Psicodiagnóstico
Psicodiagnóstico
Psicodiagnóstico
Principio I Respeto por la Dignidad y los Derechos de las Personas y los Pueblos
Pautas de conducta:
1) No realizar juicios discriminatorios en base a raza, al seleccionar, aceptar realizar o realizar una
práctica.
La diferencia entre las técnicas y los test son los procesos de estandarización . Los test tienen un
procedimiento más riguroso de estandarización, confiablidad y validez que una técnica.
• Proyección por Freud: Freud, A., & Carcamo, C. E. (1961). El yo y los mecanismos de
defensa (Vol. 3). Barcelona: Paidós.
La proyección, Freud, la trabajó como un mecanismo de defensa, aquello que utilizamos para
protegernos. No podemos tener lo inconsciente externalizado, necesitamos reprimirlo, ponerle un
velo a la angustia. La proyección es una atribución a otro de cualidades, sentimientos y
deseos que el sujeto rechaza de sí mismo. Aparece como el medio de defensa originaria
frente a las excitaciones internas, que por su intensidad se convierten en displacenteras. Permite
huir y protegerse de aquello que genera displacer.
Puede decirse que la acción psicoanalítica se desarrolla en y por la comunicación verbal, es decir, en una captura
dialéctica del sentido. Supone pues un sujeto que se manifiesta como tal a la intención de otro. Sólo un sujeto
puede comprender un sentido, inversamente todo fenómeno de sentido implica un sujeto.
ó ó
ó
• Abreacción: es una descarga emocional mediante la cual la persona libera el afecto que está vinculado a una
vivencia traumática
• Aporía: Paradoja o dificultad lógica insuperable.
Entre estas últimas las hay que representan los vectores electivos de las intenciones agresivas, a las que
proveen de una eficacia que podemos llamar mágica. Son las imágenes de castración, de eviración, de mutilación, de
desmembramiento, de dislocación, de destripamiento, de devoración, de reventamiento del cuerpo, en una palabra,
las imagos que personalmente he agrupado bajo la rúbrica que bien parece ser estructural de imagos del cuerpo
fragmentado.
Y evocaré el sueño de uno de mis pacientes, en quien las pulsiones agresivas se manifestaban por medio de
fantasmas obsesivos; en el sueño, se veía, yendo en coche con la mujer de sus amores difíciles, perseguido por un
pez volador, cuyo cuerpo como de tripa dejaba transparentarse un nivel de líquido horizontal, imagen de
persecución vesical de una gran claridad anatómica. é
ó á ó , no menos que al refinamiento cruel
de las armas que fabrica, por lo menos en el estadio artesanal de su industria. Esta función imaginaria va a
esclarecerse en nuestra exposición.
é
á
He subrayado que el analista curaba por el diálogo, y locuras tan grandes como ésa; ¿qué virtud le añadió
pues Freud?
La regla propuesta al paciente en el análisis le deja adelantarse en una intencionalidad ciega a todo otro fin que su
liberación de un mal o de una ignorancia de la que no conoce ni siquiera los límites.
Su voz será la única que se hará oír durante un tiempo cuya duración queda a discreción del analista. Particularmente le
será pronto manifiesta, y además confirmada, la abstención del analista de responderle en ningún plan de consejo o
de proyecto. Hay aquí una constricción que parece ir en contra del fin deseado y que algún profundo motivo debe
justificar.
¿Qué preocupación condiciona pues, frente a él, la actitud del analista? La de ofrecer al diálogo un personaje tan
despojado como sea posible de características individuales; nos borramos, salimos del campo donde podría
percibirse este interés, esta simpatía, esta reacción que busca el que habla en el rostro del interlocutor, evitamos
toda manifestación de nuestros gustos personales, ocultamos lo que puede delatarlos, nos despersonalizamos, y
tendemos a esa meta que es representar para el otro un ideal de impasibilidad.
Sólo los santos están lo bastante desprendidos de la más profunda de las pasiones comunes para evitar los
contragolpes agresivos de la caridad.
Debemos sin embargo poner en juego la agresividad del sujeto para con nosotros, puesto que esas intenciones, ya se sabe,
forman la transferencia negativa que es el nudo inaugural del drama analítico.
Este fenómeno representa en el paciente la transferencia imaginaria sobre nuestra persona de una de las
imagos más o menos arcaicas que, por un efecto de subducción simbólica, degrada, deriva o inhibe el ciclo de tal
conducta que, por un accidente de represión, ha excluido del control del yo tal función y tal segmento corporal, que
por una acción de identificación ha dado su forma a tal instancia de la personalidad. Puede verse que el más azaroso
pretexto basta para provocar la intención agresiva, que reactualiza la imago, que ha seguido siendo permanente en el plano de sobre
determinación simbólica que llamamos el inconsciente del sujeto, con su correlación intencional.
• Subducción: Proceso por el que una placa litosférica oceánica se hunde bajo otra placa, ya sea oceánica o
continental.
Lo que tratamos de evitar para nuestra técnica es que la intención agresiva en el paciente encuentre el
apoyo de una idea actual de nuestra persona suficientemente elaborada para que pueda organizarse en esas
reacciones de oposición, de denegación, de ostentación y de mentira que nuestra experiencia nos demuestra que
son los modos característicos de la instancia del yo en el diálogo.
la agresividad es la tendencia correlativa de un modo de identificación que llamamos narcisista y que determina
la estructura formal del yo del hombre y del registro de entidades característico de su mundo.
Pasar ahora de la subjetividad de la intención a la noción de una tendencia a la agresión es dar el salto de la
fenomenología de nuestra experiencia a la metapsicología.
Pero ese salto no manifiesta ninguna otra cosa sino una exigencia del pensamiento que, para objetivar ahora
el registro de las reacciones agresivas, y a falta de poder seriarlo en una variación cuantitativa, debe comprenderlo
en una fórmula de equivalencia. Así es como lo hacemos con la noción de libido.
He subrayado en mis trabajos que se podía coordinar por su seriación estrictamente paralela la calidad de la
reacción agresiva que puede esperarse de tal forma de paranoia con la etapa de la génesis mental representada por
el delirio sintomático de esa misma forma. Relación que aparece aún más profunda cuando —lo he mostrado para
una forma curable: la paranoia de autocastigo— el acto agresivo resuelve la construcción delirante.
El primer plano nos muestra que la experiencia de sí en el niño pequeño, en cuanto que se refiere a su
semejante, se desarrolla a partir de una situación vivida como indiferenciada. Así alrededor de la edad de ocho
meses en esas confrontaciones entre niños, que, observémoslo, para ser fecundas apenas permiten una distancia de
dos meses y medio de edad, vemos esos gestos de acciones ficticias con los que un sujeto acompaña el esfuerzo
imperfecto del gesto del otro confundiendo su distinta aplicación, esas sincronías de la captación espectacular, tanto
más notables cuanto que se adelantan a la coordinación completa de los aparatos motores que ponen en juego.
Así la agresividad que se manifiesta en las retaliaciones de palmadas y de golpes no puede considerarse únicamente como una
manifestación lúdica de ejercicio de las fuerzas y de su puesta en juego para detectar el cuerpo.
Debe comprenderse en un orden de coordinación más amplio: el que subordinará las funciones de posturas
tónicas y de tensión vegetativa a una relatividad social cuya prevalencia ha subrayado notablemente un Wallon en la
constitución expresiva de las emociones humanas.
Más aún, yo mismo he creído poder poner de relieve que el niño en esas ocasiones anticipa en el plano mental la conquista de
la unidad funcional de su propio cuerpo, todavía inacabado en ese momento en el plano de la motricidad voluntaria.
Hay aquí una primera captación por la imagen en la que se dibuja el primer momento de la dialéctica de las identificaciones.
Está ligado a un fenómeno de Gestalt, la percepción muy precoz en el niño de la forma humana, forma que, ya se ve, fija su interés
desde los primeros meses, e incluso para el rostro humano desde el décimo día. Pero lo que demuestra el fenómeno de reconocimiento,
implicando la subjetividad, son los signos de júbilo triunfante y el ludismo de detectación que caracterizan desde el sexto mes el
encuentro por el niño de su imagen en el espejo.
Lo que he llamado el estadio del espejo tiene el interés de manifestar el dinamismo afectivo por el que el sujeto se
identifica primordialmente con la Gestalt visual de su propio cuerpo: es, con relación a la incoordinación todavía muy
profunda de su propia motricidad, unidad ideal, imago saludable; es valorizada por todo el desamparo original,
ligado a la discordancia intraorgánica y relacional de la cría de hombre, durante los seis primeros meses, en los que
lleva los signos, neurológicos y humorales, de una prematuración natal fisiológica.
El niño que pega dice haber sido pegado, el que ve caer llora. Del mismo modo es en una identificación con el otro
como vive toda la gama de las reacciones de prestancia y de ostentación, de las que sus conductas revelan con
evidencia la ambivalencia estructural, esclavo identificado con el déspota, actor con el espectador, seducido con el
seductor. Hay aquí una especie de encrucijada estructural, en la que debemos acomodar nuestro pensamiento para comprender la naturaleza de la
agresividad en el hombre y su relación con el formalismo de su yo y de sus objetos. Esta relación erótica en que el individuo humano se
fija en una imagen que lo aliena a sí mismo, tal es la energía y tal es la forma en donde toma su origen esa
organización pasional a la que llamará su yo.
Esa forma se cristalizará en efecto en la tensión conflictual interna al sujeto, que determina el despertar de su deseo
por el objeto del deseo del otro: aquí el concurso primordial se precipita en competencia agresiva, y de ella nace la
tríada del prójimo, del yo y del objeto, que, estrellando el espacio de la comunión espectacular, se inscribe en él
según un formalismo que le es propio, y que domina de tal manera la Einfühlung afectiva que el niño a esa edad
puede desconocer la identidad de las personas que le son más familiares si le aparecen en un entorno enteramente
renovado.
Por eso se confunden los dos momentos en que el sujeto se niega a sí mismo y en que hace cargos al otro, y se
descubre ahí esa estructura paranoica del yo que encuentra su análogo en las negaciones fundamentales, puestas de
relieve por Freud en los tres delirios de celos, de erotomanía y de interpretación. Es el delirio mismo de la bella alma
misántropa, arrojando sobre el mundo el desorden que hace su ser.
La experiencia subjetiva debe ser habilitada de pleno derecho para reconocer el nudo central de la agresividad
ambivalente, que nuestro momento cultural nos da bajo la especie dominante del resentimiento, hasta en sus más
arcaicos aspectos en el niño. Así por haber vivido en un momento semejante y no haber tenido que sufrir de esa
resistencia behaviourista en el sentido que nos es propio, san Agustín se adelanta al psicoanálisis al darnos una
imagen ejemplar de un comportamiento tal en estos términos: “Vi con mis propios ojos y conocí bien a un
pequeñuelo presa de los celos. No hablaba todavía y ya contemplaba, todo pálido y con una mirada envenenada, a
su hermano de leche”. Así anuda imperecederamente, con la etapa infans (de antes de la palabra) de la primera
edad, la situación de absorción espectacular: contemplaba, la reacción emocional; todo pálido, y esa reactivación
de las imágenes de la frustración primordial; y con una mirada envenenada, que son las coordenadas psíquicas y
somáticas de la agresividad original.
Sólo la señora Melanie Klein, trabajando en el niño en el límite mismo de la aparición del lenguaje, se ha atrevido a
proyectar la experiencia subjetiva en ese periodo anterior donde sin embargo la observación nos permite afirmar su
dimensión, en el simple hecho por ejemplo de que un niño que no habla reacciona de manera diferente a un castigo
y a una brutalidad.
Ninguna necesidad entonces de buscar más lejos la fuente de esa energía de la que Freud, a propósito del problema
de la represión, se pregunta de dónde la toma el yo, para ponerla al servicio del “principio de realidad”.
No cabe duda que proviene de la “pasión narcisista”, no bien se concibe mínimamente al yo según la noción
subjetiva que promovemos aquí por estar conforme con el registro de nuestra experiencia; las dificultades teóricas
con que tropezó Freud nos parecen depender en efecto de ese espejismo de objetivación, heredado de la psicología
clásica, que constituye la idea del sistema percepción-conciencia, y donde parece bruscamente desconocido el hecho
de todo lo que el yo desatiende, escotomiza, desconoce en las sensaciones que lo hacen reaccionar ante la realidad,
como de todo lo que ignora, agota y anuda en las significaciones que recibe del lenguaje: desconocimiento bien
sorprendente por arrastrar al hombre mismo que supo forzar los límites del inconsciente por el poder de su
dialéctica.
Del mismo modo que la opresión insensata del superyó permanece en la raíz de los imperativos motivados de la
conciencia moral, la furiosa pasión, que especifica al hombre, de imprimir en la realidad su imagen es el fundamento
oscuro de las mediaciones racionales de la voluntad.
La noción de una agresividad como tensión correlativa de la estructura narcisista en el devenir del sujeto permite
comprender en una función muy simplemente formulada toda clase de accidentes y de atipias de este devenir.
Indicaremos aquí cómo concebimos su enlace dialéctico con la función del complejo de Edipo. Ésta en su normalidad
es de sublimación, que designa muy exactamente una modificación identificatoria del sujeto, y, como lo escribió
Freud apenas hubo experimentado la necesidad de una coordinación “tópica” de los dinamismos psíquicos, una
identificación secundaria por introyección de la imago del progenitor del mismo sexo.
La energía de esta identificación está dada por el primer surgimiento biológico de la libido genital. Pero es claro que
el efecto estructural de identificación con el rival no cae por su propio peso, salvo en el plano de la fábula, y no se
concibe sino a condición de que esté preparado por una identificación primaria que estructura al sujeto como
rivalizando consigo mismo.
Pero lo que nos interesa aquí es la función que llamaremos pacificante del ideal del yo, la conexión de su
normatividad libidinal con una normatividad cultural, ligada desde los albores de la historia a la imago del padre.
Aquí yace evidentemente el alcance que sigue teniendo la obra de Freud Tótem y tabú, a pesar del círculo mítico que
la vicia, en cuanto que hace derivar del acontecimiento mitológico, a saber, del asesinato del padre, la dimensión
subjetiva que le da su sentido, la culpabilidad.
Freud en efecto nos muestra que la necesidad de una participación, que neutraliza el conflicto inscrito
después del asesinato en la situación de rivalidad entre hermanos, es el fundamento de la identificación con el
Tótem paterno. Así la identificación edípica es aquella por la cual el sujeto trasciende la agresividad constitutiva de
la primera individuación subjetiva. Hemos insistido en otro lugar en el paso que constituye en la instauración de esa
distancia por la cual, con los sentimientos del orden del respeto, se realiza todo un asumir afectivo del prójimo.
Dejemos aquí la crítica de todos los abusos del cogito ergo sum, para recordar que el yo, en nuestra
experiencia, representa el centro de todas las resistencias a la cura de los síntomas.
Es en todas las fases genéticas del individuo, en todos los grados de cumplimiento humano en la persona
donde volvemos a encontrar ese momento narcisista en el sujeto, en un antes en el que debe asumir una frustración
libidinal y un después en el que se trasciende en una sublimación normativa.
Esta concepción nos hace comprender la agresividad implicada en los efectos de todas las regresiones, de
todos los abortos, de todos los rechazos del desarrollo típico en el sujeto, y especialmente en el plano de la
realización sexual, más exactamente en el interior de cada una de las grandes fases que determinan en la vida
humana las metamorfosis libidinales cuya función mayor ha sido demostrada por el análisis: destete, Edipo,
pubertad, madurez, o maternidad, incluso clímax involutivo. Y hemos dicho a menudo que el acento colocado
primero en la doctrina sobre las retorsiones agresivas del conflicto edípico en el sujeto respondía al hecho de que los
efectos del complejo fueron vislumbrados primero en los aspectos fallidos de su solución.
Tesis V: semejante noción de la agresividad como de una de las coordenadas intencionales del yo humano, y especialmente
relativa a la categoría del espacio, hace concebir su papel en la neurosis moderna y en el malestar de la civilización.
Antes que él, sin embargo, un Hegel había dado para siempre la teoría de la función propia de la agresividad
en la ontología humana, profetizando al parecer la ley de hierro de nuestro tiempo. Es del conflicto del Amo y del
Esclavo de donde deduce todo el progreso subjetivo y objetivo de nuestra historia, haciendo surgir de esas crisis las
síntesis que representan las formas más elevadas del estatuto de la persona en Occidente, desde el estoico hasta el
cristiano y aun hasta el ciudadano futuro del Estado Universal. Sabemos, sea como sea, por dónde procede nuestra
adaptación a estas exigencias, y que la guerra muestra ser más y más la comadrona obligada y necesaria de todos los
progresos de nuestra organización. No obstante tenemos también aquí algunas verdades psicológicas que aportar: a
saber, hasta qué punto el pretendido “instinto de conservación” del yo flaquea fácilmente en el vértigo del dominio
del espacio, y sobre todo hasta qué punto el temor de la muerte, del “Amo absoluto”, supuesto en la conciencia por
toda una tradición filosófica desde Hegel, está psicológicamente subordinado al temor narcisista de la lesión del
cuerpo propio.
Inhibición Síntoma
“Limitación funcional del yo”: Tiene que ver con que Es el indicio y sustituto de una satisfacción
el ejercicio de estas funciones provocaría la pulsión interceptada. El síntoma es tanto
angustia. parte del yo como del ello, ES UNA
Ciertas áreas/actividades van a tener dificultades FORMACIÓN DE COMPROMISO, es una
para desarrollarse satisfactoriamente satisfacción sustitutiva, pero por otro lado
satisface a la defensa. El yo intenta mantener
el síntoma cerca de su organización le sirve a
este a mantener al ello a raya.
TÉCNICAS
ENTREVISTA DIAGNOSTICA CON NIPÑOS Y ADOLESCENTES – LOURDES EZPELETA
Consecuencias
• ¿Qué es lo que pasa cuando ocurre?
• ¿Qué es lo que sientes cuando ocurre? Esto, ¿te ocasiona problemas con tu familia?
• Esto, ¿te ocasiona problemas con tus amigos?
• Esto, ¿te ocasiona problemas en la escuela?
• ¿Te molesta que pase esto?
Actitudes ante el problema
• ¿Qué hacen tus padres cuando tienes este problema?
• ¿Qué hacen tus amigos cuando tienes este problema?
• ¿Qué hacen tus profesores cuando tienes este problema?
• ¿Qué haces tú Cuando tienes este problema?
Historia de los problemas presentes
Objetivo de la sección:
• Establecer qué factores causales han contribuido a la aparición del problema.
• Establecer cuál ha sido el curso de la conducta problema.
• Identificar los tratamientos anteriores.
Factores causales
• ¿Pasó algo importante antes de que empezaras a tener este problema?
• ¿Cuántos años tenías entonces?, ¿en qué curso estabas?
• ¿Por qué crees tú que tienes este problema?
Curso
• Desde que empezaste a tener este problema, ¿lo has tenido siempre?,
• ¿hay temporadas en que no lo tienes?
• A medida que te haces mayor; ¿crees que el problema se hace mayor? O, ¿enees que ahora tienes menos
este problema que antes? ¿Qué cosas hacen que el problema vaya mejor o vaya peor?
Tratamientos anteriores
• ¿Has consultado alguna vez a alguien sobre este problema?
• ¿Qué dijo esta persona que tenías que hacer para solucionar el problema?
• ¿Hiciste lo que te recomendaron?,
• ¿por qué no lo hiciste?
Observaciones
Objetivos de la sección:
Registrar la percepción del entrevistador sobre el estado mental y físico del niño.
Las observaciones acerca del niño ofrecen una idea de cómo es su desarrollo físico, cognitivo y afectivo, así como de
sus habilidades sociales (lenguaje, contacto ocular, sentido del humor, adecuación de la conversación, etc.),
expresión de emociones, capacidad para concentrarse y nivel de actividad (Boggs y Eyberg, 1990).
Apariencia general
• Estado de salud y nutricional
• Higiene/vestimenta
• Apariencia física del niño
• Apariencia extraña
• Apariencia apropiada para la edad
• Signos de maltrato/negligencia
Conducta motriz
• Lentitud/baja actividad
• Coordinación marcha/equilibrio
• Hiperactividad
• Inquietud/intranquilidad
• Tics motores/vocales
• Hábitos motores/estereotipias
• Rituales/compulsiones
• Conducta autolesiva
Habla/Lenguaje
• Volumen Fluidez (lentitud, tartamudez, farfulleo)
• Prosodia Articulación
• Construcciones gramaticales
• Vocabulario
• Comprensión
• Mutismo
• Ecolalia
• Frases estereotipadas
• Pobreza de contenido
• Habla infantil
• Presión del habla
• Habla incoherente
• Fuga de ideas
Comunicación
• Contacto ocular
• Expresión no verbal
• Suministro de información
• Calidad del rapport
• Capacidad para comunicar
• Adecuación de las intervenciones
• Necesidad de aprobación
• Agresividad interpersonal verbal o física
• Oposicionismo/docilidad
Orientación
• Temporal
• Espacial
• Personal
Memoria, atención, concentración
Funcionamiento intelectual
Habilidad para comprender y responder preguntas Capacidad de aprendizaje
Pensamiento y percepción
• Autoestima
• Imagen corporal
• Alucinaciones
• Delirios
• Fluidez del pensamiento
• Obnubilación mental
• Estupor
Afecto/emoción
• Sonrisa/llanto
• Expresión triste
• Irritabilidad/enfado
• Humor expansivo
• Cambios de humor
• Ansiedad/preocupaciones
• Alteraciones autonómicas
• Miedo Vergüenza
• Afecto embotado
• Afecto incongruente
• Suspicacia
• Malestar al separarse de los padres
• Críticas a los padres durante la entrevista
Actitud durante la entrevista
• Relación con el entrevistador
• Grado de colaboración
• Mentiras
• Responde con cautela
• No responde a muchas preguntas
• Se niega a continuar
• Conciencia alterada
• Solicita confidencialidad para algunos temas
Historia personal (CON LOS PADRES)
Objetivos de la sección: Recoger información sobre el desarrollo del niño en las distintas áreas. En esta sección, los
mejores informadores van a ser los padres o las personas que hayan ejercido ese rol. Se debe prestar especial
atención tanto a las continuidades del desarrollo como a las discontinuidades.
