Derecho Procesal Laboral

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS


CENTRALES “RÓMULO GALLEGOS”
ÁREA CIENCIAS DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS.

CATEDRA: DERECHO PROCESAL LABORAL


DOCENTE: Dr.
INTEGRANTE:

SAN JUAN DE LOS MORROS, FEBRERO DE 2023


INTRODUCCIÓN
Dada la importancia de los medios de resolución de conflictos en sede judicial, el proceso
laboral venezolano ha servido de modelo para la implementación en otras áreas del derecho;
razón por la cual la investigación desarrollada refleja la función mediadora del Juez Laboral
Venezolano y el protagonismo de las partes intervinientes en proporcionarse su propia decisión,
con el análisis del tratamiento jurídico de la mediación y su eficacia en sede judicial a través de
las distintas herramientas y técnicas que facilitan la efectividad de este medio de resolución de
conflicto. Así también los resultados proporcionados por dos poblaciones de estudio: el Juez
Laboral y por la otra las Partes intervinientes en el proceso de mediación.
En este orden de ideas, los medios de resolución de conflictos constituyen instrumentos
mediante los cuales se pacifican los conflictos producto de un proceso que permite a las partes
dar una solución con la intervención de un tercero. Ahora bien, al revisar la legislación nacional,
se observa el estímulo hacia el uso de estos medios; es por ello que la presente investigación tiene
por norte el estudio de la Función Mediadora del Juez en el Proceso Laboral Venezolano,
tomando en consideración el papel que desempeña el juez del trabajo, correspondiéndole esta
función propia al Juez de Sustanciación, Mediación y Ejecución en ser el director del proceso,
teniendo como principal función propia estimular el avenimiento entre las partes a través del
proceso de mediación en audiencia preliminar.
Todo lo antes señalado; implica una innovación de la litis laboral venezolana, determinando la
función mediadora del juez en el proceso laboral bajo la rectoría del juez de sustanciación,
mediación y ejecución del trabajo. Por otro lado, el Juez debe conocer realmente el alcance que
tiene la práctica de la mediación y si aporta beneficios al logro de la justicia venezolana. La
Asamblea Nacional Constituyente (1999), Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, como texto supremo regente del ordenamiento jurídico interno, ha consagrado el
estímulo a la aplicación de los medios para la solución de conflictos, dirigido a construir un
nuevo Poder Judicial a la par con la justicia social y democratizada. Por otra parte, la esencia de
la mediación laboral, consistente en el proceso por el cual las partes involucradas en una
controversia derivada, Procesal del Trabajo, que viene bien sea de la relación de trabajo
propiamente dicha o mediación en Sede Administrativa, Sustanciación, Mediación y Ejecución
del Trabajo, lo cual constituye solo una parte del sentido integral de la mediación.
TEMA I

ORGANIZACIÓN DEL CIRCUITO DEL TRABAJO

Uno de los elementos determinantes para determinar el tribunal competente es la materia,


