Exoe El Rosal Deshogado
Exoe El Rosal Deshogado
Exoe El Rosal Deshogado
SECCIÓN 01
Dra. Morena Guadalupe Magaña
EL ROSAL DESHOJADO
Nota:
ES INDIDPENSABLE COLOCAR ESTA GUÍA METODOLÓGICA CON LOS
CRITERIOS DE EVALUACIÓN EN EL TRABAJO.
II. OBJETIVOS
Que los estudiantes desarrollen la capacidad para:
1. Leer ensayos comprensivamente.
2. Elaborar ensayos a partir de las lecturas de otros ensayos.
3. Exponer las ideas planteadas por ensayistas en las lecturas de los mismos.
III. METODOLOGÍA
Los estudiantes organizados en equipos, leerán uno de los ensayos de Alberto Masferrer,
sugeridos por el o la docente, consultando otras fuentes de información para obtener
datos en torno al autor que enriquezcan la actividad.
Se evaluará la creatividad y los detalles de cada equipo.
IV. EVALUACIÓN
Los criterios de evaluación para esta actividad, serán los siguientes:
Introducción
En la mayoría de las páginas se refleja la vida diaria o recuerdos qué nacen y contienen
meditaciones sobre la vida, la niñez, lo temporal, lo pasajero y lo mundano. Sus escritos
estaban relacionados con sus concepciones y su arraigada religiosidad. Masferrer se valió
de la meditación reflexiva, y de la confrontación de la realidad qué lo rodeaba como la
necesidad de la fraternidad, convivencia y entendimiento de los hombres.
Pero todas son trozos literarios que, en su mayoría, acusan la tendencia del autor a
escribir sucintamente sobre cuestiones trascendentales que de pronto le asaltan a
contemplar una escena o un paisaje. Escuchar el canto de un pájaro, ver una flor o visitar
un sitio cualquiera, relacionando así sus concepciones panteístas y su sentido de
arraigada religiosidad.
Es indudable que Masferrer fue mejor prosista que versificador. Aunque las poesías que
se ofrecen en este volumen son escogidas. Su desarrollo no culmina en elevada
inspiración. Masferrer poseía, desde luego, gran sensibilidad expresiva; pero no llegó a
traducirla en los versos y estrofas que dejó escritos. Su prosa sí es fina y fuerte, y
conmovedora, en algunos momentos llega a ser poética y cuando trata temas humanos,
sabe imprimirles, dentro de su arrebatado apasionamiento, verismo, sentimiento
conmovedor, de tal modo que sus ideas impresionan y sus argumentos persuaden por su
sinceridad y belleza.
Podría decirse que en estos artículos se encuentra el germen de las ideas que Masferrer
se empeñó en difundir a través de estudios y ensayos más amplios. A medida que fue
madurándolas y desenvolviéndolas debido a la experiencia, conocimientos adquiridos y
ampliados, como por el fervor de evangelizar a los hombres el camino de su regeneración
y mejoramiento valiéndose de la meditación reflexiva y el confrontamiento de la realidad
que lo circunda, como de la necesidad de convivencia, fraternización y entendimiento con
los demás hombres.
La mayoría de estas páginas son trozos de la vida diaria o recuerdos que nacen al
conjuro de algún estímulo. Casi todas contienen meditaciones sobre la niñez, la vida, lo
temporal, mundano y pasajero. Muchas son notas autobiográficas con pensamientos
relativos a constantes afanes de Masferrer. Pero todas son trozos literarios que, en su
mayoría, acusan la tendencia del autor a escribir sucintamente sobre cuestiones
trascendentales que de pronto le asaltan a contemplar una escena o un paisaje, escucl1ar
el cantú de un pájaro, ver una flor o visitar un sitio cualquiera, relacionando así sus
concepciones panteístas y su sentido de arraigada religiosidad.
