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carrera
DENGUE - RESUMEN
84 pag.
1.1 Descripción
Las actividades -las decisiones de gestión, triaje y tratamiento- en los primeros y segun-
dos niveles de atención, donde los pacientes son vistos y evaluados inicialmente, son 15
fundamentales para determinar el resultado clínico del Dengue. Una buena atención pri-
maria no sólo reduce el número de hospitalizaciones innecesarias, sino que también sal-
va la vida de los pacientes con Dengue. La notificación temprana de los casos de Dengue
atendidos en el Primer y Segundo Nivel, es crucial para la identificación de los brotes y el
inicio de la respuesta oportuna. Debe considerarse el diagnóstico diferencial (anexo B).
Fuente: Adaptado de WCL Yip, 1980 por Hung NT, Lum LCS, Tan LH
Generalmente, los pacientes desarrollan fiebre alta y repentina que puede ser bifásica.
Usualmente la fase febril aguda dura de 2 a 7 días y suele acompañarse de enrojeci-
miento facial, erupción eritematosa, dolor corporal generalizado, mialgias, artralgias,
1
cefalea y dolor retro-ocular. Algunos pacientes pueden presentar odinofagia e hipe-
remia en faringe y conjuntivas. Los trastornos gastrointestinales (anorexia, náuseas,
vómito y las evacuaciones líquidas) son comunes. En la fase febril temprana, puede ser
2
difícil distinguir clínicamente el Dengue de otras enfermedades febriles agudas. Una
3,4
prueba de torniquete positiva en esta fase aumenta la probabilidad de Dengue. Al
comienzo de la etapa febril, es difícil establecer la evolución y el pronóstico de la enfer-
medad. La vigilancia de los signos de alarma y de otros parámetros clínicos (anexo C)
es crucial para el reconocimiento de la progresión a la fase crítica.
En la fase crítica pueden producirse hemorragias de mucosas, por ejemplo: nasal (epis-
taxis) y de las encías (gingivorragia), así como sangrado vaginal en mujeres en edad
fértil este sangrado puede presentarse en el periodo premenstrual, durante la mens-
7
truación o en el período posmenstrual (metrorragia o hipermenorrea).
Los pacientes con epistaxis o gingivorragia suelen deglutir la sangre produciendo vó-
mitos con estrías de sangre y heces de color oscuro que no se debe interpretar como
hemorragias gastrointestinales (melena, hematemesis).
La leucopenia con neutropenia y linfocitosis con 15% a 20% de formas atípicas, segui-
da de una rápida disminución del recuento de plaquetas, suele preceder a la extrava-
3
sación de plasma. En este punto, los pacientes sin un gran aumento de la permeabili-
dad capilar mejoran, mientras que aquellos con mayor permeabilidad capilar pueden
Entre las niñas y niños es más importante determinar alteraciones del estado mental
(irritabilidad o letargo) taquipnea y taquicardia.
Algunos pacientes pueden tener varios órganos afectados desde las fases tempranas
de la infección por acción directa del virus, por apoptosis y por otros mecanismos de
respuesta inmunológica, pudiendo causar hepatitis, encefalitis, miocarditis y nefritis.
9
Estos casos pueden presentar daño grave de órganos. Los pulmones y los intestinos
también podrían sufrir daños por la misma causa, así como el páncreas, aunque aún se
10, 11
dispone de poca información sobre la repercusión en este último órgano.
Los pacientes que mejoran después de la caída de la fiebre se consideran casos de Den-
gue sin signos de alarma. Los que empeoran con la caída de la fiebre y presentan signos
de alarma, son casos de Dengue con signos de alarma. Estos pacientes casi siempre se
recuperan con la rehidratación intravenosa temprana. No obstante, a pesar del manejo
adecuado; algunos pacientes pueden deteriorarse progresivamente y se consideran
como casos de Dengue grave (numeral 2.3).
Cuando el paciente sobrevive a la fase crítica (la cual no excede las 48 a 72 horas), pasa a
la fase de recuperación, que es cuando tiene lugar una reabsorción gradual del líquido
extravasado, el cual regresa del compartimiento extravascular al intravascular.
Hay una mejoría del estado general, se recupera el apetito, mejoran los síntomas gas-
trointestinales, se estabiliza el estado hemodinámico y se incrementa la diuresis. Al-
gunas veces puede presentarse una erupción purpúrica confluente. Asimismo, puede
producirse prurito generalizado. Durante esta etapa pueden ocurrir bradicardia sinusal
6
y alteraciones electrocardiográficas.
El hematocrito se estabiliza o puede ser menor debido al efecto de dilución del líquido
reabsorbido. Por lo general, el número de glóbulos blancos comienza a subir poco des-
pués de la desaparición de la fiebre. La recuperación en el número de plaquetas suele
ser posterior a la de los glóbulos blancos.
La clasificación según la gravedad del Dengue tiene un gran potencial práctico para el
médico tratante, para decidir dónde y con qué intensidad se debe observar y tratar al
paciente, útil especialmente en los brotes.
