Flores, Chiara Belen
Flores, Chiara Belen
Flores, Chiara Belen
EDUCACIONAL
Parcial 1- 2024
Integrante: Flores ChiaraBelen
DNI: 46.320.063
Carrera: Educacion Primaria
Consigna de trabajo:
Parcial 1- 2024
● A partir de la lectura del texto establecer vinculaciones con los aportes establecidos
en el Eje I (en referencia a los paradigmas de administración) y del Eje II.
Introducción
En este documento se tomará como texto central a "El Proyecto Educativo: los sentidos de la
acción" el cual presenta una propuesta integral para las instituciones educativas de la provincia,
enfocándose en la reflexión sobre las prácticas pedagógico-didácticas y la reorganización del
Proyecto Educativo. Se establece que el Proyecto Educativo actúa como una herramienta de
gestión que permite a cada institución definir colectivamente su experiencia escolar,
promoviendo un diálogo entre lo singular de cada institución y las políticas educativas comunes.
También aborda la relación entre las prácticas pedagógicas y las concepciones de enseñanza y
aprendizaje, destacando que estas deben ser explícitas y compartidas para lograr un enfoque
educativo coherente.
A partir de lo que presenta se establecerán relaciones con diferentes categorías las cuales son:
noción de organización. Proyecto Educativo; Estructuras o elementos de la organización formal
que surgen de la propuesta y función asignada. - Actores institucionales, tareas docentes y
Distinción entre elementos de la micropolítica y la micropolítica y argumentando las con Garcia,
Mnzine y Zelaya, Grinberg, S y Rockwell 2000.
Desarrollo
Por otro lado, se plantea que “el diagnóstico debe ser realizado con la participación de todos”
(GRINBERG, S. (2014) (pág. 188)). Este énfasis en la colaboración y la inclusividad es crucial,
ya que garantiza que el Proyecto Educativo no se diseñe de forma aislada, sino que tenga en
cuenta las necesidades y perspectivas de toda la comunidad educativa. Esto fomenta un sentido
de responsabilidad compartida y ayuda a construir una visión común.
Este enfoque permite entender cómo los actores no son técnicos que ejecutan instrucciones,
sino que son protagonistas que procesan información, lo que resalta la importancia de la
participación activa de todos los miembros de la comunidad educativa. Además, se enfatiza que
"la “combinación de ambos enfoques para lograr un conocimiento más aproximado de la
realidad particular de cada escuela” (Garcia, Manzione y Zelaya 2015 en el título “Profundizando
el concepto de micropolítica escolar”) lo que subraya la relevancia de la micropolítica en la
adaptación de las prácticas educativas a las realidades específicas de cada contexto.
En contraste, la macropolítica se relaciona con las políticas educativas más amplias que guían el
funcionamiento de las instituciones. Como se menciona en el texto, "estas concepciones se
presentan como articuladas entendiendo que aquellos lineamientos de política educativa
elaborados en el plano de las macropolíticas inciden de manera sustancial en las dinámicas
micropolíticas" (Garcia, Manzione y Zelaya 2015, en el título “Diversidad Ideológica”)
Esta distinción es crucial, ya que permite a las escuelas adaptar sus prácticas a las realidades
específicas de su contexto, mientras se alinean con las directrices generales del sistema
educativo. Además, se destaca que "cada investigación orientada a indagar las dinámicas
organizacionales de las escuelas debe contemplar un equilibrio entre lo macro y lo micropolítico"
(Garcia, Manzione y Zelaya 2015, en el título “Críticas a la micropolítica escolar”), lo que subraya
la importancia de considerar ambas dimensiones para una comprensión integral del
funcionamiento educativo.
Los supuestos epistemológicos que sustentan la propuesta del Proyecto Educativo se centran
en una concepción integral del conocimiento, la ciencia y la sociedad. Se reconoce que "pensar
estas prácticas con sentidos compartidos supera la idea de establecer acuerdos sobre cuáles
contenidos” (Proyecto Educativo (pag.2)), esto se alinea con la idea de que "la mediación de
este encuentro supone una actividad" (Rockwell 2000 (pág.14)) que transforma el conocimiento,
lo que implica que la educación no es solo un proceso de transmisión de información, sino un
espacio de interacción y construcción conjunta de saberes.
Se reconoce que pensar estas prácticas con sentidos compartidos supera la idea de establecer
acuerdos sobre cuáles contenidos. En este sentido, es fundamental entender que "sólo
reconociendo esta heterogeneidad cultural del ámbito escolar, será posible establecer relaciones
específicas entre las variables del desarrollo humano y ciertas prácticas escolares específicas”
(Rockwell 2000 (pág.11). Esto sugiere que el enfoque educativo debe ser flexible y adaptativo,
considerando las diversas realidades y contextos de los estudiantes.
Esto implica que la educación debe ser entendida como un proceso dinámico y contextualizado,
donde los alumnos son vistos como agentes activos en su propio aprendizaje. La co-
construcción del conocimiento es clave, ya que "las generaciones jóvenes contribuyen con sus
propias historias individuales y colectivas a la construcción de las culturas escolares" (Rockwell
2000(pág.20). Este enfoque promueve un aprendizaje en el que los estudiantes no son
receptores pasivos, sino participantes activos en su proceso educativo.
Finalmente, esta perspectiva promueve un enfoque que trasciende la mera transmisión de
conocimientos, fomentando la construcción de saberes significativos. Como se menciona, "la
dimensión histórica de la compleja vida escolar actual" (Rockwell 2000 (pág.22)) debe ser
considerada, lo que implica que el aprendizaje debe ser relevante y conectado con las
experiencias de vida de los estudiantes. Así, se fomenta un aprendizaje que no solo se basa en
la adquisición de información, sino en la creación de significados que resuenen con la realidad
de los alumnos
Conclusión
Bibliografía: