción en los ambientes laborales, pero con elevado potencial de daño.
Los contextos adversos en los ambientes de laborales, deben ser constantemente vigilados y
conciencia y reflexión sobre su entorno de trabajo y así poder notar la presencia de estos factores, tomar
riesgos que en otros, depende de la naturaleza laboral, pero ninguno debe ser subestimado, como ya se me
he referido, el acto consciente es la primera acción para afrontar los contextos de adversidades, cuando
estos contextos tienden agudizarse por factores ajenos al trabajador, dado a situaciones de orden
económico, o desatención por parte de los responsables, la conciencia de autoprotección cobra mayor
relevancia, la actitud, la coherencia y el sentido común y racional serán sus mejores aliados.
Asimismo la consideración de los principios de la seguridad y salud laboral para contrarrestar los
efectos que pudiera ocasionar los contextos laborales adversos, son en sí misma la opción más
conveniente, considerando que el abordaje desde esta disciplina es multidisciplinario, enfoca los distintos
matices de la realidad laboral, intenta desde los principios normativos y las herramientas de las múltiples
que constituyen el contexto laboral adverso, hasta llevarla a una realidad más favorable para el trabajador,
ocupacional para los ambientes laborales universitarios, no es por si solo una acción que contribuya de
manera efectiva en la materialización de un ambiente laboral saludable, es necesario además, que prive el
preventiva, pero con un papel determinado por el compromiso ante el cumplimiento de los objetivos
trazados desde la política de seguridad y salud ocupacional intra-universitaria, y una actitud flameante y
decidida en respetar y hacer respetar los preceptos, procedimientos, normas y mecanismos propuestos
Es por eso que el trabajador asume un rol fundamental, tanto en la concepción de la política preventiva
de la institución, como en su ejecución; es decir su posición debe ser activa, congruente con la política y
responsable en la obtención de resultados. Aunque la política está orientada hacia el ser del trabajador,
detección de desviaciones e irregularidades que se manifiesten a lo largo del tiempo. Su actitud proactiva
lo habilita para realizar recomendaciones desde la experiencia y el conocimiento, y con ello hacer aportes
posición de compromiso que asume el trabajador, orientado por su conciencia preventiva, ante el proceso
De este modo es importante destacar, que no es posible concebir una política de seguridad y salud
preventiva por parte del trabajador, vale decir, permitirle al trabajador comprender que su actitud,
colaboración y estar involucrado el proceso, es valioso y necesario, en tanto que la actitud pasiva e inerte
resultados positivos. Para involucrarlo, no solo considerándolo como fuente de información ante la
necesidad de colectar datos, sino también haciéndolo participe en la toma de decisiones, consultarlo sobre
De esta manera, la corresponsabilidad en la acción preventiva, hace al trabajador, más allá de un actor
preventiva, que asimile cognoscitivamente el conocimiento, y con ello poder interpretar todo el
andamiaje de dicha política, desde una perspectiva global, de tal manera que esté facultado para que la
pueda defender con criterio y juicio ante cualquier intento de modificación o reestructuración que
trabajador en el interior de los ambientes laborales universitarios, donde los actores involucrados asuman
con criterio, razón, compromiso, y un alto sentido de humanidad y respeto a la vida, y con ello procurar la
obtención de resultados satisfactorios para la institución universitaria; es lo que aquí se define como la
Para ganar una política efectiva en esta materia, orientada a las instituciones universitarias, debe
concebirse sobre la base de dos elementos fundamentales: En primer lugar, una visión estratégica desde
trabajo bajo liderazgos efectivos en la primera línea de los ambientes laborales, donde se condensen las
De igual modo desde las instancias gerenciales se debe emprender esfuerzos en la formulación de
estrategias destinadas a la gestión de los recursos necesarios para materializar la política, para lo cual se
elevar su espíritu de trabajo, la conciencia preventiva, y lograr una identidad institucional que los lleve,
no solo al compromiso con la materialización de la política, sino más allá de eso, me refiero a su
apropiación y defensa.
establecido a la normativa legal vigente, donde se establece que las políticas de seguridad y salud
ocupacional en los establecimientos de trabajo, debe orientar sus acciones de trabajo en dos áreas
específicas; por un lado las adecuación de los ambientes de trabajos, es decir procurar sitios de trabajos,
seguros, ergonómicos, higiénicos, aptos para el ejercicio de las facultades físicas e intelectuales y el
trabajo productivo, con procedimientos documentados y la fuerza laboral capacitada y entrenada en
materia preventiva.
Por otra parte, de acuerdo a la legislación, la política debe vigilar la salud del trabajador, el
comportamiento de la morbilidad y atender las afecciones de salud a causa del trabajo; todo esto bajo la
conducción de un servicio de salud disponible en las organizaciones; aspecto que entra sin ningún
ocupacional intra-universitaria, debe incluir en sus lineamientos, el diseño de planes de emergencia que
trabajador universitario, la política de seguridad y salud ocupacional intra-universitaria sostiene dentro del
libre, que estará vinculado al desarrollo de actividades de carácter deportivo, cultural, turístico, desarrollo
En este orden de ideas, es preciso destacar que la política en materia mencionada, debe ser divulgada
en todos los ambientes laborales de la institución, con el fin de promover su cumplimiento, dejar claro los
beneficios para los trabajadores y la institución, señalar la importancia de cumplir y hacer cumplir lo allí
establecido e involucrarse y familiarizarse con ella, de tal manera que se aspire en el mediano y largo
La cultura preventiva universitaria está referida al cúmulo de valores, creencias, costumbres, saberes y
arraigado en el ser del trabajador dentro de los ambientes laborales universitarios. Este enfoque se
caracteriza por ser común entre toda la fuerza trabajadora universitaria, quienes asumen conductas
Fomentar la construcción de una cultura preventiva universitaria debe ser el fin esencial al que se
ocupacional es una disciplina que por su carácter normativo, puede generar inconformidades en algunos
trabajadores, esto se debe a la poca familiarización y conocimiento que en ocasiones los trabajadores
sostienen con sus principios; la propia disciplina proporciona entre sus prácticas, procesos de formación y
capacitación dirigidos tanto al desarrollo de destrezas y habilidades para realizar el trabajo de forma
orientaciones y toda herramienta que promueva la conciencia individual y colectiva en las organizaciones.