Desarrollo biológico
(prenatal, perinatal, postnatal, historia médica y salud)
Desarrollo psicológico
(habla/lenguaje, motricidad, alimentación, sueño, control de esfínteres, hábitos de autonomía, temperamento)
Desarrollo socio-emocional
(regulación del afecto y las emociones, ansiedad, habilidades sociales)
Desarrollo sexual
Desarrollo intelectual
Escolaridad y rendimiento académico
(preguntar también al niño) (puntos fuertes y débiles, historia escolar, motivación para aprender, actitud ante la
autoridad)
Acontecimientos vitales estresantes
(preguntar también al niño)
Historia familiar
(cuidadores y entorno familiar relaciones familiares, estilo educativo, cumplimiento de normas, cultura, religión,
valores, objetivos y aspiraciones, vivienda y vecindario) (preguntar también al niño)
Historia de psicopatología familiar:
gravedad, tratamiento, pronóstico, impacto en el niño)
Amistades
(preguntar también al niño) (cantidad y calidad de las relaciones, habilidades y déficit sociales, relaciones sexuales)
Intereses
(preguntar también al niño)
Áreas de habilidades y talentos
Funcionamiento actual
Objetivos de la sección:
• Conocer cuál es el impacto de la sintomatología presente en la vida cotidiana del niño. Por este
comportamiento/sentimientos/dificultades que me has explicado:
• ¿Te has sentido mal?
• ¿Has dejado de hacer alguna cosa?,
• ¿te impiden hacer cosas?
• ¿Se han molestado frecuentemente tus padres contigo por esto?
• ¿Se han preocupado tus padres por esto?
• ¿Has tenido problemas con tus amigos/as?
• ¿Se han enfadado o disgustado tus profesores contigo?
• ¿Te ha costado seguir tu ritmo de trabajo en el colegio?
Fin de la entrevista
Objetivos de la sección:
Resumir los temas más importantes tratados. Comprobar si hay otros temas adicionales relevantes que no se hayan
tratado.
• Proporcionar refuerzo al niño por su colaboración.
• Informar al niño de los pasos siguientes en el seguimiento.
• Abandonar al sujeto en “tono positivo”.
Ya hemos terminado.
• ¿Hay alguna otra cosa que te gustaría contarme?
• ¿Hay algún otro tema del que te gustaría hablar?
• ¿Quieres preguntarme algo sobre lo que yo te he preguntado o sobre lo que hemos hablado?
Lo has hecho muy bien y te has acordado de muchas cosas. Gracias por tu esfuerzo y tu colaboración.
Tema de interés para el niño. Ahora puedes volver a leer un rato ese libro tan interesante que leías antes de entrar
¿De qué se trata?
Diagnóstico
Una vez recopilada esta información, se está en condiciones de emitir un diagnóstico sobre las dificultades del niño.
Para ello se integra la información que se ha recogido sobre las características de estas dificultades, los factores que
las desencadenan y agravan o mejoran, así como el cuadro completo de características familiares, ambientales y
personales que son relevantes para entender estos problemas y poder planificar un tratamiento adecuado. EIDSM-IV
propone los siguientes ejes para sintetizar la información de un caso:
• Eje I: Trastornos clínicos. Otros problemas que pueden ser objeto de atención clínica
• Eje II: Trastornos de la personalidad. Retraso mental
• Eje III: Enfermedades médicas
• Eje IV: Problemas psicosociales y ambientales
• Eje V: Evaluación de la actividad global
Comunicación de los resultados
El paso final consiste en comunicar tanto al niño como a los padres, siempre en términos comprensibles, las
conclusiones a las que se ha llegado y las propuestas de intervención. En este punto es tan importante resaltar los
aspectos positivos como insistir en los negativos. En caso de que exista alguna área que requiera una exploración
adicional por parte de otro especialista, éste es el momento de indicarlo. Si el caso ha llegado referido por otro
especialista que ha solicitado la evaluación actual, se requiere el consentimiento de los implicados para transmitir el
informe al especialista que originó la demanda.
