Sistema Nervioso Periférico
Sistema Nervioso Periférico
Sistema Nervioso Periférico
PARES DE NERVIOS: Los nervios espinales se dividen en cinco grupos. Cada uno de ellos está
relacionado con una zona de la columna vertebral, y sus nombres tienen su origen en las vértebras desde
las que surgen.
1. Nervios cervicales: Los nervios cervicales son aquellos nervios espinales cuyo origen se encuentra
en el segmento cervical de la columna vertebral. A pesar de que solo existen siete vértebras cervicales
(C1 – C7), hay ocho nervios de este tipo (C1 – C8).
Todos ellos salvo C8 surgen por encima de su vértebra correspondiente, saliendo este último por
debajo de la C7.
Esto hace que sean nervios distintos al resto, ya que los demás emergen por debajo de las vértebras
que les dan sus nombres. En la distribución posterior se incluyen el nervio suboccipital (C1), el nervio
occipital mayor (C2) y el tercer nervio occipital (C3).
Por otro lado, la distribución anterior incluye en plexo cervical (C1 – C4) y el plexo braquial (C5 –
T1). Los nervios cervicales, por otro lado, inervan músculos como el esternohioideo, el esternotiroide,
y el omohioideo.
2. Nervios torácicos: Los nervios torácicos son los doce nervios espinales cuyo origen se encuentra en
las vértebras torácicas. Cada uno de ellos sale por debajo de su correspondiente vértebra: así, el T1
tiene su origen debajo de la del mismo nombre. Sus ramas van directamente hacia los ganglios
paravertebrales, que forman parte del sistema nervioso autónomo.
Los nervios torácicos están implicados en las funciones de órganos y glándulas en la cabeza, en el
cuello, en el tórax y en el abdomen.
En las divisiones anteriores, los nervios intercostales vienen de los nervios T1 al T11, y pasan entre
las costillas. En T2 y T3, otras ramas forman el nervio intercostobraquial. El nervio subcostal surge
del T12, y pasa por debajo de la duodécima costilla.
En cuanto a las divisiones posteriores, las ramas mediales de las ramas posteriores de los seis nervios
torácicos superiores pasan entre el dorso semiespinal y el multifido. Después, llegan hasta el romboide
y el trapecio, y alcanzan la piel a los lados del proceso
espinoso. Esta rama sensitiva es conocida como el ramo
cutáneo medial.
3. Nervios lumbares:
Plexo lumbar:
Los nervios lumbares son aquellos que emergen de las
vértebras lumbares. Están separados en divisiones posteriores y anteriores.
Divisiones posteriores: Las ramas mediales de las divisiones posteriores de los nervios lumbares
pasan cerca de los procesos articulares de las vértebras y terminan en el músculo multífido. Los
laterales funcionan en conjunto con los músculos erectores de la columna.
Los tres nervios lumbares superiores envían nervios cutáneos que llegan hasta el latissimus dorsi
en el borde lateral de los músculos erectores de la columna. Después, descienden por la parte
posterior de la cresta ilíaca, hasta llegar a la piel de las nalgas. Algunas de sus ramificaciones se
extienden hasta el nivel del gran trocánter.
Divisiones anteriores: Las divisiones anteriores de los nervios lumbares y sus ramificaciones
aumentan de tamaño cuanto más abajo en el cuerpo se encuentran. Se unen, cerca de sus orígenes,
con los rami communicantes grises de los ganglios lumbares y el tronco simpático.
Estos rami están formados por ramificaciones largas y delgadas que acompañan a las arterias
lumbares alrededor de los lados de los cuerpos vertebrales, por debajo del psoas mayor. Este
arreglo es algo irregular, en el sentido de que un ganglio puede dar rami a dos nervios lumbares, o
uno de estos nervios puede recibir rami de dos ganglios.
Los cuatro primeros nervios lumbares están conectados con la parte lumbar del tronco simpático
mediante un ramus communicans blanco. Los nervios pasan de manera oblicua hacia fuera por
debajo del psoas mayor, o entre sus fascículos, distribuyendo filamentos tanto a él como al
quadratus lumborum.
Los tres primeros nervios y gran parte del segundo están conectados en esta localización por bucles
anastomóticos, formando de esta manera el plexo lumbar. La parte más pequeña del cuarto se une
con el quinto para forma el tronco lumbosacral, que ayuda en la formación del plexo sacral.
Así, el nervio L4 se conoce como nervio furcal, debido a que está dividido entre los dos plexos.