ocupacional a la cotidianidad del trabajo, es decir, el cumplimiento de los lineamientos obedezca más allá
de la normas, a un acto conciencia por parte del trabajador, que por medio del discernimiento reconozca
De este modo, entender que la necesidad de protegerse en todo momento en los ambientes laborales
universitarios no constituye un estado paranoico, es más bien un estado de alerta latente en la conciencia
del trabajador universitario, combinado con el conocimiento y las destrezas para realizar el trabajo de una
forma segura; dicho estado de alerta le permitirá, además, identificar los contextos adversos presentados y
la forma de actuar ante ellos. La cultura preventiva implica también sostener un comportamiento
Otros de los rasgos que debe caracterizar la existencia de una cultura preventiva en la población
trabajadora de una entidad universitaria, se da cuando esta sea capaz de reconocer una situación de
inminente peligro en la que se encuentre envuelto otro trabajador y este actúe, conforme a los protocolos
establecidos por la política de seguridad y salud ocupacional, para intentar proteger la vida y el bienestar
de la institución.
Asimismo, la sinergia y el esfuerzo colectivo debe ser parte de la cultura preventiva universitaria. Así
por ejemplo, ante eventualidades de dificultad manifestados en la institución, que atente contra el
bienestar de sus trabajadores o de sus bienes, se requerirá de un trabajo en equipo, coordinado y plagado
Por otro lado, la cultura preventiva universitaria debe reflejarse en la visión que sostengan las
instancias gerenciales, por lo tanto de sus esfuerzos dependerá mucho llegar a consolidar dicha cultura.
Los responsables gerenciales deben fijar su mirada en el horizonte donde puedan proyectar la cultura que
anhelen para la institución; por lo tanto es en la formulación de los planes y programas donde se trazara
la ruta que conduce a la construcción de la cultura preventiva universitaria, en tal sentido, la orientación
La concepción de una cultura preventiva universitaria debe descansar sobre tres pilares fundamentales;
el primero, respeto por la vida y por la dignidad humana, para lograr un enfoque integral hacia el valor
como un recinto especial donde se lleva a cabo el acto del laboral que dignifica al trabajador universitario,
y por último, la formación y capacitación continua y sostenida, base para forjar trabajadores
universitarios con elevados estados de conciencia, comprometidos con la acción preventiva, y proactivo
Debo señalar con mucho énfasis, que la construcción de la cultura preventiva universitaria requiere un
esfuerzo significativo de todos los actores de la institución; por otro lado, demanda tiempo para lograr la
madures de la política de seguridad y salud ocupacional, en el que se harán los ajustes y correctivos
necesarios, y lleven a dichos actores a conductas ejemplares, que será la evidenciara genuina de la
existencia de dicha cultura preventiva universitaria, puesto que la cultura preventiva no está asentada
tácitamente en un documento, únicamente está dispuesta como esencia en los objetivos de la política, pero
solo podrá ser visualizada, en los actitudes, comportamientos, pensamientos y enfoques de la población
trabajadora respecto la preservación de la integridad, y en los resultados asentados en las evaluaciones y
Principios Fundamentales.
Estos principios constituyen el eje fundamental del modelo teórico, sus postulados dan cuentan de los
elementos medulares de los que será imprescindible en la concepción exitosa de la seguridad y salud
ambientes de trabajo, su abordaje se realiza con una visión integral, donde se ahonda en aspectos poco
preventiva.
Así entonces se procede a enunciar y presentar estos principios, comenzando por mencionar el
ocupacional; aquí se plantea la idea transversalizadora que representa aplicar los principios de esta
disciplina para transformar los ambientes de trabajo en lugares seguros y saludables para los trabajadores
universitarios adecuado a su dignidad humana. El segundo principio refiere al Principio del desarrollo
de la conciencia activa del trabajador como elemento fundamental en la acción preventiva; que
plantea una visión preventiva consiente desde la posición del trabajador, reflejada desde su conducta en
el ambiente laboral, con capacidad de reconocimiento de los contextos adversos y proactivo ante ellos,
con un sentido de responsabilidad para lograr la seguridad para sí mismo y para el equipo de trabajo.
Por otra parte, en el tercer principio establecido como Principio de la concepción de la política de
esta disciplina bajo preceptos gerenciales, que lleve a la comprensión desde un juicio crítico, la idea de
sostener un manejo de los recursos de una forma efectiva, funcional, planificada y organizada, y con ello
conjugan para la construcción de una cultura preventiva, y los esfuerzos que deben realizarse para aspirar
participación de los trabajadores, como agentes claves para la formulación de políticas en este campo
disciplinar en las organizaciones, partiendo del valor que implica considerar su sentir, su percepción, su
enfoque y su experiencia combinados con los principios propios de la seguridad y salud ocupacional.