y se debe tener presente lo establecido en el artículo 28 del Código de Procedimiento Civil: “La
competencia por la materia se determina por la naturaleza de la cuestión que se discute y por las
disposiciones legales que la regulan.” quiere decir que dependiendo del derecho que se reclame
se va a determinar la naturaleza de la cuestión y por vía de consecuencia, el tribunal competente
en este caso.
La autonomía e independencia de la jurisdicción del trabajo la garantiza la Sala Social del
Tribunal Supremo de Justicia, con competencia material en la problemática laboral. Por otra parte
la jurisdicción laboral será ejercida por los  tribunales del trabajo previstos en la ley con
competencia especializada en materia laboral y con autonomía e independencia de los otros
órganos del Poder Judicial. El juez o jueza laboral bien sea de tribunales unipersonales o
colegiados, deberá ser letrado o profesional de la abogacía, preferentemente especialista en
Derecho del Trabajo y como tal, un estudioso a fondo de dicha ciencia garantizando de esta
manera un conocimiento especializado de la materia.
Dentro de la Ley Orgánica Procesal Laboral tenemos un notable cambio en la estructura
de los tribunales, Art 14 ejusdem  Los Tribunales del Trabajo son: 
a) Tribunales del Trabajo que conoce, en primera instancia. 
b) Tribunales Superiores del Trabajo que conocen en segunda instancia. 
c) Tribunal Supremo de Justicia, en Sala de Casación Social. Siendo este último literal la
diferencia con la antigua ley que no hacía referencia de esta instancia.
Artículo 15. Los Tribunales del Trabajo se organizarán, en cada circuito judicial, en dos
instancias: una primera instancia integrada por los Tribunales de Sustanciación, Mediación y
Ejecución del Trabajo, y los Tribunales de Juicio del Trabajo. Una segunda instancia integrada
por los Tribunales Superiores del Trabajo Su organización, composición y funcionamiento se
regirá por las disposiciones establecidas en esta Ley y en las leyes respectivas. 
Con este articulo apreciamos el notable cambio en la estructura de los tribunales laborales,
ya que con esta sub-división en primera instancia   los Tribunales de Sustanciación, Mediación y
Ejecución del Trabajo, el Juez tiene la tarea fundamental de que las partes lleguen a un acuerdo
y así evitar de ir a la siguiente etapa dentro de esa misma instancia como lo es el juicio, de
ser así el juez de juicio es quien tendrá la tarea de apreciar las pruebas, poner en practica los
principios laborales y administrar justicia, luego esa decisión tomada será apelable
y podrá ejercer recurso de casación ante el Tribunal Supremo de Justicia, cabe destacar que
reciente jurisprudencia nos indica que las decisiones que son apelables en materia laboral debe
reunir un requisito esencial y es que deben estar en el  valor de 3000 UT.
Se debe saber que los tribunales de primera instancia son unipersonales es decir que lo
conforman un Juez y un Secretario ambos profesionales del derecho y los Tribunales
Superiores serán colegiados o unipersonales los primeros constituidos por 3 jueces y un
secretario;  La Ley Orgánica Procesal Laboral en su artículo 21 establece los deberes de los
secretarios la antigua ley no lo hace. Esta nueva estructura de tribunales y proceso laboral ha
permitido una gran celeridad procesal en esta área del derecho que  tutela al trabajador y las
relaciones laborales.
La Inspectoría del Trabajo, es el órgano de la administración pública que se encarga del
trámite de procedimientos laborales, en vía administrativa. Es un órgano dependiente del
Ministerio del trabajo y este tiene una sede en cada Estado. La Inspectoría del Trabajo estará a
cargo de un Inspector y este ejercerá su representación, en todos los asuntos de su competencia y
debe además cumplir con las instrucciones del Ministerio del Trabajo.
Los Tribunales de Municipio Se modifican a nivel nacional, las competencias de los
Juzgados para conocer de los asuntos en materia Civil, Mercantil y Tránsito, de la siguiente
manera; Los Juzgados de Municipio, conocerán en primera instancia de los asuntos
contenciosos cuya cuantía no exceda de tres mil unidades tributarias (3.000 UT). Los Juzgados de
Primera Instancia, conocerán en primera instancia de los asuntos contenciosos cuya cuantía
exceda las tres mil unidades tributarias (3.000 UT).
A los efectos de la determinación de la competencia por la cuantía, en todos los asuntos
contenciosos cuyo valor sea apreciable en dinero, conste o no el valor de la demanda, los
justiciables deberán expresar, además de las sumas en bolívares conforme al Código de
