Taller Manejo de La Ira

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TALLER MANEJO DE LA IRA

QUÉ ES LA IRA: «Enfado», «enojo», «indignación» La ira es una emoción que se


expresa con el resentimiento, furia o irritabilidad. • Se vuelve el sentimiento
predominante en el comportamiento, cuando una persona hace la decisión
consciente de tomar acción para detener inmediatamente el comportamiento
amenazante de otra fuerza externa. • La ira puede tener muchas consecuencias
físicas y mentales. Los efectos físicos de la ira incluyen aumento del ritmo
cardíaco, presión sanguínea y niveles de adrenalina y noradrenalina. • Algunos
ven la ira como parte de la respuesta cerebral de atacar o huir de una amenaza o
daño percibidos.

Manejar la ira, es saber manejar el enojo. Eso no significa que no me voy a enojar.
Hay que ser realistas, el enojo se da, lo que se debe hacer es saber controlarlo, y
aprender a resolver el problema que lo causa.

RESPUESTAS DE NUESTRA IRA: Ante la ira o el enojo hay 3 tipos de


respuestas:

a. Explosiva

b. Implosiva

c. Asertiva

RESPUESTA EXPLOSIVA: Ser Violento, ser hostil, romper cosas, pegarle al otro,
perder el control.

RESPUESTA EXPLOSIVA: Ventajas: Sacamos el enojo. Desventajas: Lo


hacemos desquitándonos con otro, generamos resentimiento, dañamos
físicamente, dañamos psicológicamente, generamos destrucción irreparable.
Violencia genera violencia. Damos pésimo ejemplo, así nunca aprenderemos a
controlarnos.

RESPUESTA IMPLOSIVA: Conducta Pasiva Agresiva: Es no mostrar enojo,


aguantar, callarse, asentir, bajar la cabeza, hacerse el loco….. el enojo entonces
se desquita boicoteando: Haciendo mal pasivamente, o dejando de hacer algo
para molestar al otro. Puede ser aun mas destructivo que el explosivo.

Ventajas: No hay daño con mis palabras, no genero tensión externa, evito
conflictos…. Desventajas: Es una bomba de tiempo, genera enfermedades,
genera frustración acumulada, al final es aun más violento, se desquita
boicoteando. RESPUESTA ASERTIVA: Suele definirse como un comportamiento
en el cual la persona no agrede ni se somete a la voluntad de otras personas, sino
que manifiesta sus convicciones y defiende sus derechos.

RESPUESTA ASERTIVA: La asertividad es una conducta de las personas, un


comportamiento. Es también una forma de expresión consciente, congruente,
clara, directa y equilibrada. Su finalidad es: -comunicar nuestras ideas y
sentimientos o defender nuestros legítimos derechos…. -sin la intención de herir o
perjudicar, -actuando desde un estado interior de autoconfianza, -en lugar de la
emocionalidad limitante típica de la ansiedad, la culpa o la rabia. ESCALERA DE
LA IRA: Hay muchas maneras de expresarla, dependiendo de la madurez de la
persona. De peor a mejor son:

• Conducta pasivo-agresiva (negativo)

• Comportamiento emocionalmente destructivo (negativo)

• Abuso físico (negativo)

• Abuso verbal (negativo)

• Destruir bienes (negativo)

• Lanzar objetos (negativo)

• Expresar quejas no relacionadas con el asunto (fundamentalmente neg.)

• Desplazar la ira hacia otras fuentes que no son las originales .


(fundamentalmente negativo)

• Maldecir (fundamentalmente negativo)

• Comportamiento desagradable y ruidoso (fundamentalmente negativo) • Pensar


lógica y constructivamente (positivo y negativo)

• Atenerse a la queja original (positivo y negativo)

• Concentrar la ira tan sólo en lo que la causa (positivo y negativo)


• Buscar la solución (positivo)

• Tener un comportamiento abierto (positivo)

El tratamiento específico que desarrollan los Psicólogos expertos en el control de


la ira y la agresividad tiene como objetivos:
 
 Que la persona conozca la naturaleza y función de su agresividad y
descontrol de la ira, esto le permitirá establecer estrategias más adecuadas
para controlarla y dominarla.
 Aprender diferentes técnicas para el control de la ira y la agresividad.
 Modificar todos aquellos aspectos internos y de personalidad asociados a la
agresividad, que permita que la persona desarrolle otras pautas de
respuestas más asertivas y adecuadas, para resolver los conflictos.
 Aprender a conocer las emociones, cómo se expresan, para qué sirven y
cómo se gestionan