Los ambientes de trabajo tanto físico como social, son lugares con unas características implícitas,
dispuestas para el desempeño de actividades físicas e intelectuales en un tiempo dado para ello, el
de orden productivo. Esto ocurre en un entorno dinámico y de interacción permanente entre el trabajador,
medios y objetos de trabajo, incluyendo el proceso de socialización necesaria entre los trabajadores dentro
del ambiente laboral. Cabe resaltar, que dicha dinámica no son actos meramente improvisados, sino que
De esta manera los ambientes de trabajo universitarios son de índole variadas, así por ejemplo se
tienes aquellas de carácter administrativos, llevadas a cabo generalmente en ambientes físicos de oficinas,
cuyos medios de trabajos son computadores, escáner, copiadoras, archivos, escritorios, salas de servidores
informáticos entre otros. En estos ambientes son lugares donde en ocasiones se realizan tareas bajo mucha
presión, dado al volumen de información, lapsos de entrega y la mecánica rutinaria de los procedimientos,
De igual manera, los centros laborales universitarios son escenarios donde prevalecen actividades de
dedican a las tareas de limpieza de los ambientes físicos (oficinas, baños, salas, pasillos y áreas
exteriores), labores de jardinería y espacios ornamentales. Por otro lado también están aquellos que se
y aires acondicionados, y adecuación de las edificaciones. Aquí el esfuerzo físico es de mayor demanda,
en cuya interacción laboral están implícitos una serie de riesgos y peligros particulares, que exponen a
Por otro lado, dentro de los ambientes laborales universitarios se cuenta con personal dedicado a las
tareas técnico-académicas; estas se dan usualmente en ambientes como: laboratorios, talleres, centro de
investigaciones y estaciones experimentales entre otros. Aquí las actividades laborales tienen una
connotación academicista e investigativa, por lo tanto representa la esencia misma de la universidad que
la reviste de gran importancia, no obstante hay que destacar el contexto de riesgo y peligros
particulares que envuelven estas tareas, pues en las operaciones de equipos o sistemas, o en la
manipulación de sustancias peligrosas, como químicos, cultivos orgánicos, que esconde un potencial
Entre la diversidad de ambientes laborales en las entidades universitarias, se cuenta con grupos de
trabajo dedicados a tareas de orden técnico en los diversos sectores como por ejemplo: las estaciones de
peligros particulares que no deben dejarse pasar desapercibidas, por lo que se requiere contar en estos
ambientes con labores preventivas para proteger a los trabajadores y a las instalaciones. Finalmente y no
menos importante, encontramos al personal de seguridad y vigilancia que llevan a cabo las tareas de
resguardo de las instalaciones universitarias; servicio que es permanente, con jornadas extensas y
Sobre las bases de la breve descripción de las entidades universitarias realizadas anteriormente,
pertinencia del término transformación, para efectos del presente estudio, está referido al cambio
efectuado en los sitios de trabajo por la introducción de los criterios normativos de la seguridad y salud
ocupacional, con el fin de proporcionar ambientes sanos, saludable y seguro para el trabajador
Dentro de este marco de planteamientos, se debe comenzar por afirmar que para lograr una dinámica
seguridad y salud ocupacional como base de la política, válido y adaptado a las realidades de estos
lugares de trabajo, que describa los ambientes internos, pero además identifique los potenciales riesgos y
peligros prevalecientes, definir procedimientos seguros de trabajo, regular las condiciones físicas del
accidentabilidad y de las enfermedades de orden laboral, así como plantear el resarcimiento de las
afecciones la salud del trabajador, y suprimir los factores que dan pie a estas manifestaciones.
Por otro lado, destacar un elemento de trascendencia y por demás un planteamiento innovador para las
entidades universitarias, me refiero al abordaje sus estados interiores del ser trabajador, la salud
emocional y psicológica, estos a menudos se ven afectados por factores intra-laboral, relacionados a
cargas de trabajo, conflictos con otros trabajadores, acosos, poca valoración entre otros, por otro lado
pueden provenir del ambiente externo, como problemas familiares, contextos sociales y económicos de
dificultad o de cualquier otra índole; esto generan en el trabajador bajo desempeño, actitudes pasivas,
poca concentración, y con ellos predisponerlos a desenlaces laborales no deseados. Ante ello se propone
dentro del programa de seguridad y salud ocupacional, abordajes integrales donde se brinden
herramientas para el manejo del estrés laboral y las emociones, orientaciones y acompañamiento
psicológicos, terapias conductuales y cualquier otra alternativa que ayude al restablecimiento de la salud
tejido de estrategias que servirá de lecho para fundar los lineamientos que vienen a dar forma a la política
vital para las entidades universitarias, estructurado para ir mucho más allá de los requerimientos
normativos y legales, es decir, no es un mero documento técnico, sino que en él se enarbola toda una
filosofía que estimula la praxis holopreventiva de trabajador, vale decir el cuidado total de su ser; cuerpo,
mente y emociones.