procedimiento Civil y demás leyes que regulen la materia, su equivalente en unidades
tributarias (U.T.) al momento de la interposición del asunto.
Las competencias de la jurisdicción especial del Trabajo son competentes para sustanciar
y decidir:
Los asuntos contenciosos del trabajo, que no correspondan a la conciliación ni al arbitraje.
Las solicitudes de calificación de despido o de reenganche, formuladas con base en la estabilidad
laboral consagrada en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y en la
legislación laboral. Las solicitudes de amparo por violación o amenaza de violación de los
derechos y garantías constitucionales establecidos en la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, relaciones laborales como hecho social, de las estipulaciones del
contrato de trabajo y de la seguridad social. Los asuntos contenciosos del trabajo relacionados
con los intereses colectivos o difusos.  
En materia de proceso laboral existe la doble instancia, sin embargo existe una
particularidad y es que la primera instancia se encuentra delimitada por dos fases: La fase de
Sustanciación Mediación y Ejecución estará a cargo de un Tribunal unipersonal que se
denominará Tribunal de Sustanciación, Mediación y Ejecución del Trabajo. La fase de
juzgamiento corresponderá a los Tribunales de Juicio del Trabajo. Y la segunda instancia que
conocerá de la apelación de las sentencias interlocutorias y sentencias definitivas. Igualmente
existen dos procesos judiciales extraordinarios: El Control de Legalidad y el Recurso de
Casación.
Es importante destacar que de acuerdo con lo previsto en el artículo 25 ordinal 3 de la ley
orgánica de la jurisdicción contenciosa administrativa, los tribunales de la jurisdicción del trabajo
conocerán de las demandas de nulidad contra los actos administrativos de la inspectoría del
trabajo en materia de inamovilidad.
La Jurisdicción y competencia especifica en materia de trabajo, El Art.123. frac. XXXI,
apartado A de la Constitución y de la Ley Federal del Trabajo, señalan por razón de la materia,
pero es exclusiva de la competencia de las autoridades federales en los asuntos relativos a: Ramas
industriales, Textil, Eléctrica, Cinematográfica, EMPRESAS; aquellas que sean administradas en
forma directa o descentralizada por el gobierno federal, aquellas que actúen en virtud de un
contrato o concesión federal y las industrias que le sean conexas, aquellas que ejecuten trabajo en
zonas federales o que se encuentren bajo jurisdicción federal, en las aguas territoriales, o en las
comprendidas en la zona económica exclusiva de la Nación.
Será competencia de las autoridades federales, la aplicación de las disposiciones de
trabajo en los asuntos relativos o conflictos que afecten a dos más entidades federativas, contratos
colectivos que hayan sido declarados obligatorios en más de una entidad federativa; obligaciones
patronales en materia educativa, Las Juntas Federales de Conciliación y Arbitraje conocen, por
vía de excepción, en asuntos a cuyo conocimiento se excluya a las entidades federativas. Las
Juntas Federales de Conciliación y Federal de Conciliación y Arbitraje, conocerán de los
conflictos de trabajo cuando se trate de las ramas industriales, empresas o materias
Existen diversas normas de competencia en materia laboral, sintetizamos a continuación:
Obligaciones patronales en materia de seguridad e higiene en los centros de trabajo, La
competencia por razón de la materia se rige por lo dispuesto en el apartado "A", fracción XXXI,
del artículo 123 constitucional. Si se trata de las Juntas de Conciliación, la del lugar de
presentación de servicios. Si se trata de las Juntas de Conciliación y arbitraje, el actor puede
escoger entre: La competencia por razón de territorio, Afirma el artículo 700 de la Ley, se rige
por las normas siguientes: Las Juntas del lugar de la prestación de los servicios; si estos se
prestaron en varios lugares, será la junta de cualquiera de ellos. La Junta del lugar de la
celebración del contrato. La Junta del domicilio del demandado.
En los conflictos colectivos de jurisdicción federal, la Junta Federal de Conciliación y
Arbitraje, en los términos del artículo 606 de la ley del Trabajo; en los conflictos colectivos de
jurisdicción local, la del lugar en que este ubicada la empresa o establecimiento. Cuando se trate
de la cancelación del registro de un sindicato, la Junta el lugar donde se hizo. En los conflictos
entre personas o trabajadores entre sí, la Junta el demandado. Cuando el demandado sea un
sindicato, la Junta del domicilio del mismo.
TEMA II

