Definiendo Caminos
Definiendo Caminos
Definiendo Caminos
Definiendo Caminos
Autoras
Conde, Macarena
Del Buono, Luciana
Resumen
La Orientación Vocacional nació en Estados Unidos a comienzos del siglo XX, en sus
inicios, se definió como una ayuda en la transición de la escuela al trabajo. La Orientación
Vocacional surge como una necesidad de proporcionar a los alumnos la información
necesaria para su adecuada inserción en el mundo del trabajo. Ya que se entiende por
Orientación como el proceso de ayuda continua que se les da a las personas en todos sus
aspectos, con el objetivo de potenciar la prevención y el desarrollo individual y social del
individuo a lo largo de la vida. En Latinoamérica y más precisamente, en la Argentina, se
puede marcar sus comienzos en la década del 50. Su surgimiento responde a factores
estructurales (sociales, económicos) muy complejos, que debían ser atendidos por expertos
en ciencias sociales.
No es tarea fácil, definir cuál va a ser el camino a seguir, una vez terminados los estudios
secundarios. Los adolescentes, suelen sentirse perdidos a la hora de decidirse; ya sea por
una carrera universitaria, un terciario, un oficio, etc. A veces, hasta llega a agobiarlos, sólo la
idea de tener que decidir entre una u otra cosa. Pero se cree, que esto se debe en mayor
medida, a la falta de información, respecto de las ofertas que existen en el mundo
académico y/o laboral, y muchas veces, incluso, a que ni siquiera pueden reconocer, sus
propias capacidades, gustos, deseos. Y esto, sólo lo logran, cuando se encuentran frente a
frente con el cuestionamiento. Necesitan de un otro, que les acerque las diferentes ofertas;
que les pregunte que es lo que desean para su futuro; que les enseñe a informarse por su
propios medios; que los ayude a construir una idea, reconociendo sus capacidades, de
como se ven en un futuro; que los oriente a construir su vocación.
Desarrollo
El trabajo de Orientación Vocacional Ocupacional se lleva a cabo mediante diversos
instrumentos de registro: entrevistas individuales, grupales, administración de pruebas
proyectivas y psicométricas, plenarios; sobre los cuales, luego, se realizan análisis
cualitativos y cuantitativos, para poder ofrecer una devolución a los alumnos participantes. A
partir de la participación en el Proyecto “Mentoreo”, pudimos observar como influye la falta
de información, a la hora de tomar una decisión respecto al camino a seguir. El no saber de
qué se trata, en la práctica real una profesión X, o un oficio; no saber si hay un lugar donde
perfeccionarse, donde cursar los estudios universitarios o terciarios. Se observa el asombro
en los estudiantes, al conocer carreras, cursos u oficios, de los que no estaban informados;
o cuando creen saber de qué se trata, por ejemplo la psicología, y se dan cuenta, que sólo
tenían una imagen acotada, de las áreas en las que puede trabajar un psicólogo. Estará
dentro de las funciones del orientador, intentar cubrir las expectativas que los alumnos
vuelcan en el programa, informándolos, acompañándolos y asesorándolos, para a partir del
paso por este proceso, llegar a tomar la decisión adecuada.
Siguiendo estos lineamientos, nos resulta indispensable establecer que este proceso de
orientación escolar se debe pensar desde una co-producción con los mismos alumnos.
Poniendo en marcha lo que denomina Montero (2012) como la identificación y jerarquización
de necesidades y recursos para satisfacerlas. Este proceso de identificación consta de un
conjunto de actividades grupales, fundamentalmente participativas, buscando que los
propios alumnos puedan señalar aquellos aspectos que atañen a sus proyectos
vitales.Entendiendo así que toda necesidad involucra un juicio de valor y un contexto
determinado, por lo que resultaría indispensable que los alumnos participen en la
constitución de las mismas.
Creemos que sería de gran ayuda, que los alumnos puedan contar con un programa de
Orientación Vocacional Ocupacional, en el último año de la secundaria.