acordes y dignos para el desempeño de las actividades de trabajo, orientados por normas prácticas y leyes,
impulsada por un sostenido esfuerzo para posicionar en el futuro una cultura preventiva, que lleve al
cuidado de la salud del trabajador y de los bienes materiales de la institución, ganada a concebir
Para lograr llegar al estadio de la transformación de los ambientes laborales universitarios, se propone
trabajar sobre tres ejes transversales establecidos en el programa; el primero ligado al plano preventivo;
estas son acciones estratégicas que persiguen en una primera línea de ideas, mejorar las características de
los ambientes físicos a través de la estandarización de las instalaciones de trabajo, apegados a normas
referenciales, principios de orden, limpieza, asepsia, y con presencia de señalizaciones de seguridad que
De igual manera, estas acciones guardan estrecha relación con el propósito de logar resultados basado
exposición de trabajadores a contextos adversos. Por otro lado el acto preventivo pasa por concebir
ocupacionales, vinculada a correctas formas de realizar las tareas en los ambientes de trabajo, a decir las
igual modo deben estar bajo un esquema estratégico normativo y un acompañamiento para orientar al
trabajador a una práctica sana, segura y saludable, alejado de factores que predispongan al trabajador
Dentro de este marco argumentativo, y dando paso al planteamiento del segundo eje transformador, el
programa de seguridad y salud ocupacional desde la posición del trabajador universitario, destaca el
pensamiento de fomentar en él, desde los planteamientos del programa, un espíritu reflexivo sobre el
autocuidado y el estado consiente de alerta frente a los peligros, proponer ejercicios introspectivos, con el
fin instarlo a la valoración del ser y las dimensiones humanas, que lleve al trabajador universitario a
deponer las actitudes que vayan en detrimento de su salud y de su seguridad en los lugares de trabajo,
apoyado por los dictámenes propuesta en las normativas y las políticas establecidas para tal fin.
Este esfuerzo cargado de proposiciones reflexivas y razonadoras, para fundamentar el segundo eje
transformador del programa, demanda del trabajador el desarrollo de habilidades y un agudo espectro del
pensamiento para analizar su entorno de trabajo y pueda hacerse juicios para lograr la identificación de
condiciones de peligros y riesgos, y llevarlo a acciones la proactivas, para coadyuvar en las tareas de
revertir la condiciones adversas, o dar luces en la búsqueda de soluciones de una manera certera y
satisfactoria.
En cuanto al tercer eje transformador propuesto para mejorar los ambientes laborales universitarios, se
tiene el enfoque integrador de las acciones preventivas, es una visión sostenida en el programa de
seguridad y salud ocupacional, referida a la convergencia de los actores involucrados en la política en esta
materia. Esta posición de integración es condición sine qua non para el éxito y la materialización del
programa; requiere de un esfuerzo de todas las partes involucradas, es decir, por un lado los trabajadores
para quienes está orientado dicho programa, las autoridades institucionales, responsables de condensar
una política benéfica y protectora de la integridad de los trabajadores universitarios, y los grupos de
A este respecto, es necesario a firmar que el trabajador debe, por su parte, ser un agente integrador
dentro de la política, ganado no solo a exigir condiciones y sistemas de protección, sino además
colaborar con su actitud preventiva, con ideas innovadoras para cambiar contextos laborales adversos,
acciones sinérgicas desde su grupo de trabajo, ser porta voz y multiplicador de buenas prácticas, y presto
en todo momento para establecer vínculos necesarios con el resto de los involucrados en esta temática.
Por su parte, los las autoridades institucionales, tienen el deber de ampliar su visión en la resolución de
institucionales, entendiendo primeramente que los trabajadores, son el bien más preciado de su
institución, y el éxito y buenos resultados se deben esencialmente a ellos; por lo tanto su bienestar, en
todos los órdenes (físico, mental y emocional) es un aspecto elemental, en tanto entonces, se debe orientar
Cabe añadir que para tal enfoque integrador, el patrono debe ir de la mano de los trabajadores,
indagando sistemáticamente en los ambiente de trabajo sobre factores perturbadores, vigilar su salud
desde los entes o servicios destinados para ellos, fomentar actividades propias para ganar bienestar,
consultas médicas, programas de estímulo y recreacional, actividades de socialización entre otros, todo
ello en una sólida interacción y comunicación con el trabajador para dar garantía a una buena forma de
integración.
Cabe resaltar que los grupos de apoyos son aquellos profesionales y personal de la institución
campo, y su papel de integración está centrado a una función de enlace entre trabajadores y patrones,
filosofía preventiva, y sugiere las practicas correctas de trabajo, las normas aplicables y son colaboradores
permanentes en la definición de la política de seguridad y salud ocupacional, son claves en lograr
resultados de integración y dar parte en el avance de los objetivos propuestos en esta materia.
quedar explícito en el programa de seguridad y salud ocupacional, puesto que es el documento maestro
concebido para abordar la realidad de los ambientes laborales universitario en esta temática. La mejora
continua como enfoque gerencial debe estar implícito en dicho programa, que tribute en ganar centros de
preventivas universitarias, como ya se ha venido mencionado, sin duda con ella se logra en gran medida
allá de una simple elucubración que merodea su pensamiento en un momento dado ; requiere anclar en el
pensamiento al lugar de trabajo y los elementos su entorno, reflexionando sobre qué aspectos pueden
De este modo, al activar el estado de la conciencia dentro de su ambiente laboral, el trabajador logrará
con el transcurrir el tiempo y la experiencia, una maduración de su pensamiento que lo llevara al acto de
comprender todos aquellos elementos que interaccionan en la dinámica del trabajo, descubriendo así el
sigilos que se esconde detrás de cada movimiento, herramientas, equipos, materiales o cualquier otra
cosa que envuelva un potencial dañino a la salud de su ser, y al mismo tiempo, dicho estado reflexivo le
permita vislumbrar las acciones correctas para evitar daño para sí mismo, sus compañeros o a las
instalaciones de trabajo.