(Cae una hoja. Un torogoz de vuelo restallante se posa en una rama, y sube y baja,
y sube y baja la pluma única de su cola verde oscura).
¡Por primera vez vine a esta grama!, donde creí hallarme solitario y tranquilo; más
viene un jardinero con su rastrillo a recoger la basura, y bañó de polvo mis manos, mi
papel y mis ojos… Así fue mi vida ... así fue siempre…
Me sacudo el polvo de las manos. Me detengo a contemplar esta mano que tantas
palabras escribió. Está llena de manchas, toda llena de manchas al rever so, como si
cada palabra hubiera sido una mentira. Sin embargo, mi mano fue sincera. Palabras
de ira, sí escribió; de tristeza, de tedio, de exasperación y de melancolía. . . pero no de
mentira.
Por el anverso, mi mano aún está blanca. Aún se perciben en ella, vagamente, dos
cicatrices, de nueve que tenía, y recordaban una aventura de mi niñez. No había
advertido que esas cicatrices se habían casi todas borrado. . . ¡qué extraña sensación
me causa su pérdida! . . . Así fueron otras, del alma: heridas que nunca dejarían de
sangrar, pensaba yo; y ahora, cuando vengo a ellas, y las busco, ya no las encuentro.
Ya no se ven las cicatrices . . . ellas también murieron ...
Cae una hoja. Luego otra. Luego otra. Un clarinero joven ensaya sus primeros
vuelos en el gramal del Conacaste. Comienza él a vivir, a buscar un canto, así como
yo buscaba una palabra…
De estas dos cicatrices que aún conservo, la una es ancha y rugosa, la otra fina y
apenas visible. Me acuerdo: me negaron la salida en el colegio, un día domingo, porque
sí; porque yo era débil. Pero en aquel tiempo, con la fuerza de mis trece años, yo era
débil de cuerpo: mi corazón no sufría cadenas. Salté por un tapial cuyos bordes se
hallaban cubiertos de polvo y telarañas…
¿Será, pues, mi 11alabra, Olvido? Quizá esa es la palabra que más dolores me ha
curado; pero no me trajo ninguna alegría, no me trajo la paz. Siempre supe olvidar; no
hay injuria que yo no olvide, y las heridas que me hacen, huyen de mi memoria como
las nubes al soplo del viento. Pero el olvido, si se llevó mis lágrimas, también se llevó
mis risas y mis cantos...
Y no es así la paz…
Acabo de sentir un escozor intenso debajo del pulgar, en la mano derecha; tanto
que me cuesta escribir. ¿Qué es? Una herida diminuta, pero honda. Me la hizo el canto
del papel en que escribo, que es agudo y rígido. Es una heridita minúscula, pero
dolorosa. No 13 brota sangre, r tengo que apretarme fuertemente, para que salgan a
gunas gotitas. Contemplo esas gotitas rojizas, de un rojo amarillento, que se coagulan
en un instante. Pienso en mis días de adolescente, cuando yo me hería con frecuencia
las manos, los pies, las piernas, los brazos, el cuello.
Mi vida era entonces, Valor... ¿Sería acaso el Valor, esa palabra que encerraba la
serenidad de mis días y la paz de mis noches?...
Cae una hoja . . . luego otra, y otra, y otra ... una rama entera ha sido deshojada, y
el viento se llevó las hojas arrebatadamente ...
Sí, tal vez era el Valor mi palabra... Pero ya no tengo valor. El dolor físico, el alarido
de mis nervios martirizados por inmensas torturas; el estremecimiento de mis carnes,
que tiemblan al solo pensar en mis noches de angustia, me recuerda que ya perdí el
valor...
Me acuerdo que he vivido seis días en un estercole· ro, aullando de dolor, con mis
huesos quebrantados, y sin tener siquiera el tiesto de Job para roer mi podredumbre…
No, no quiero más hazañas, ni más a venturas. Bien lo dicen mis manos temblorosas
y marchitas… ya no hay valor en mí...