LOS PRINCIPIOS PROCESALES EN LA LEY ORGANICA

PROCESAL DEL TRABAJO

DEFINICIÓN DE PRINCIPIOS
Principios aquellas normas orientadoras básicas de  carácter general que funcionan como
guías para que los sujetos sometidos a ellas actúen o tomen decisiones en una dirección correcta y
previamente determinada. Visto de esta manera los principios necesariamente deben estar
vinculados a un fin.
QUE SE ENTIENDE POR PRINCIPIOS PROCESALES LABORALES
Parafraseando a Dr. Rafael Ortiz-Ortiz en la definición que da de principios procesales
podemos decir que son aquellas reglas de valoración que se deducen del ordenamiento jurídico
adjetivo laboral y que sirven de fundamento para la interpretación y aplicación de las normas
procesales en atención a un criterio axiológico primario como lo es la realización de la justicia

FUNDAMENTO CONSTITUCIONAL DEL DERECHO PROCESAL LABORAL


Los fundamentos constitucionales del derecho procesal laboral primeramente se encuentran
en la disposición transitoria cuarta, numeral cuarto la cual establecía que dentro del primer año,
contado a partir de su instalación de la nueva Asamblea Nacional debía aprobar una ley orgánica
procesal del Trabajo que garantizara el funcionamiento de una jurisdicción laboral autónoma y
especializada así como la protección de los trabajadores en los términos de lo que era para
entonces una nueva Constitución. Igualmente esta norma transitoria indicaba que la nueva Ley
orgánica debía estar orientada por los principios de gratuidad, celeridad, oralidad, inmediatez,
prioridad de la realidad de los hechos, la equidad y rectoría del juez del proceso.
Otra base constitucional del derecho procesal venezolano es el artículo 26 del texto
constitucional que establece lo que es la Tutela Judicial Efectiva en los términos siguientes:
“Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de administración de justicia para
hacer valer sus derechos e intereses, e incluso los colectivos o difusos, a la tutela efectiva
de los mismos y a obtener con prontitud la decisión correspondiente. El Estado
garantizará una justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea, transparente, autónoma,
independiente, responsable, equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismo
o reposiciones inútiles”
Observamos entonces que la Tutela Judicial Efectiva es aplicable a todo Proceso
Jurisdiccional y por lo tanto aplicable al Proceso Laboral. También se aprecia en este artículo una
serie de principios que como veremos más adelantes fueron desarrollados acertadamente en la
Ley procesal adjetiva laboral denotando perfecta sintonía con la Constitución.
Otro fundamento constitucional lo encontramos en el artículo 257 que al igual que la norma
anterior es base de todo Proceso Jurisdiccional y por ende base del proceso laboral.
 Artículo 257. El proceso constituye un instrumento fundamental para la realización de la
justicia. Las leyes procesales establecerán la simplificación, uniformidad y eficacia de los
trámites y adoptarán un procedimiento breve, oral y público. No se sacrificará la justicia por la
omisión de formalidades no esenciales.”
El referido artículo establece la instrumentalidad del proceso como medio para la realización
de la justicia y define sus características esenciales (simplificación, uniformidad y eficacia de los
trámites y adoptarán un procedimiento breve, oral y público), indicando que éste debe ser
determinado por las leyes procesales.