Es mucho sobre lo que se puede lograr a través de conciencia activa, tanto en el plano de la
asumiendo un estado de alerta y concentración en las acciones de trabajo, de igual modo una conciencia
activa plena, permitirá además, meditar con antelación las consecuencias que pudiera desencadenar un
contexto adverso, esto lo lleva a convertirse en un actor de concienciación entre la población trabajadora.
Hay que mencionar, además, que la conciencia activa en el trabajador universitario se hace evidente
cuando este se muestra preocupado por el estado de sus medios de trabajo, su conservación, buen uso,
participa del mantenimiento y restauración de estos, su resguardo seguro; y es vigilante activo de los
Asimismo, un trabajador que participa decididamente junto a los responsables de su ambiente laboral,
a realizar cambios para mitigar riesgos y peligros, es una manifestación inequívoca de patrones de
conciencia activa, pues desde su ser comprenden que estas acciones permitirán concebir ambientes de
trabajo, seguros y saludables. Un estado de conciencia con rasgos de maduración, guiara a los propios
trabajadores a tomar las iniciativas de mejoras con propuestas de ideas, mostrando la voluntad de ser parte
Habría que decir también que un trabajador maduro en la conciencia activa, es fácilmente reconocerlo
en su ambiente de trabajo, además por lo ya señalado en este particular, por ser un ser al que se le observa
respetuoso de las normas y las reglas de seguridad en su actividad laboral, adoptadas empíricamente o
documentadas en institución. Por otro lado es un agente que toma parte en la iniciativa de la
autoformación, se preocupa por indagar sobre cómo realizar trabajo bajo estándares seguros; es un porta
voz a los compañeros de sus conocimientos en el campo preventivo, procurando dar consejos y
Otro de los signos que denota una conciencia activa en el trabajador, se manifiesta en su respuesta
ante las señalizaciones de seguridad en sus ambientes de trabajo, comprendiendo y actuando conforme a
la información que estos les entrega. De la misma manera un trabajador reflexivo y consiente acata
instrucciones de sus jefes o responsables inmediatos sin ningún inconvenientes, siempre y cuando estas
no comprometa su integridad.
Sobre las base de estos planteamientos, es oportuno señalar que en la materialización de la política de
programas de seguridad y salud ocupacional deben establecer los procesos de formación y capacitación y
en ellos debe plantearse que toda practica formativa debe estar asociada al desarrollo de conciencia del
trabajador, es decir, sin distinguir el área de formación, en ella debe privar el acto consciente, así por
ejemplo debe estar implícito en áreas formativas como identificación de riesgos y peligros, usos de
formación específica.
En particular estos procesos deben centrarse principalmente el sentido del valor propio, la conciencia
del cuidado colectivo, autocuidado, y hacer hincapié sobre las consecuencias que puede desencadenar la
falta de conciencia en la acción del trabajo y su relación con los accidentes y las enfermedades laborales.
El trabajo de concienciación en los procesos de formación y capacitación, fomenta el valor del cuidado
individual, pero también se les debe mostrar a los trabajadores universitarios el impacto para la
institución y para el seno familiar que ocasionan accidentes incapacitantes o las fatalidades.
Otra área prioritaria para forjar estados de conciencia en los trabajadores universitarios, es el necesario
acompañamiento de los jefes o responsables directos, quienes deben orientándoles, no solo en la manera
correcta de realizar el trabajo, sino además de resaltar el valor que como empleados representan para la
institución, tanto en la esencia de trabajador, como en la figura de seres humanos portadores de dignidad.
Estos gestos les eleva el autoestima, despierta la conciencia del valor propio y respeto por su vida, la de
Si bien es cierto que contar con trabajadores dotados de actitudes consientes en sus actividades
laborales, es una tarea compleja para las gerencias y responsables de las entidades universitarias, también
es cierto que esto es posible si se emprende un esfuerzo sostenido, voluntad inquebrantable y una visión
amplia sobre la comprensión de las dimensiones humanas del trabajador. Ante ello el compromiso en esta
misión debe ser decidido, con propósitos claros, metas alcanzables y apuntar siempre al estadio más
Preceptos Gerenciales.
lineamientos dirigidos a proteger a los trabajadores universitarios, dentro del marco legal y normativo
vigente en el país, ante lo cual se propone una visión gerencial sostenida desde la realidad laboral, e
impulsada por un liderazgo, con amplio conocimientos en aspectos gerenciales, procedimientos de trabajo
Hay que mencionar, además que tal liderazgo debe ser empático y sensible a las necesidades de los
realizar aportes a los planes de prevención, enfocado en el bienestar colectivo. A su vez, debe ser
acucioso, meticuloso y crítico para realizar el abordaje que se requerido para sostener una gestión
satisfactoria. Otro rasgo característico del liderazgo dispuesto a colaborar en la gerencia de la seguridad y
una actitud sinérgica. Este perfil debe salir de las filas de los ambientes laborales universitarios, dado a
que su acción gerencial debe apoyarse con base a la experiencia práctica en estos ambientes.