Caen las hojas, una a una, rozando melancólicamente el suelo, mientras un pájaro
modula, una última vez, su grito lamentable. Y me voy, yo también, puesto que el Sol
se fue...
Que piensas y cuáles son tus sensaciones y percepciones respecto del tema:
Solamente con leer el título El Rosal Deshojado se puede intuir muchas cosas debido
que los rosales son una especie de flor hermosa pero espinosa siendo acompañada
de esta otra palabra deshojado que quiere decir expuesto para obtener una mejor
exposición de sus racimos a la luz, según nuestra idea con este título Masferrer busca
expresar desde su punto de vista la belleza de la vida como lo contrario que llega a ser
esta por momentos.
En general la sensación que nos plasma Masferrer mediante estas historias fue la
idea que fueron eventos trascendentales que marcaron algunos aspectos importantes
en su vida, motivado por estos sentimientos el busco de la mejor forma posible
expresarlos explícitamente mediante su lirica que altamente lo hizo ser distinguido de
los demás, porque si vemos su lenguaje está fuertemente influenciado por la sinceridad
y belleza de la meditación reflexiva.
¿Cuáles son los párrafos claves que nos ayudan a comprender el contenido? cite
almenas tres párrafos.
¿Por qué los que siembran, cuidan y cosechan el pan han de carecer de él? ¿Por qué
el campesino que soporta todas las fatigas del trabajo agrícola ha de vivir hambriento,
mientras el ocioso burgués que jamás ha trazado un surco ni abrió jamás un hoyo, vive en
la abundancia? ¿Es esto lo que llaman orden social? ¿A esto es a lo que llaman república
y civilización? (Alberto Masferrer, 1913, pág.
Recomendaciones
Podría decirse que en estos artículos se encuentra el germen de las ideas que Masferrer
se empeñó en difundir a través de estudios y ensayos más amplios, a medida que fue
madurándolas y desenvolviéndolas debido a la experiencia, conocimientos adquiridos y
ampliados, como por el fervor de evangelizar mostrando a los hombres el camino de su
regeneración y mejoramiento valiéndose de la meditación reflexiva y el confrontamiento
de la realidad que lo circunda, como de la necesidad de convivencia, fraternización y
entendimiento con los demás hombres.
Este libro vuelve a mostramos al Masferrer bondadoso, convincente, empeñado en
que los humanos descubran su propio destino y encuentren la ruta de la salvación.
El poder estudiar este tipo de lecturas literarias de uno de los escritores más
sobresalientes de nuestro país es totalmente recomendable porque enriquece en gran
medida nuestra expresión escrita como verbal la transforma a una de mayor complejidad
ciertamente pero más poética en base a sentimientos y belleza generando un mayor
énfasis en la declaración de nuestras ideas según cualquier entorno, situación o paisaje
que queramos expresar con nuestras palabras.
CRITERIOS DE EVALUACIÓN
Elaboración del ensayo y de 10%
la síntesis, con limpieza
ortográfica y sintáctica.
Responsabilidad en la 5%
entrega y exposición del
trabajo.
Elaboración de material con 5%
creatividad. Nombre creativo
para la exposición.
Exposición oral clara, 10%
pausada y con buena dicción
y entonación.
Escribió correctamente el 5%
nombre del autor la fecha
de nacimiento y los
aspectos más destacados
de su vida.
Explicó cuál es la intención 10%
comunicativa del autor.
Citó varios contextos 5%
que abarca la lectura.
Escribió correctamente las 10%
ideas primarias y
secundarias.
Explicó el objetivo principal 10%
de la lectura.
Explicó en qué nos ayuda 10%
el texto para nuestra vida.
En la elaboración del 10%
ensayo, usó los conectivos
adecuado, para darle
coherencia al texto.
En la redacción de todo el 10%
trabajo aplicó
correctamente las normas
modernas de la redacción
y la ortografía.