 1. No acumular ira sino gestionarla adecuadamente


Cuando algo injusto sucede y no reaccionamos, vamos acumulando ira y
enfado. Tarde o temprano, todo este enojo que vamos
guardando estallará y puede dar lugar a un episodio de violencia verbal y/o
física. Por tanto, es importante afrontar los problemas con asertividad y
control, para no dejar que la bola del enfado vaya creciendo por momentos.
 2. Evitar la mentalidad de ganador/perdedor
En muchas ocasiones, nos enfadamos como reacción a la frustración de no
haber logrado algunos objetivos que nos planteábamos, o cuando algo no
ha salido tal como esperábamos. En estos casos, la empatía es el rasgo
distintivo entre aquellos que saben gestionar la frustración, controlar la ira y
aceptar las contrariedades con deportividad. Debemos evitar plantear las
relaciones interpersonales como un juego en que se gana o se pierde.
 3. Reflexionar acerca de las causas y las consecuencias de nuestra
irascibilidad
Pensar en ello y analizar si nuestra reacción emocional es realmente
justificada nos puede ayudar. Muchas veces no pensamos por qué
estallamos en un arrebato de ira, por ejemplo cuando conducimos un coche
y reaccionamos instantáneamente insultando o haciendo gestos a otros
conductores cuando hacen algo incorrecto. 
En ese momento sería vital meditar sobre el porqué reaccionamos de este
modo: ¿has pensado en las posibles consecuencias de tener un episodio
de ira mientras estás conduciendo? Visto así tal vez vale la pena tomarse
estas situaciones de otra manera.
 4. Descansar lo suficiente
Cuando estamos agotados física o mentalmente, nuestras reacciones de ira
y los impulsos agresivos son más frecuentes y tenemos menos
herramientas para gestionarlos. Por este motivo es necesario descansar
y dormir las horas necesarias: tanto en el plano cuantitativo (dormir mínimo
8 horas) como en lo cualitativo (descansar bien).
Además, existen varios momentos del día en que somos más vulnerables a
estallar de ira, y eso varía de una persona a otra. Somos capaces de
controlar la ira cuando estamos descansados, porque podemos analizar
mejor las situaciones.
 5. Relajación, meditación, autocontrol...
La relajación es la mejor manera de prevenir los ataques de ira. Existen
distintas formas de relajarse: practicar deporte, el yoga, la meditación,
el Mindfulness, tomar un baño de agua caliente, o cualquier método que
pase por distraer la mente y llevarnos a un estado de positividad.
De hecho, en los momentos concretos en que detectamos que podemos
tener una reacción de ira, es una buena idea tratar de respirar profunda y
lentamente durante por lo menos veinte segundos: esto hará que nuestro
cuerpo se desintoxique de la negatividad y la irascibilidad que sentimos.
 6. Evitar situaciones y personas irritantes
Debemos evitar encontrarnos en situaciones en que sabemos que pueden
aumentar nuestra ira o llevarnos a un estado negativo. También es
probable que conozcas ciertas personas que te irriten especialmente (las
temidas personas tóxicas). 
En la medida de lo posible, hay que tratar de evitar los contextos en que
sepamos que podemos estallar, y en cuanto a las personas que nos irritan,
algunas veces será imposible no tener ningún contacto (jefes, algún familiar
en concreto), por tanto, en la medida de lo posible, habría que tratar de
conversar con esa persona con el fin de que las interacciones no resulten
tan irritantes.
 7. Terapia con un psicólogo
La ayuda de un psicoterapeuta profesional y acreditado puede ayudar
decisivamente a gestionar este tipo de reacciones emocionales, sobre todo
cuando ha llegado un punto en que los comportamientos agresivos
derivados de un mal control de la ira son frecuentes. 
La terapia psicológica para estos casos está destinada a modificar actitudes
que generan situaciones de enfado, y permiten lograr una reestructuración
cognitiva para que el paciente pueda gestionar y controlar su ira. También
se emplean algunas técnicas de control emocional para controlar la ira y
manejar así la agresividad.

Se realiza el taller se ponen ejemplos de cada uno de los tipos de IRA


los jovenes clasifican el manejo de su IRA la gran mayoria como explosiva
muy pocos con manejo implosivo
Se refuerzan herramientas para su control
Se responden dudas acerca del tema
Se cierra el taller

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