PRINCIPIOS ESTABLECIDOS EN LA LEY ORGÁNICA PROCESAL DEL TRABAJO


VENEZOLANA

PRINCIPIO DE AUTONOMIA Y ESPECIALIDAD DE LA JURISDICCIÓN LABORAL


Consecuente con la Disposición Transitoria Cuarta, numeral 4º de la Constitución la Ley
Orgánica Procesal del Trabajo que garantiza, por lo menos en teoría,  el funcionamiento de una
jurisdicción laboral autónoma y especializada y se le otorga a los tribunales del trabajo la facultad
para conocer exclusivamente de todos aquellos asuntos de carácter contencioso que se produzcan
con relación al hecho social trabajo. Se desarrolla la idea de autonomía y especialidad de la
jurisdicción laboral al establecer que conocerán en primera instancia los Tribunales de
Sustanciación, Mediación y Ejecución y los de Juicio y las Cortes Superiores del Trabajo de las
respectivas circunscripciones o circuitos judiciales en segunda instancia. Igualmente la autonomía
e independencia de la jurisdicción del trabajo la garantiza la Sala Social del Tribunal Supremo de
Justicia, con competencia material en la problemática laboral. Por otra parte la jurisdicción
laboral será ejercida por los tribunales del trabajo previstos en la ley con competencia
especializada en materia laboral y con autonomía e independencia de los otros órganos de poder,
es decir,  la autonomía también implica que los jueces en el ejercicio de sus funciones, son
autónomos e independientes de los demás órganos del Poder Público y solo deben obediencia a la
ley y al derecho. La especialidad también se materializa con la existencia de un ordenamiento
jurídico meramente laboral que se aplica de manera preferente en la solución de cada caso
particular.
LA ORALIDAD
La oralidad resulta ser el instrumento adecuado para facilitar la aplicación de los principios
políticos básicos y de las garantías que estructuran el propio sistema procesal laboral; en tal
sentido, lo que debe tomarse en cuenta es, principalmente, su eficacia para realizar y cumplir los
principios básicos y las garantías que constituyen la estructura del sistema procesal. Los actos
principales del proceso laboral se efectúan de manera oral, como serían la audiencia preliminar en
su actividad de mediación, la declaración de testigos, la declaración de parte, alegatos de las
partes al inicio de la audiencia de juicio que representa el contenido del libelo y de la
contestación, la sentencia oral, los fundamentos o razones de las apelaciones o de la
formalización, según se trate; la manera más clara en que se concreta este principio se encuentra
en la propia existencia de un proceso oral, en el que de forma verbal se exponen todas las
alegaciones de las partes.37Pero tiene actuaciones escritas –los actos deben constar escritos y
firmados–, lo que no le hace cambiar su condición de procedimiento oral, ni tampoco calificarlo
como mixto, porque el predominio de la oralidad es determinante, la mayoría de las actuaciones
son orales, la oralidad se presenta como el elemento central, exigiendo la presentación de las
partes a una hora y día determinado, para oír sus alegatos.
 PRINCIPIO DE PUBLICIDAD
El proyecto la  LOPT indica que los actos del proceso serán públicos, pero se procederá a
puerta cerrada en la audiencia preliminar para facilitar la posibilidad de mediación y conciliación
o por razones de decencia pública cuando así lo considere el juez. Los estudiosos del Derecho
Procesal coinciden al señalar que este principio es permite la transparencia del proceso
jurisdiccional y la participación ciudadana en la administración de justicia.
PRINCIPIO DE INMEDIACIÓN
El termino inmediación se puede definir literalmente como próximo, cercano, inmediato. En
materia procesal esta definición es válida y se refiere a la relación y comunicación cercana que
deben tener los sujetos procesales con los medios de pruebas, los actos procesales y entre sí.
Como consecuencia de lo anterior la inmediación se puede clasificar en subjetiva y objetiva.
La inmediación subjetiva o formal exige que el Juzgador tome conocimiento directo del material
probatorio que ha sido reproducido en su presencia junto a todos los demás sujetos del proceso.
La inmediación objetiva o material exige que el Operador Jurisdiccional debe obtener el
conocimiento y formar su convicción utilizando el medio probatorio más cercano al hecho a
probar, entre todos los medios concurrentes.
PRINCIPIO DE CONCENTRACIÓN
Cuando se pregunta por este principio en las aulas de clases es común escuchar que se trata de
la concurrencia y contacto permanente de los sujetos procesales, específicamente del juez y las
partes en los actos procesales. Si se revisa detenidamente bibliografías especializadas en teoría
general del proceso se puede deducir que el principio en mención va más allá. De acuerdo con el
principio de concentración la sustanciación oral de la causa debe realizarse en una audiencia
única o en pocas próximas con el objeto de no perder, como consecuencia de audiencias orales
muy distantes en el tiempo, las ventajas de la inmediación de la relación entre juez y los
elementos de pruebas.
Al respecto, el doctor Devis Echandía en su libro Teoría General del Proceso escribió lo
siguiente:
“… tiende a que el proceso se realice en el menor tiempo posible y con la mejor unidad.
Para esto se debe procurar que el proceso se desenvuelva sin solución de continuidad y
evitando que las cuestiones accidentales o incidentales entorpezcan el estudio de lo
fundamental; lo cual solo se obtiene restringiendo el derecho de interponer recursos e
incidentes de previa definición.
Igualmente, tiende este principio a dejar todas las cuestiones planteadas, los incidentes,
excepciones y peticiones, para ser resueltas simultáneamente en la sentencia,
concentrado así el debate judicial.
De lo dicho se concluye que sólo en los procedimientos orales tiene aplicación adecuada
este principio, ya que en las audiencias se presentan todas las excepciones y se plantean
toldos los incidentes, además de allegarse las pruebas y formularse los alegatos, y por
regla general en la sentencia se resuelven todos estos problemas, sin que pueda
suspenderse el curso del proceso para darle solución previa a cada uno de ellos. …”
Exige este principio que el juicio oral se realice frente a todos los sujetos procesales, desde el
inicio hasta su terminación, en un solo acto y en forma sucesiva, con el propósito de que exista la
mayor proximidad entre el momento en que se recibe toda la prueba, formulan las partes
argumentaciones y conclusiones sobre ella, deliberan los jueces y se dicta sentencia