Cabe mencionar, además, que una gestión exitosa de la política de seguridad y salud ocupacional intra-
universitaria, debe gestionarse bajo un modelo administrativo desde sus cuatro elementos fundamentales:
necesariamente una visión hacia dónde se quiere llegarse con el abordaje, esto enfocada en una misión
clara del ejercicio de seguridad y salud ocupacional para la institución, trazando rutas y definiendo las
metas de la política a cumplir en el corto mediano y largo plazo; diseñando cronogramas de trabajos,
plantear etapas, identificar tareas y actividades, elaborar presupuestos, asignar responsabilidades, prever
las fuentes de financiamiento, definir los procedimientos, estructurar los planes de trabajos, definir los
materiales para dar los pasos iniciales, entre otros aspectos que demanda la formulación y ejecución de la
política en esta materia, orientados por los objetivos definidos con antelación .
Para decidir sobre los aspectos a considerar en la planificación se hace necesario realizar un trabajo
exhaustivo de campo, es decir reconocer los ambientes de trabajo, las necesidades, definir prioridades,
considerar las áreas vulnerables de los ambientes laborales, ahondar sobre las formas convenientes de
mitigar los riesgos y peligros potenciales entre otros. Basado en esto, la gerencia debe realizar un análisis
pormenorizado de los costos implicados en estos trabajos, luego evaluar las alternativas de financiamiento
Por otra parte y en pro de materializar la gestión de la política de seguridad y salud ocupacional, es
necesario iniciar un proceso de organización de las actividades, tareas y planes de trabajo. Para esta etapa
se llega a elaboración de cronogramas de trabajo, sistematizar tareas en áreas de prevención, diseñar los
abordajes para el mejoramiento de los entornos de trabajo, definir los sistemas de capacitación y el
Personal (EPP) entre otros. Aquí es vital la asignación de responsabilidades, la definición de los tiempos
de trabajo y la disposición de recursos para estas tareas. La gerencia de la política debe procurar que
etapa considere todos los elementos demandados desde el punto de vista organizativo para el
Mientras tanto la etapa de la dirección y el control será considerada como un aspecto medular en la
gestión de la política de la seguridad y salud ocupacional, pues se trata de vigilar de todo el proceso de
implantación de la política, de acuerdo a lo planificado, por lo tanto cualquier desviación debe ser
atendida y corregidas, y se entregaran las orientaciones que permitirán encaminar las actividades, tareas y
procedimientos desde la dirección y control, los responsables de la gerencia institucional y los líderes
responsables de los ambientes de trabajo, tendrán un papel preponderante en esta etapa, su agudeza
profesional, su capacidad de inspiración, la sinergia de los integrantes del equipo trabajo, les será
necesario desarrollar habilidades blandas que los lleve establecer vínculos muy flexibles, entre la
Dentro de este marco de consideraciones es importante dejar claro, que para una exitosa política de
excluirla supondría echar andar la política sin un sentido orientador, llevándola a un estado de
incertidumbre sobre los resultados. Además sustentar la política bajo la visión de los procesos
gerenciales, significaría poner a la vanguardia a las instituciones universitarias, a la par de los estándares
internacionales en las que están ancladas las organizaciones modernas. Por otro lado, concebir la política
apoyado en la acción gerencial, llevaría a un manejo razonable de los recursos dispuestos para tal fin, sin
embargo el éxito dependerá en gran medida del compromiso de los actores involucrados, quienes deben
estar abocados como fin principal, lograr ambientes laborales seguros y saludables para el ejercicio del
trabajo.
El fin último de cualquier política de seguridad y salud ocupacional llegar a la construcción de una
cultura preventiva diseminada en toda la organización. Ciertamente llegar este estadio depende de la
política, donde juega un papel muy importante dos factores fundamentales a mencionar, en principio se
hecho referencia anteriormente; y el segundo elemento son los programas de formación y capacitación,
que también se ha hablado acerca de ello, pero que se ahondara aquí como factor transversal en la
seguridad y salud ocupacional en sus ambientes de trabajo, no siempre hay una consolidación de la
cultura preventiva, pues en ocasiones la política solo queda establecida como un mero cumplimiento de
trabajadora, más aun en la organización en sí misma; es decir no se asumen como propia el valor real de
la prevención ganada como una costumbre individual y colectiva, que aliente el cuidado integro de todo
su ser.
En este sentido llama la atención otro factor que torpedea la consolidación de la cultura preventiva en
las organizaciones, y es la visión errada que se consigue hoy en día en muchas organizaciones, referida
por un lado, a la posición que asumen los altos responsables de estas organizaciones e instituciones, en
relación a la seguridad y salud ocupacional, sosteniendo desde sus percepciones, que esta se trata de un
campo profesional con implicaciones significativas en los presupuestos de las organizaciones, y desde su
Esto ha llevado a estos líderes a limitarse a invertir solamente en lo estrictamente exigidos por las
leyes, como la elaboración de planes y programas que son engavetados, colocación de señalizaciones en
las áreas que no son interiorizados por los trabajadores, dotación de EPP fuera de normas, sin formación y
capacitación en estos temas, indiferencia ante los estados de ánimos, convirtiendo al trabajador en viles
máquinas de producción, en fin se deja relegado esta temática que es de gran trascendencia, a acciones
puntuales, mostrando con esto una posición frívola y poco empática con la condición humana de los
trabajadores.