Conviene redactar siempre un informe que contenga los datos más relevantes de la evaluación y las conclusiones y
recomendaciones a las que se ha llegado tras esta evaluación. Morrison y Anders (1999) proponen los siguientes
apartados para el informe escrito de resultados:
• Datos de identificación
• Motivo de consulta
• Historia del trastorno
• Datos personales, familiares y sociales
• Historia familiar Historia médica
• Observaciones
• Síntesis del caso
• Breve resumen del caso
• Diagnóstico diferencial
• Diagnóstico más probable
• Factores contribuyentes
• Información adicional necesaria
• Plan de tratamiento Pronóstico
Ficha Técnica
• Autor: Lauretta Bender y Koppitz
• Administración: Individual - Colectiva
• Duración: No tiene límite de tiempo
• Aplicación:
• Reactivo: 9 laminas
Mide:
• Agudeza visomotora y madurez visoperceptual MADUREZ PERCEPTUAL
• Disfunción cerebral / Daño orgánico / Lesión cerebral DETERIORO NEUROLOGICO
• Desajuste emocional
• Capacidad de organización y representación
• Sirve para el diagnostico de:
- Esquizofrenia infantil
- Debilidad mental
- Demencias infantiles
- Retraso de maduración
- Incapacidades verbales
- Déficit y desorden perceptual
- Esquizofrenia adulta
- Problemas de aprendizaje
- Predice desempeño escolar
El Test de Bender era uno de los Test que originalmente evaluaba daño orgánico.
¿Para qué sirve? Principal y metodológicamente para medir agudeza visomotora y madurez visoperceptiva y
después para disfunción cerebral mínima e indicadores emocionales
La fundamentación técnica y teórica de este Test, responde a la Teoría Gestáltica y sus leyes.
Es un Test:
• GESTALTICO: Porque el entrevistado tiene que copiar tal cual lo ve, los modelos gráficos presentados.
• VISOMOTOR: Porque explora el nivel de estructuración de la actividad perceptual.
ESCUELA DE LA GESTALT
Las leyes de la percepción fueron enunciadas por los psicólogos de la Gestalt, (Wertheimer, Wolfgang Köhler y
Koffka);quienes en un laboratorio de psicología experimental observaron que el cerebro humano organiza las percepciones como
totalidades (Gestalt) de acuerdo con ciertas leyes a las que denominaron “Leyes de la percepción"
• Ley de proximidad
• Ley de semejanza
• Ley de cierre
• Ley de la buena curva o continuidad
• Ley de figura – fondo
• Ley de contraste
En relación a estas leyes Lauretta Bender concluye que: “En el ser humano hay una tendencia, no solo a
percibir Gestalten , sino a completarlas y reorganizarlas de acuerdo a principios biológicamente
determinados por el patrón sensomotor de acción”
Bender empleó como material, una serie de 9 diseños carentes de significación, construidos para el
estudio de los procesos perceptivos, específicamente de las leyes de la percepción, ideando un sistema en que
mostraba los diseños a los sujetos y les pedía que los reprodujeran gráficamente, pero, no estableció un sistema de
puntuación estandarizado y, por lo tanto, las conclusiones realizadas a partir de la aplicación de la prueba resultaban
ser muy subjetivas. Con respecto a su estandarización hay dos autores relevantes que realizaron su aporte.
- Elizabeth Koppitz, a partir del trabajo con las mismas láminas-estímulos propuestas por Bender, crea un sistema de
aplicación y puntuación del Test.
- Arthur Canter genera un detallado estudio y procedimiento que se conoce como Bender-BIP
Administración
Materiales:
• Las 9 tarjetas con las figuras impresas, la primera es la figura A y las demás se enumeran del 1 al 8.
• 2 o más hojas A4 blancas. Se debe tener suficientes por si el evaluado desea hacer un dibujo en cada hoja
(lo habitual es que ocupe una o dos hojas para copiar todos los diseños).
• Un lápiz nº 2
• (goma de borrar solo si lo pide).
Procedimiento:
“Aquí tengo nueve dibujos, quiero que los copies tal cual los ves”, y se pone frente al niño la tarjeta A.
Las tarjetas se administran una a una, en orden correlativo, sin límite de tiempo. No se indica en que parte del papel debe
realizar el diseño; si el niño pregunta, se le responde que en la parte que desee.
Elizabeth Koppitz, estableció un sistema de puntuación para niños de entre 5 y 12 años. A través de este sistema
intentó evaluar madurez perceptual, deterioro neurológico y ajuste emocional.
Actualmente esta versión del test de Bender sólo resulta adecuada, desde el punto de vista metodológico, para
evaluar madurez perceptual (visomotora).
Las 7 desviaciones observadas por Koppitz, son las que se presentan a continuación:
0 puntos si no se observa
Por lo tanto, a mayor puntaje, mayor presencia de desviaciones respecto a los diseños originales.
Ítems
FIGURA A FIGURA 1
FIGURA 2
FIGURA3
FIGURA 4 FIGURA 5
FIGURA 6 FIGURA 7
FIGURA 8
25. Rotación
Resultados
El puntaje obtenido por el niño evaluado se compara con el resultado esperable para su edad cronológica; de
acuerdo a esto, podemos señalar que su maduración visomotora es adecuada para su edad (si ambos puntajes
coinciden), menor o mayor a lo esperable, de acuerdo a los resultados.
Indicadores Emocionales
1- Orden confuso
2- Línea Ondulada (figura 1 y 2)
3- Sustitución de círculos por rayas (figura 2)
4- Aumento progresivo de tamaño (Fig. 1, 2, 3)
5- Gran tamaño de las figuras
6- Micrografismo
7- Línea fina
8- Repaso de las figuras y las líneas
9- Segunda tentativa:
10- Expansión:
11- Constricción
Hay que tener en cuenta que mientras más grande sea el sujeto menor cantidad de errores debería ir teniendo
En adultos de más de trece años el Test de Bender se utiliza para establecer lecturas de indicadores patognómicos
(aspectos clínicos patológicos).