PRINCIPIO DE GRATUIDAD
Este principio también de rango constitucional garantiza el derecho que toda persona tiene de
acceder a los órganos de administración de justicia laboral, destacándose en el proyecto la
garantía de la gratuidad de la justicia del trabajo. Establece el artículo 8 de la Ley Orgánica
Procesal del Trabajo Vigente que  la justicia laboral debe ser gratuita; en consecuencia los
tribunales laborales, registradores y notarios no pueden establecer tasas, aranceles, ni exigir pago
alguno por sus servicios ni para el otorgamiento de poderes y registros de demandas laborales.
Hay que destacar que este principio debe ser aplicado tanto del lado del trabajador como del
patrono, pues en la práctica se ha querido favorecer al primero por ser supuestamente el débil
jurídico y económico de la relación de trabajo, sin embargo, la Ley adjetiva laboral no hace
distinción alguna y por lo tanto el patrono como el trabajador deberían ser tratado por igual y en
las mismas condiciones reafirmando de esta manera el principio de igualdad ante la Ley.

PRINCIPIO DE LA SUPREMACÍA DE LA REALIDAD DE LOS HECHOS SOBRE LAS


FORMAS O APARIENCIAS
La exposición de motivo de la Ley Orgánica Procesal del Trabajo vigente se refirió a este
principio en los términos siguientes:
“…en las relaciones laborales prevalece la realidad sobre las formas o apariencias.
Consagra lo que en la doctrina se denomina el contrato realidad. Principio este también
consagrado en la legislación sustantiva y que consiste en que el juez no debe atenerse a la
declaración formal de las partes acerca de la naturaleza laboral o no laboral de su relación
jurídica, sino que debe indagar en los hechos la verdadera naturaleza jurídica de la
relación. Es consecuencia, cada vez que el juez del trabajo verifique la realidad de la
existencia de una prestación personal de servicio y que ésta sea subordinada, debe declarar
la existencia de la relación de trabajo independientemente de la apariencia o simulación
formal que las partes puedan haberle dado a dicha relación”.
Con este principio se trata de superar aquellas prácticas del pasado que constituían una
verdadera estafa al trabajador por parte de grandes empresas nacionales e internacionales como
Polar, Pepsi y Coca-Cola quienes simulaban una relación mercantil con humildes choferes de
camiones distribuidores o repartidores de mercancías, escondiendo una verdadera relación de
trabajo.
PRINCIPIOS INDUVIO PRO OPERARIO
El Principio de Favor o In dubio Pro Operario, cuando hubiere dudas acerca de la aplicación o
concurrencia de varias normas o en la interpretación de una determinada norma se aplicará la más
favorable al trabajador.
El Principio Protector se consagra por vez primera en Venezuela en un texto normativo, en el
artículo 59 de la Ley Orgánica del Trabajo (LOT) promulgada en 1990, el cual establece:
Artículo 59. – (...) Si hubiere dudas en la aplicación de varias normas vigentes, o en la
interpretación de una determinada norma, se aplicará la más favorable al trabajador. La norma
adoptada deberá aplicarse en su integridad.
Al dictarse el Reglamento –general– de la Ley Orgánica del Trabajo (RLOT) a comienzos del
año 1999, el artículo 8° es dedicado al desarrollo sistemático de los principios fundamentales del
Derecho del Trabajo3, entre los cuales se menciona en primer lugar al principio protectorio o de
tutela de los trabajadores, que se explica a través de tres reglas operativas bien conocidas y
desarrolladas por la doctrina (las dos primeras ya consagradas previamente en la LOT), a saber:
(i) Regla de la norma más favorable o principio de favor, en cuya virtud si se plantearen dudas
razonables en la aplicación de dos o más normas, será aplicada aquella que más favorezca al
trabajador;
(ii) Principio in dubio pro operario, en atención al cual en caso de plantearse dudas razonables en
la interpretación de una norma, deberá adoptarse aquella que más favorezca al trabajador; y
(iii) Principio de conservación de la condición laboral más favorable, por virtud del cual deberán
ser respetados los derechos que se encuentran irrevocable y definitivamente incorporados al
patrimonio del trabajador.
Posteriormente, la vigente Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV),
aprobada a finales de 1999 y elaborada por una Asamblea Nacional Constituyente elegida para tal
fin, vino a consagrar constitucionalmente algunos de los principios ya previstos en la LOT y el
RLOT, para garantizar mediante su aplicación la protección del trabajo como hecho social. Entre
los principios que la CRBV consagra, se estableció en el artículo 89.3, el Principio Protector, al
disponer que:
Cuando hubiere dudas acerca de la aplicación o concurrencia de varias normas, o en la
interpretación de una determinada norma, se aplicará la más favorable al trabajador o trabajadora.
La norma adoptada se aplicará en su integridad.
También la actual Ley Orgánica Procesal del Trabajo (LOPT) incluye una referencia expresa a
este principio, a lo cual nos referiremos infra en detalle, pues sobre ello y su aplicación en el
proceso laboral, gravita precisamente el presente trabajo.
PRINCIPIO DE LA RECTORIA DEL JUEZ
Esto significa que es el juez o jueza quien gobierna o rige el proceso. En este caso el juez o
jueza va a participar directa y personalmente, y no a través de intermediarios; en la sustanciación
del proceso y en el debate procesal correspondiente todo bajo su absoluta y personal dirección,
resolviendo las incidencias que pudieran presentarse de acuerdo con la normativa establecida en
la Ley o en su defecto de acuerdo a los criterios que éste establezca a fin de garantizar la
consecución de los fines fundamentales del proceso.
PRINCIPIO DE BREVEDAD Y CELERIDAD
Los lapsos deben cumplirse tal cual como lo estable la ley. La brevedad procesal es un
principio fundamental del proceso laboral (art. 2 LOPT), ya que justicia tardía no es justicia, así
mismo, establece el artículo 257 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que
el proceso constituye un instrumento fundamental para la realización de la justicia y que las leyes
procesales adoptarán un procedimiento breve, oral y público, mandato éste cumplido por la Ley
Procesal Laboral que rige las controversias judiciales laborales.

EL PRINCIPIO DE LIBRE VALORACIÓN DE LA PRUEBA (SANA  CRÍTICA)  


En forma directa, sin intermediarios, el juez o tribunal debe recibir todos los elementos de
prueba, frente a todas las partes, lo cual le permite apreciar la veracidad de la misma según las
reglas de la lógica, la experiencia, la psicología y el sentido común, con mayor posibilidad que
cuando simplemente valora un documento o transcripción de prueba. Comentaba en profesor de
esta Cátedra que en conversación con el Dr. Jairo Parra Quijano, conocido autor procesalista
colombiano, este decía que la sana critica le quitaba al juez aquella camisa de fuerza como lo era
la tarifa legal, es decir, la libre valoración de la prueba permitía al juez, partiendo de los
principios elementales de la lógica, de las experiencia personales y profesional acumulada a lo
largo de los años tomar decisiones más ajustadas a la verdad y a la justicia.
PRINCIPIO DE LA NOTIFICACIÓN UNICA
El artículo 7 de la LOPT establece que una vez hecha la notificación para la audiencia
preliminar, las partes quedan a derecho y no habrá necesidad de nueva notificación para ningún
acto del proceso, salvo los casos expresamente señalado por la Ley. La Sala de Casación Social
del TSJ. Sent N° 1098 de fecha 18/10/2011, estableció lo siguiente:
“Si bien es cierto que el proceso laboral se rige por el principio de notificación única,
entendiéndose que las partes están a derecho desde la notificación inicial, esto no puede
ser infinito; la   falta de actividad de los sujetos procesales durante un prolongado
período de tiempo, paraliza la causa y rompe la estadía a derecho de éstos, resultando
incluso violatorio de derechos y garantías constitucionales, pues mantener
indefinidamente arraigadas las partes al proceso, sujetas a que éste continúe sin previo
aviso, puede ocasionarles graves consecuencias…”
 PRINCIPIO DE LEGALIDAD
Tal como lo expresó el legislador en el artículo 11 de la LOPT, los actos procesales se
realizaran en la forma prevista en la Ley; en ausencia se disposición expresa, el juez del Trabajo
determinara los criterios a seguir para su realización, todo ello para con el propósito de garantizar
la consecución de los fines fundamentales del proceso. También quedo establecido en este
artículo las normas de aplicación supletoria y a tal efecto, el juez de Trabajo podrá aplicar
analógicamente disposiciones procesales establecidas en el ordenamiento jurídico, teniendo en
cuenta el carácter tutelar de derecho sustantivo y adjetivo del derecho del trabajo, cuidando que
las normas aplicadas por analogía no contraríe principios fundamentales establecidos en LOPT.
Publicado por ARTURO ESCOBAR en 10:37