Otro de los factores que impiden la consolidación de una cultura preventiva en las organizaciones
recae en muchos casos en la propia actitud de los propios trabajadores; esto porque la acción de la
seguridad y salud ocupacional es de carácter normativo y denota obligatoriedad, creando una resistencia
en cumplimiento al verse cercado por las normas. De igual modo por la poca familiarización con las
mismas y la falta de conciencia por la preservación de la vida en sus lugares de trabajo. Asimismo los
trabajadores perciben en estos lineamientos barreras para el ejercicio libre de sus actividades de trabajo,
llegando en muchos casos a evadir procedimientos de trabajos seguros, negarse a portar EPP en
ambientes de uso obligatorio, tener comportamientos inadecuados en ambientes de trabajo que los
exponen a situaciones riesgosas, en fin a romper cualquier norma de seguridad, sin ninguna actitud de
autoprotección ni de conciencia.
Mencionado todos estos señalamientos que atenta contra la mística y la esencia misma de la
seguridad y salud ocupacional, de brindar garantías de protección al trabajador desde todas sus
dimensiones humanas, dentro de sus ambientes de trabajo, se propone una visión sostenida desde los
programas de seguridad y salud ocupacional como un elemento pertinente para lograr la consolidación de
se definen claramente los nodos sobre los que se requiere trabajar, abordando las debilidades y las
barreras que socaban las bases de una política de seguridad y salud ocupacional y por consiguiente la
cultura preventiva.
Para el caso es necesario comenzar indicando que el esfuerzo a realizarse desde la formación y
capacitación debe centrarse en ciertos aspectos esenciales, entre ellos el desarrollo de la conciencia activa
del trabajador universitario, de la cual ya se ha abordado, pero el énfasis que aquí se realiza esta en como
formación, se requiere entregar a la fuerza laboral habilidades y conocimientos para activar la conciencia
movimientos y la interacción con los medios y objetos de trabajo, instruirlo a través de la implantación de
procedimientos seguros, y alertarlo sobre las consecuencias de hacerlo de forma errónea, de esta manera
personal con profundo dominio en la temática de prevención, allí se les insta a la fuerza laboral a
comprender su papel en el área de trabajo, recordar procedimientos, alertar sobre los riesgos, y
Por otro lado, recurrir a cursos y talleres también proporciona buenos resultados, estos dotan al
trabajador sobre conocimientos y habilidades propias de sus tareas y los lleva al ejercicio de las buenas
prácticas laborales. De igual modo deben adelantarse actividades formativas con énfasis en orientaciones
psicológicas y emocionales, son aspectos pocos abordados en las organizaciones, sin embargo requiere
especial atención, porque una deficiente salud en estos aspectos da pie a la manifestación de accidentes y
enfermedades ocupacionales, entregándoles de esta forma, herramientas que los ayude a sanar su interior,
desarrollo personal, educárseles en temas como las artes y la cultura general, esto creara en el trabajador
universitario un sentido de identidad institucional, que lo lleve apropiarse de todo aquello que les
entregue beneficio a su ser, como es el caso de la política de seguridad y salud laboral intra-universitaria,
y hará del trabajo un espacio más humano, acorde a su dignidad y su papel protagónico en la institución.
Por otro lado la socialización y el intercambio de saberes y conocimiento supondrán un espacio para el
aprendizaje y debe ser considerado en los programas de capacitación y entrenamiento. Esto le permite al
trabajador por un lado salir de la rutina laboral que eleva el estrés y las tensiones, y por el otro, el
encuentro con el conocimiento de una forma diferente pero muy satisfactoria, de esta manera seria útil
propiciar encuentros sociales, en aspectos deportivos o culturales, que los lleve sostener intercambios
libres de opiniones y experiencias, igualmente esto da pie para la realización de foros laborales donde se
planteen debates sobre temas laborales particulares, o ideas similares cuyo fin sea crear conciencia y
sobre diferentes barreras de protección, así emprender capacitaciones en casos donde es imposible
eliminar o minimizar los contextos adversos. De modo similar debe capacitarse a la fuerza trabajadora,
sobre el uso correcto de los medios de trabajo, a decir herramientas equipos y sistemas, de tal forma que
Aunado a esto, hay que hacer referencia a la formación en el uso correcto de los Equipos de Protección
Personal (EPP), es la barrera más próxima a la integridad física del trabajador y brindar cierta garantías
de protección, sin embargo un el uso incorrecto disminuye su efectividad, siendo indispensable entonces,
capacitar al trabajador en lo relevante de hacer uso correcto y también de buenas prácticas para su
Así pues también se hace necesario formar y capacitar a los trabajadores universitarios en leyes y
normas de seguridad y salud ocupacional. Las leyes ponen en contexto al ciudadano en cuanto a sus
deberes y derechos en este tema, mientras que las normativas les indican las referencias en cuanto a la
estandarización de su ambiente de trabajo, sus equipos, su entorno y su comportamiento en él. Para este
fin se deben establecer cursos y talleres orientado a la forma de interpretar y poner en práctica tales
instrumentos.
Por otro lado resultan de gran interés estas formaciones, para ganar conciencia en el trabajador y les
permita comprender a su vez, que las normas, procedimientos y reglamentos de seguridad no están
elaborados para obstaculizar su labor, por el contrario, para hacer del ambiente de trabajo, lugares
seguros, sanos y acorde a la dignidad humana, y ganados para el ejercicio pleno de sus facultades físicas e
intelectuales.