Qué es la inteligencia?
Wechsler
Es considerada como entidad compleja y global, como la capacidad global del individuo de
actuar deliberadamente, pensar racionalmente y relacionarse eficazmente con su medio.
Constituye el producto de la constitución genética individual y las experiencias socio educacionales, la
motivación y las preferencias de la personalidad
Que fuese aplicable a personas que por su edad o por su déficit intelectual acusaran una capacidad de inteligencia
inferior a la exigida para comprender la tarea de la Escala General. Cuya dispersión de puntaje permitiese una mayor
discriminación. Que su puntaje fuese menos susceptible a la influencia del azar. De este modo, Raven, derivo de su
test una Escala Espacial para medir la funciones perceptuales y racionales de niveles de madurez inferiores a los 12
años (5 a 11 años), de los débiles mentales y de personas con serias dificultades de lenguaje y de audición.
La Escala Espacial está constituida por 36 problemas distribuidos en tres series de 12 problemas cada una,
designadas como series A, Ab y B. Los problemas están ordenados en complejidad creciente: el A1 es el más fácil y el
B12 el más difícil. Los tres últimos dibujos (B10, B11 y B12) están impresos en blanco y negro, a fin de que si en el
examen se verifica la posibilidad y conveniencia de someter a la persona a una medición más rigurosa, enfrentándole
con problemas más complejos, se pueda continuar con el examen, con toda naturalidad y con un mínimo de
transición, con las series C, D y E de la Escala General. Los problemas de la Escala constituyen una prueba de
percepción estructurada, y en segundo término, una prueba de educción de relaciones. Las diferentes funciones que
principalmente se examinan son: percepción de tamaño, percepción de orientación en el espacio en una dirección y
en dos direcciones simultáneamente, comprensión de figuras discretas especialmente relacionadas con un todo,
análisis de un todo en sus componentes, capacidad de concebir figuras correlativas, educción de correlaciones.
Eductiva: es poder dar sentido a la confusion, es compreder mas alla → Pensamiento abstracto.
Reproductiva: dominio, recuerdo y reproduccion del material. Lo que se conoce en bandura como la recuperacion de
la informacion.
• CASA: Relaciones hogareñas, intrafamiliares. Percepción de la situación familiar actual y la relación de la familia con el
afuera.
• ARBOL: Sentimientos más profundos del Yo. Imagen corporal y concepto de sí mismo. Conciencia, interioridad y sentimientos
hacia el prójimo. Tiene la peculiaridad de poder ser uno de los facilitadores más utilizados de la proyección, al utilizar un
símbolo totalmente ajeno o diferente a lo que puede llegar a ser uno mismo
• PERSONA: Autoimagen (lo que el individuo siente o quiere ser). Visión de sí mismo. Es lo más cercano a la conciencia. Relación
con el ambiente.
Consiste en solicitarle al entrevistado que dibuje tres ítems particulares (considerados reactivos). Cada uno de ellos,
está pensado para revelar y funcionar como disparador de distintos aspectos significativos e inconscientes de la vida
del entrevistado.
Administración
Materiales
• 4 hojas A4 en blanco
• Lápiz negro nº2
• Goma
• No se puede utilizar ninguna ayuda mecánica
Consigna
Se puede solicitar de modo optativo que en el reverso de cada hoja haga una historia relacionada con el dibujo.
Luego siguiendo el protocolo se realiza una serie de preguntas guía por cada dibujo.
Primero porque son familiares a cualquiera, y además porque tienen un gran potencial simbólico.
¿Cómo se evalúa?
Los indicadores formales/expresivos hacen referencia al cómo y qué la persona dibuja. Y son en total 8
Secuencia
Emplazamiento
Tamaño
Movimiento
Presión
Líneas
Trazo
Borrado
Detalles
Refuerzo
Simetría
Indicadores de Contenido
CASA Techo Ventanas
Paredes Chimenea
Puerta Accesorios
Base Detalle
PERSONA
Brazos Cuello
Pies Género
Hombros Cabello
Vestimenta Manos
Historia Piernas
Cuello:
Ficha técnica:
◼ Autor: Silvia Mabel Querol y María Chávez Paz
◼ Administración: Individual – Colectiva
◼ Duración: Variable, aproximadamente 30 minutos
◼ Aplicación: Desde los 6 años en adelante
◼ Reactivo: 1 consigna con símbolo disparador proyectivo
Mide:
• Evaluar las ansiedades, temores, aspectos conductuales que se activan ante una situación de presión
ambiental. Las defensas del Yo
• Diagnosticar modalidad defensiva predominante y su modalidad adaptativa, o patológica. Nivel de ansiedad.
• Diagnosticar o inferir estructura psicopatológica subyacente y su característica de organización-
desorganización.
Administración:
Materiales
• 2 hojas A4 en blanco
• Lápiz negro nº2
• Goma de borrar
Se analiza con criterios similares al HTP. Son criterios de recursos o indicadores formales o de contenido
• Dimensiones. • Tiempo.
• Emplazamiento. • Secuencia.
• Trazos. • Movimiento.
• Presión. • Sombreados.
Análisis de contenido:
De tres aspectos:
LA PERSONA: Es el Yo.
LA DEFENSA: Es él como la persona se defiende ante esa situación de estrés)
LA LLUVIA: Es la situación estresante)
• Orientación de la persona. • Vestimenta
• Posturas • Paraguas como defensa.