TEMA III

LA JURISDICCIÓN LABORAL EN VENEZUELA

La Jurisdicción es definida como “el poder de administrar justicia o más concretamente


como el poder de declarar La jurisdicción (en latín: iuris dictio, ‘decir o declarar el derecho a su
propio gobierno’) es la potestad, derivada de la soberanía del Estado, de aplicar el Derecho en el
caso concreto, resolviendo de modo definitivo e irrevocable una controversia, que es ejercida en
forma exclusiva por los tribunales de justicia integrados por jueces autónomos e independientes. 

En sentido coloquial, la palabra "jurisdicción" es utilizada para designar el territorio


(estado, provincia, municipio, región, país, etc.) sobre el cual esta potestad es ejercida. Del
mismo modo, por extensión, es utilizada para designar el área geográfica de ejercicio de las
atribuciones y facultades de una autoridad o las materias que se encuentran dentro de su
competencia; y, en general, para designar el territorio sobre el cual un Estado ejerce su soberanía.
La competencia debe ser considerada como “el poder de administrar Justicia, en cada
caso, conforme a la naturaleza, calidad y cuantía de la acción, de acuerdo con los límites
territoriales dentro de los cuales se mueven las partes o conforme al lugar donde se encuentran las
cosas en litigio”. Lo anterior implica que todo juez tiene jurisdicción pero que no todos tienen
competencia, de esta forma, la competencia puede observarse como la medida de la jurisdicción
que tiene cada juez.
La jurisdicción en materia laboral procesal debe ser autónoma, independiente de los otros
órganos del poder judicial, imparcial y especializado. Al ser una jurisdicción especial se
encuentra organizada por los siguientes tribunales: Aquellos Tribunales del Trabajo que conoce,
en primera instancia (integrada por los Tribunales de Sustanciación, Mediación y Ejecución del
Trabajo, y los Tribunales de Juicio del Trabajo) que serán unipersonales, Los Tribunales
Superiores del Trabajo que conocen en segunda instancia; que pueden ser colegiados o
unipersonales y La Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia.
Ahora bien, podemos notar la primera diferencia que existe entre la jurisdicción civil y la
laboral, es que en Primera Instancia en la Jurisdicción laboral está integrado por los Tribunales de
Sustanciación, Mediación y Ejecución del trabajo y por los Tribunales de Juicio del Trabajo,
todos ellos integrados por un Juez Unipersonal y un Secretario, es decir, que en primera instancia
conocen dos tribunales, a diferencia de los civiles que solo conocen los Juzgados de Municipio o
los de Primera Instancia dependiendo de la cuantía en el libelo de la demanda. Por otro lado, los
funcionarios adscritos a los Tribunales de trabajo son: Los primeros estarán constituidos por tres
jueces y un secretario; y los segundos, por un juez y un secretario, todos profesionales del
derecho.
Ahora bien, la jurisdicción es la función de administrar justicia, en tanto, la competencia, es la
medida o grado de la jurisdicción que tiene un juez de un asunto de conformidad con la ley,
impone limitaciones al poder de juzgar de que están investidos los jueces, en razón de la materia,
del territorio y de la cuantía. Los Tribunales que conforman la jurisdicción especial del trabajo
tienen competencia para conocer, sustanciar y decidir las siguientes materias: Asuntos
contenciosos del trabajo que no correspondan a la conciliación y al arbitraje; Las solicitudes de
calificación de despido o reenganche, formuladas con base en la estabilidad consagrada en la
Constitución y en la legislación laboral; Los amparo por violación o amenaza de violación de
normas constitucionales, Los asuntos que se susciten con ocasión de las relaciones laborales
como hecho social, de las estipulaciones del contrato de trabajo y de la seguridad social; Los
asuntos relacionados con los intereses colectivos o difusos. Por otro lado, la competencia objetiva
es la que se encuentra determinada por la materia o el asunto, como la cuantía, elementos
determinantes. El momento determinante de la competencia (perpetuatio Iurisdictionis); es una
garantía de inmodificabilidad de la competencia judicial que obliga a las autoridades judiciales a
continuar con el trámite de los expedientes, desde la admisión de la demanda y hasta la
culminación del proceso.
Por otro lado, la Competencia subjetiva, consiste en que el titular del Tribunal facultado para
el conocimiento de determinado litigio, ha de encontrarse en una situación propia de juicio, que
permita proceder y juzgar con serenidad, imparcialidad y completo desinterés, cumpliendo así su
delicada función de impartir justicia. Deben existir fundadas razones calificadas por la ley, de
manera taxativa, para que proceda la inhibición o la recusación. Las Causales de Inhibición y
Recusación se encuentran establecidas en el Artículo 30 de la LOPTRA, y en los siguientes
artículos se establecen sus efectos y que será inamisible la recusación cuando la recusación que se
intente sin estar fundada en un motivo legal; la que se intente fuera del término legal y la que se
intente contra el mismo juez en la misma causa, o la que se introduzca sin haber pagado la multa
o cumplido el arresto que le hubiere sido impuesto en la Jefatura Civil de la localidad.
Por último, una diferencia entre el proceso laboral y el proceso civil en cuanto a la jurisdicción
y la competencia en materia laboral, es que las demandas serán propuestas ante el juez de
Sustanciación, Mediación y Ejecución del Trabajo competente por el territorio que corresponda,
se considera competentes, los tribunales del lugar donde se prestó el servicio, donde culminó la
relación laboral, el lugar de celebración del contrato de trabajo o el domicilio del demandado, en
cambio, en materia civil pudieren conocer los Juzgados de Municipios y los de Primera Instancia
de acuerdo a la competencia por la cuantía y por el territorio que corresponda.
CONCLUSIONES