Sin embargo, los adolescentes deben tomar mucho antes una primera importante decisión,
que modalidad escolar elegirán. Por eso creemos que sería interesante que en el tercer año
de la secundaria, los estudiantes reciban información detallada, de qué se trata cada
orientación (Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, Economía y Administración, Lenguas,
Arte, Agrario/Agro y Ambiente, Turismo, Comunicación, Informática y Educación Física),
cuáles son las profesiones que se realizan con cada una de ellas; que posibilidades hay de
estudiar X carrera en su ciudad, o en que otra ciudad puede encontrarla.
En este caso, deberíamos hablar de una Orientación Educativa, la cual incluirá no sólo a los
orientadores, sino también a docentes, directivos, padres, profesionales y comunicadores
sociales. Se puede trabajar en conjunto con orientadores vocacionales ocupacionales, para
que el proceso sea más rico en información para los alumnos.
En principio, los directivos y docentes, del colegio en donde se lleve a cabo a la tarea de
orientación, deben comprometerse con el tema. Con esto, se hace referencia, a que deben
perfeccionarse en cuanto a lo que es la Orientación Vocacional Ocupacional, ya que si bien
el trabajo será sobre cuál orientación de secundaria elegirán, está directamente relacionado,
con la decisión que en el futuro tomarán al terminar sus estudios secundarios. La institución
educativa debería contar con un Equipo de Orientación Escolar conformado por: un
psicólogo, un psicopedagogo, un asistente social, un orientador escolar; el cual trabaje en
forma conjunta con los docentes y directivos, y familias de los alumnos.
Luego de realizadas las entrevistas, se pasará a una segunda etapa, donde el trabajo
deberán realizarlo los integrantes del Equipo Orientador, con los docentes y directivos.
Dicho trabajo, consistirá en analizar las entrevistas tomadas. Observando lo que cada
alumno expresó, y haciendo una puesta en común, de lo que cada uno, desde su lugar de
trabajo, observa en dicho alumno: actitudes, conductas, modos de relacionarse, rendimiento
en las diferentes materias, etc.
En una tercera etapa, se les ofrecerá información detallada, sobre qué consiste cada una de
las orientaciones de la secundaria. Esta información puede ser presentada, a través de un
power point, donde se exponga, por ejemplo, que materias incluye cada una de las
orientaciones; y la relación entre las orientaciones y las carreras universitarias, terciarias, u
oficios. También, sería importante, incluir en esta exposición, formas en la que los alumnos
puedan buscar información sobre temas de su interés, o simplemente para profundizar la
información brindada en el power point. Es importante, que los alumnos, aprendan a
informarse solos. Esto no solo les servirá, para este proceso de Orientación Vocacional, sino
en el futuro para diversas situaciones de la vida.
Antes, durante y al final de la presentación, se alentará a los alumnos, a que expresen sus
dudas, que realicen preguntas; que se sientan partícipes de la actividad, y no simples
observadores.
En esta etapa, se incluirá como una sub-etapa, un encuentro con los alumnos, docentes,
equipo directivo y los padres. En dicho encuentro, se les pedirá a los padres, que les
cuenten a los alumnos, cuáles fueron sus experiencias; como llevaron a cabo la elección de
la orientación del nivel secundario; cuánto influyó esto en su futura elección ocupacional-
vocacional; como es su relación actual con el mundo laboral. De esta forma, los alumnos
recibirán información de experiencias reales, y de personas significativas para ellos. Podrán
dilucidar, que la elección depende de muchos factores, y que por esto mismo debe ser muy
personal. Se cree que sería importante recalcar en este encuentro, la importancia de
informarse bien, antes de tomar cualquier decisión; y explicarles que en este proceso los
aspectos evaluados tendrán que ver con las capacidades personales de cada uno,
resaltando sus fortalezas, y que sean cuales sean sus intereses, no se tomarán a los
mismos, como correctos o incorrectos. Un principio fundamental de dicho proceso, será
respetar sus intereses personales, y finalmente la decisión que tomen acorde a estos.
La evaluación de dichos cuestionarios, será llevada a cabo por los integrantes del Gabinete,
y presentada, luego, ante los docentes y directivos, llevando a cabo un plenario donde sean
expuestos los diferentes puntos de vista, tal como se hizo con las entrevistas.