• Borrados en el dibujo • Reemplazo del paraguas
• Repaso de líneas, tachaduras, líneas incompletas. por otros elementos.
• Detalles accesorios y su ubicación. • Partes del cuerpo
• Nubes, lluvia, charcos • Identidad sexual
• Personaje y no persona: El dibujo de un
personaje (títeres, marionetas, robots,
personas disfrazadas, historieta, estatua,
payasos).
Expresiones de conflicto: Neurosis fóbica, histérica, obsesiva, Depresión, Melancolía, Psicosis, Psicosis melancólica
depresiva, Paranoia, Enfermedades psicosomáticas, Epilepsia, Alcoholismo
Administración
Se le entrega una hoja de modo VERTICAL, con un lápiz y una goma, y a continuación se le solicita que: “Dibuje una
persona bajo la lluvia”. Al finalizar se le pide que narre al reverso de la hoja una historia que contenga principio,
nudo y desenlace, y que le coloque al último un titulo.
Ficha técnica
• Autor: Lic. Karina Pietramala Lic. Laura Beltrán Simó
• Administración: Individual
• Duración: 45 minutos
• Aplicación: 3 a 10 años
• Reactivo:
Mide:
• Instrumento que se utiliza dentro del proceso psicodiagnostico con el objetivo de conocer la realidad interna
del niño.
• Expresa su vida psíquica, fantasías, temores y deseos de aquí y ahora
• Es para conocer su fantasía de enfermedad y cura
Materiales
Se brinda al niño material de distinto tipo, tanto estructurado como inestructurado, posibilitando la expresión,
sin que la experiencia resulte invasora.
Materiales estructurados:
• Artículos escolares: papel tamaño carta, lápices negros y de colores, crayones. Tijera de punta roma, goma
de borrar, goma de pegar, sacapuntas, papel glasé
• Dos o tres muñequitos (articulados y de distintos tamaños)
• Familia de animales salvajes
• Familia de animales domésticos
• Dos o tres autitos de distintos tamaños que puedan funcionar e continentes
• Dos o tres avioncitos con las mismas propiedades
• Dos o tres tacitas con sus respectivos platitos
cucharitas
• Algunos cubos (aproximadamente seis) de tamaño intermedio
• Tizas
• Pelota.
Materiales inestructurados:
• Trapitos
• Hilo
• Plastilina de distintos colores
Se complemente con la entrevista inicial a los padres, la anamnesis, técnicas proyectivas y psicométricas
Consigna
El psicólogo elabora con los padres la consigna que se le dará al niño y se le reformula directamente a él.
“Tú vas a jugar solo (a) puedes ocupar los juguetes como quieras”
• Definición de roles
• Limitación de tiempo y espacio
• Material a utilizar
• Objetivos perseguidos
El material de la mesa puede utilizarlo cuando desee, observaremos su juego con el propósito de conocerlo y
comprender dificultades para una ayuda posterior, todo en un tiempo y lugar determinado. Se le explican los límites
generales en cuanto a acciones que resulten peligrosas.
TRANSFERENCIA Y CONTRA:
Indicadores:
• De observación a distancia
• Dependiente
• Evitativa
• Dubitativa
• De irrupción brusca
• De irrupción caótica e impulsiva
• De acercamiento, con previo tiempo de reacción para estructurar el campo y luego desarrollar el juego
Además observar si el juego tiene proceso, si es una unidad coherente y si sus juegos corresponden a su edad
cronológica
A Plasticidad
3 Personificación: Nos permite evaluar el equilibrio que existe entre el Ello, Yo y Superyó
Es la capacidad de asumir y adjudicar roles en forma dramática. Adquiere diferentes características, dependiendo del
estado evolutivo.
Posibilita la elaboración de situaciones traumáticas, el aprendizaje de roles sociales, comprensión del rol del otro y el
ajuste de conducta
4 Motricidad
5 Creatividad
Unir o relacionar objetos dispersos en un elemento nuevo y diferente, para lograr un fin propuesto
6 Tolerancia a la frustración
Se detecta a través de la posibilidad de aceptar la consigna con sus limitaciones. Limites, finalización de tareas y ver
donde se ubica el niño frente a la frustración. En su mundo interno y externo
7 Capacidad simbólica
El juego es una expresión de la capacidad simbólica. Cuantos más juguetes utiliza más posibilidades yoicas presenta,
para reflejar la realidad en una serie de significantes
8 Adecuación a la realidad
A través de los indicadores trataremos de ver: cómo se relaciona, su conducta, el grado de adaptación y dispersión
que se da. Las funciones yoicas y un superyo no rigido son los que le permiten elaborar las perdidas y aceptar los
cambios del crecimiento y de cada experiencia.
Ficha técnica
• Autor: Kopitz
• Administración: Individual - Colectiva
• Duración: Tiempo libre
• Aplicación: De 5 a 12 años
• Reactivo: Consigna
Mide:
• Aspectos madurativos
• Estructura básica de la personalidad
• Refleja actitudes, preocupaciones
Administración
Materiales
Esperable: Autorretrato
El DFH muestra tanto una estructura básica como un cierto estilo peculiar en el niño que dibuja.
• Autor: Porot
• Administración: Individual - Colectiva
• Duración: Sin límite de tiempo
• Aplicación: Desde los 5 años hasta la adolescencia
• Reactivo: Consigna
Mide:
Administración
Materiales
• 1 hoja A4 en blanco
• Lápiz negro nº2
Interpretación