4. Nervios sacrales:
Los nervios sacrales son cinco pares de nervios espinales que salen por el sacro en la parte inferior de la
columna vertebral. Sus raíces comienzan dentro de la columna al nivel de la vértebra L1, donde empieza
la cauda equina; y más tarde descienden hasta la altura del sacro.
Hay cinco pares de nervios sacrales, emergiendo la mitad de ellos por el sacro en el lado izquierdo y la
otra mitad en el derecho. Cada uno de ellos emerge en dos divisiones distintas: una lo hace a través de la
foramina sacral anterior, y la otra a través de la foramina sacral posterior.
Estos nervios se dividen en diferentes ramas; y las de cada uno de ellos se juntan con las de los otros,
además de con las ramas de los nervios lumbares y el coccígeo. Estas anastomosis de nervios forman el
plexo sacral y el lumbosacral. Las ramas de estos plexos son las que trabajan en áreas como las caderas,
las pantorrillas, las piernas o los pies.
Los nervios sacrales tienen fibras tanto aferentes como eferentes; y por lo tanto, son responsables de la
mayor parte de la percepción sensorial y los movimientos de las extremidades inferiores del cuerpo
humano.
De los nervios S2, S3 y S4 surgen el nervio pudendo y las fibras parasimpáticas, cuyos potenciales
eléctricos trabajan con el colon descendente, el recto, la vejiga y los órganos genitales. Estas sendas tienen
también fibras tanto aferentes como eferentes; y por lo tanto, llevan tanto información sensorial al SNC
como órdenes motoras a estos órganos.
5. Nervio coccígeo
Por último, el nervio coccígeo es el número 31 dentro de los espinales. Surge del cono medular, y su raíz
anterior ayuda a formar el plexo coccígeo.
A diferencia de los anteriores, no se divide en una rama medial y otra lateral. Sus ramificaciones llegan
principalmente a la piel sobre la parte trasera del coxis.
Origen y destino
Los nervios espinales viajan desde el Sistema Nervioso Central (SNC) hasta prácticamente todos los
rincones del cuerpo humano. A excepción de algunas zonas de la cabeza y del cuello, de cuyo control se
encargan los pares craneales, todos los órganos, músculos y glándulas del cuerpo transmiten y reciben su
información a través de estos nervios.
Así, un solo nervio puede transmitir y recoger información de varios órganos distintos, de la piel, o de
diferentes glándulas. Mediante las ramificaciones en las que se dividen, cada uno de ellos puede realizar
múltiples funciones, formando un complejo sistema que conecta todas las partes del cuerpo con el sistema
nervioso central.
Funciones
Como ya hemos visto, los nervios espinales son tanto aferentes como eferentes. Esto quiere decir que cada
uno de ellos cumple una doble función; ambas son fundamentales para el correcto funcionamiento del
cuerpo humano.
Por una parte, los nervios espinales recogen la información de los órganos, glándulas o músculos con los
que están conectados y la transmiten al sistema nervioso central a través de la médula espinal. De esta
manera, el cerebro puede procesar todos estos datos y elaborar una respuesta adecuada a una determinada
situación. Por otro lado, los mismos nervios espinales son los encargados de llevar la respuesta elaborada
por el SNC hasta los órganos efectores, de tal manera que podamos reaccionar y desenvolvernos
correctamente en nuestro entorno.
Ganglio = Agrupación de varios somas.
Nervio = Agrupación de varios axones.
La rama terminal superior controla el músculo recto superior del ojo, y la elevación del
párpado superior.
La inferior, por otro lado, controla el recto interno, el inferior, y el oblicuo menor.
4- Nervio Troclear o Patético (IV)
Relacionado también con el control del movimiento de los ojos,
este par craneal se encargar de manejar los músculos que los
rotan hacia abajo o hacia la nariz. Por ejemplo, el músculo
oblicuo superior del ojo.
Origen real y aparente
Su origen real también está en el pedúnculo cerebral, justo
debajo de uno de los del nervio motor ocular común. Las fibras
se cruzan con las que provienen del lado contrario justo antes de emerger a la superficie.
El origen aparente del nervio troclear, por otro lado, se localiza en la parte posterior de los pedúnculos
cerebrales, en un área conocida como válvula de Vieussens.
Recorrido
El nervio patético rodea por los laterales a los pedúnculos cerebrales y se dirige hacia la zona conocida
como seno cavernoso. Cuando atraviesa su pared externa, se coloca entre el nervio oftálmico y el motor
ocular común. Tras pasar por el exterior del anillo de Zinn, acaba en el músculo oblicuo mayor de los
ojos, al que controla.