Finalmente, una vez evaluados cada uno de los casos, se procederá a la creación de un
informe de devolución. Dicho informe consistirá en el análisis de las observaciones y
emergentes registrados en el transcurso de la práctica. Se resaltarán los aspectos
saludables de los alumnos, sus capacidades, posibilidades, recursos con los que cuentan.
Se piensa que será de gran importancia, y influirá significativamente en el proceso, que los
docentes tomen en cuenta algunas cuestiones puntuales a la hora de presentarse ante los
alumnos, en el dictado de cada una de sus materias. Se detalla a continuación, qué es lo
que podría hacer cada docente, para colaborar con el proceso de orientación:
- Aprovechar las salidas y visitas que realice para mostrar a los alumnos no sólo que cosa
se realiza allí sino quiénes y cómo trabajan en ese lugar.
- Tratar de informar a los alumnos sobre todo lo que sepa acerca de su actividad científica,
técnica, profesional o artística, sin suplir con prejuiciosas opiniones su desconocimiento.
- Aprovechar las preguntas y dudas de los alumnos para hablar de las distintas carreras que
conoce, qué se estudia y cómo se estudia, procurando no demostrar sus preferencias y
rechazos por unas u otras.
- Comentar con los alumnos los inventos y descubrimientos importantes que se produzcan
en la ciencia, el arte y la técnica.
- No inducir prejuicios en los alumnos diciéndoles que “sirven” para una carrera y no para
otra.
- Ante un alumno que no aprende su materia, preguntarse si no aprende por que no tiene
interés o no tiene interés porque tiene dificultades para aprenderla y conocerla.
- Considerar que las aptitudes y el interés son producto de una evolución. Nadie es apto
desde que nace para una cosa ni inepto para otra.
- Pensar que cada alumno es un individuo capaz de elegir por sí mismo y definir su propio
proyecto personal. Bohoslavsky, R. (1971). Orientación vocacional: la estrategia clínica. Buenos
Aires: Galerna.
El proceso de orientación debe llevarse a cabo con el mayor compromiso posible, de todas
las partes integrantes: docentes, equipo directivo, gabinete, padres y alumnos. Es de gran
importancia, el trabajo conjunto, y que quede abierta la posibilidad de diálogo, ante cualquier
situación particular que se presente. Si bien, se han propuesto pasos a seguir, el proyecto
debe tener un grado de flexibilidad, ante alguna eventualidad; y debe quedar abierto a
cualquier sugerencia o crítica, que lo haga mejorar.
Conclusión
Se espera que a partir de esta intervención, los alumnos además de poder decidir qué
orientación elegir de la escuela secundaria; aprendan la importancia de estar informados, y
que no sólo esperen a que dicha información les llegue de alguien más, sino que sean ellos
mismos quienes puedan buscarla, y profundizar en las áreas que más les interesen.
También se cree, que el compromiso que tomen los docentes y el equipo directivo de la
institución, puede ayudar a que la “escuela” como institución general, recupere valores
perdidos. Los alumnos de hoy en día, creen que el paso por dicha institución, de nada les
servirá en el futuro, no le encuentran sentido a la enseñanza brindada en ella.
Si bien son muchos los factores que influyen en esta situación: económicos, políticos,
sociales, etc.; desde este proyecto se trabajará sobre y con, los docentes y alumnos,
evaluando y analizando, que los lleva a perder el interés, para así poder colaborar a que
esta situación se revierta.
Se ha observado, que los docentes también han perdido compromiso, al momento de dictar
sus clases; y se piensa que este puede ser uno de los factores más influyentes.
Bibliografía
❖ Bohoslavsky, R. (1971). Orientación vocacional. La estrategia clínica. Ed. Galerna, Buenos
Aires.
❖ Lagos, F., & Palacios, F. (2008). Orientación vocacional y profesional en colegios de bajo
nivel socioeconómico: percepciones de orientadores y estudiantes. Calidad en la Educación,
(28), 204-243.
❖ Rascovan, S. (2005). Orientación Vocacional: una perspectiva crítica. Paidós.
Paidós.