De lo antes abordado nos lleva a tratar el aspecto sobre la capacitación y formación en el área de la
seguridad y salud ocupacional orientado a las esferas gerenciales o responsables institucionales, y con ello
fortalecer también la conciencia activa en ellos, comenzando por estimular la sensibilidad humana y
hacerles comprender que la integridad de los trabajadores debe ser vista por encima de los intereses
productivos, partiendo por considerar a ellos como el bien más preciado de la institución, y que el éxito
En concordancia con estos señalamientos, cabe indicar que otra de las aristas a tocar en la formación y
institucionales es precisamente para forjar una visión diferente a las nociones y prejuicios que
erróneamente han asumido. Proponer por tanto, a través de de cursos especializados sobre gerencia de
seguridad y salud ocupacional, costos asociados a estas actividades, la gerencia de riesgos y manejos de
Adicional a esto, las formaciones para gerentes y responsables deben dirigirse a cambiar de paradigma
pensar que este campo disciplinar engruesa los presupuestos, a una perspectiva que les permita
les proporciona grandes beneficios a sus organizaciones o instituciones, pero por sobre todo les
proporciona bienestar al trabajador quien les permite cumplir con sus objetivos estratégicos.
Todo este esfuerzo de adelantar programas de formación y capacitación a todos los niveles
todos los involucrados, y una visión compartida y sostenida, sin ahorrar esfuerzos por avanzar en la ruta
trazada, podrá sentarse las bases para que desde una correcta política de seguridad y salud ocupacional, se
pueda erigir en el mediano y largo plazo una autentica cultura de la prevención, sólida y con un sustento
en la filosofía del valor del trabajador como ser humano y su pleno desenvolvimiento en las sociedades
organizacionales.
Sin dejar lugar a dudas, el trabajador universitario es pieza fundamental en la concepción de la política
está orientada esta política, por lo tanto no deben dejar de ser considerados. Ahora bien, acá nos estamos
refiriendo a considerar sus opiniones, sus ideas sentir y sus enfoques que contribuyen a dar forma y
En este contexto su participación activa debe ser considerado en los procesos de levantamientos de
información en los ambientes laborales, necesaria para la formulación de la política de seguridad y salud
ocupacional; ellos conocen en esencia su lugar de trabajo, por lo tanto tienen la capacidad de reconocer
aspectos importante, que desde una visión externa al ambiente laboral se le dificultaría hacerlo. Debe
aportar ideas complementarias, ligadas al carácter preventivo y mejoramiento de las condiciones en sus
ambientes laborales.
Sobre la base de estos criterios, debo decir que el trabajador tiene mucho que decir sobre este aspecto,
su espíritu esta ganado desde su introspección a imaginar ambientes laborales, idóneos para un ejercicio
pleno de sus facultades, y es parte de su responsabilidad ser un agente activo en esta materia, conviene ser
coparticipe en la mejoras de su propio lugar de trabajo. En la legislación venezolana existen las figuras de
delegados de prevención, quienes son electos entre sus compañeros de trabajo, tienen una función
representativa en los comités de seguridad y salud laboral, realizan importantes aportes en ella,
proponiendo mejoras, realizando denuncias y acompañamiento en las visitas sindicales y oficiales de las
En este mismo orden de ideas, vale decir que la participación activa del trabajador propuesta acá,
difiere al papel que sostiene el delegado de prevención, sin necesidad de que exista un antagonismo; por
el contrario puede existir una sincronía o un sentido complementario. La participación activa la puede
ejercer cualquier trabajador, sin investidura especial, sindical o de delegado, puesto que solo se requiere
plantear nuevas políticas de seguridad y salud ocupacional, cuando se considere mejorar las condiciones
laborales existentes, o cuando se esté llevando a cabo alguna modificación del puesto de trabajo,
introducción de nuevas herramientas, equipos o procedimientos de trabajo, para lo cual debe considerarse
emergencia pueden ejercer una participación activa, puesto que como conocedor del recinto universitario
puede dar luces en los planteamientos de estas actividades. Al mismo tiempo puede integrarse a
cualquiera de las brigadas que se conformen en los planes de emergencia, recibir capacitación y ser un
Todo lo expuesto aquí lleva a comprender la relevancia que tiene la participación activa de la fuerza
laboral de los centros universitarios, para concebir una política de seguridad y salud ocupacional intra-
universitaria adecuada a los nuevos paradigmas de las organizaciones modernas, no queda duda de los
aportes que pueda realizar en cada etapas de implantación de la política resulta de gran valor y la
enriquece sobremanera; y se ha argumentado bastante sobre este aspecto; con ello debe quedar atrás la
visión clásica de imponer la política de seguridad y salud ocupacional en las organizaciones, sin
considerar las opiniones y enfoques de los interesados en este temática, pues con ello se corre el riesgo
de dejar a un lado elementos trasnversalizadores que pueda dinamizar la construcción de una política
efectiva, y por el contrario se conciban políticas con estilos autoritarios, ineficientes que descansen
solamente en tecnicismos, sin hacer una consideración holística que conduzca a una política preventiva
humanizada.
De aquí entonces que se propone un enfoque de la seguridad y salud ocupacional mucho más
participativo, apegado a los principios legales y normativos vigentes en la legislación venezolana, pero
que emerja desde la esencia de la participación del trabajador universitario, con orientaciones desde las
unidades orgánicas encargadas de administrar esta política en la institución y el apoyo de los líderes y