La mediación considerada como una institución se debe configurar como un instrumento más
al que las partes, sujetos de un conflicto laboral y auténticos protagonistas del proceso negocial
pueden acudir cuando en la negociación directa, sin intervención de un tercero, se encuentra
dificultades que les implican alcanzar el acuerdo.
En este sentido, que el acuerdo final dependa de la voluntad de las partes, no significa con esto
que la mediación siempre sea voluntaria. Son muchas las legislaciones que establecen una
mediación obligatoria como fase previa para la adopción de otras medidas, entonces, la existencia
de esta obligación no afecta en absoluto a la autonomía para negociar de las partes, ni modifica su
respectiva posición frente al proceso de mediación.
Debe ponerse de manifiesto que la mediación no debe suplir la autocomposición de los
conflictos laborales por los propios sujetos protagonistas de los mismos. En este sentido, no debe
considerarse nunca como un fin en sí misma, sino como un instrumento de ayuda a las partes, y
como tal debe ser percibido por éstas.
Para que la mediación en sede judicial tenga ese carácter se precisa que las instituciones que la
alberguen cuenten con jueces mediadores debidamente capacitados para la función de mediar,
con imparcialidad y neutralidad necesaria para su desempeño. Esas características deben
transmitirse a las partes en conflicto para que puedan depositar su confianza en este mecanismo
de solución de conflictos, cuya eficacia se fundamenta, precisamente en esa condición.
La mediación constituye una excelente herramienta que permite resolver el conflicto suscitado
entre las partes, logrando ponerle fin al litigio. Más allá de esto, en la función mediadora del juez,
a su vez está presente una función indispensable para garantizar el objetivo final de realizar
justicia; se trata de garantizar el derecho a la defensa y mantener a las partes en los derechos y
facultades comunes a ella, sin preferencia ni desigualdades.
El logro del acuerdo conciliatorio dependerá del grado de la controversia que permita a las
partes mayores o menores flexibilidades, así como la habilidad negociadora del juez para explotar
esas flexibilidades, sin olvidar que el acuerdo debe satisfacer las exigencias de justicia sin olvidar
la irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores.
El juez mediador debe interpretar la realidad sobre la que se plantea el conflicto laboral para
aplicar la técnica más adecuada facilitando el proceso de mediación. Las soluciones adoptadas en
conflictos similares aportan al mediador un bagaje importante en el desempeño de la función
mediadora. Cabe destacar, que el éxito de la mediación en sede judicial no sólo dependerá del
papel activo que desempeñe el juez mediador sino determinante el protagonismo de las partes
quienes se abran al diálogo y el entendimiento como necesario para llegar a acuerdos que
satisfagan las pretensiones de cada una, pero más allá de esto la importancia de descubrir cuál es
el verdadero conflicto porque del estudio de esta investigación se determina que casi siempre
frente a ese conflicto visible se encuentra otros subyacente que es también importante reconocer.
REFENCIAS BIBLIOGRAFICAS

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