La descripción clínica del Dengue sin signos de alarma coincide con lo señalado para
la fase febril del Dengue. Este cuadro clínico suele ser muy florido y típico en los adul-
tos, quienes pueden presentar muchos o todos los síntomas durante varios días (por
Las formas graves de Dengue se definen por uno o más de los siguientes criterios:
Se considera que un paciente está en choque si la presión diferencial (es decir, la dife-
rencia entre las presiones sistólica y diastólica) es ≤20 mm Hg, o si hay signos de mala
perfusión capilar (extremidades frías y llenado capilar lento y pulso rápido o débil) en
niños y en adultos. Debemos tener en cuenta que en los adultos la presión diferencial
El choque es la forma más frecuente de Dengue grave; produce una extravasación súbi-
ta y descontrolada de líquidos de la microvasculatura al afectar el endotelio, entre otras
21, 22
causas, por acción de citoquinas que inducen apoptosis. Esta es la característica
fisiopatológica más relevante del Dengue, que lo distingue de las demás infecciones
virales y coincide con el descenso progresivo del recuento plaquetario. La tromboci-
topenia en esta arbovirosis resulta de un proceso que comienza por la adhesión del
virus a las plaquetas y otras células de la estirpe y culmina con su lisis, evento de causa
inmunológica, debido a la acción de anticuerpos que fueron inicialmente elaborados
contra las proteínas de la pared del virus y que se convierten luego en autoanticuerpos
con acción cruzada contra algunas proteínas de las plaquetas, contra el fibrinógeno y
22 también contra algunas proteínas del endotelio vascular por un fenómeno de mime-
23, 24
tismo molecular.
Todas estas alteraciones graves de los órganos pueden ser de tal intensidad que pue-
den llevar al paciente a la muerte. Sin embargo, la mayoría de las muertes por Dengue
9
ocurren en pacientes con choque.
3.1 Generalidades
El personal de salud del Primer Nivel de Atención debe realizar el abordaje del paciente
para su tratamiento siguiendo los pasos de la tabla 1.
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
Paso 3. Tratamiento
I. Decisión del tratamiento. Según las manifestaciones y otras circunstancias, los
pacientes pueden: 27
• Recibir tratamiento ambulatorio (grupo A)
• Ser internados para observación y tratamiento oral o intravenoso en los
establecimientos de Primer Nivel con capacidad para este procedimiento
(grupo B1).
• Ser referidos para tratamiento intravenoso a establecimientos de Segundo
Nivel (grupo B2), o
Los Centros de Referencia que reciben pacientes con Dengue grave, deben ser capaces
de proporcionar una atención rápida a los casos que le son referidos. Deben garanti-
zar que existan camas disponibles para los que reúnan los criterios de hospitalización,
aun cuando algunos casos seleccionados tengan que ser referidos a otros centros de
atención, según la organización de los servicios de salud. Ante una contingencia, todos
los hospitales deben tener un área o unidad asignada para el tratamiento de pacientes
con Dengue. Estas unidades deben contar con personal médico y de enfermería entre-
nados para reconocer pacientes de alto riesgo y para implementar el acompañamiento
Descargado por Valeria Valdez (valevaldez1997@gmail.com)
Durante las epidemias de Dengue, los estudiantes de enfermería y medicina, junto con
los líderes de la comunidad, pueden visitar las casas con la finalidad de realizar educa-
ción sanitaria, detección y seguimiento de casos de Dengue. Esto ha demostrado ser
33
factible, económico y efectivo , y debe coordinarse con la Red de Salud. Es convenien-
te disponer de información impresa sobre la enfermedad del Dengue y los signos de
alarma, para distribuirlos a los miembros de la comunidad. Los prestadores de atención
médica (públicos, privados, ONG y otros) deben incluir en su trabajo diario actividades
33
de educación sanitaria dirigidas a la prevención de la enfermedad.
En las mujeres embarazadas que presentan Dengue, es necesario tener en cuenta las
siguientes consideraciones:
· Las embarazadas con Dengue sin signos de alarma por lo general tienen un
parto y puerperio normales, de lo que se infiere que la enfermedad no pare-
ce afectar la evolución satisfactoria del binomio madre-hijo durante la gravi-
dez. El Dengue con signos de alarma y el Dengue grave son las presentacio-
nes con mayor asociación a crecimiento fetal retardado y a muerte materna,
aunque la última es infrecuente cuando la paciente se trata adecuadamente.
37
recomienda la anestesia raquídea o epidural, porque requiere punción.
· Reportar a Pediatría todo recién nacido de madre que cursó con Dengue al
momento del parto, ya que el recién nacido puede expresar la enfermedad
hasta 12 días después de su nacimiento.
· Las y los recién nacidos de madres con Dengue (o de una madre que tuvo
la infección hasta una semana antes del parto) que presentan trombocito-
penia, fiebre, hepatomegalia y grados variables de insuficiencia circulatoria
· Las y los recién nacidos de madres que tuvieron la infección por Dengue an-
tes o durante el embarazo han recibido anticuerpos maternos (IgG) contra el
Dengue a través de la placenta y tienen riesgo de contraer Dengue grave al
39, 40
ser infectados por un serotipo diferente del virus. Asimismo, los recién na-
cidos de madres que contrajeron la enfermedad alrededor del parto pueden
llegar a presentar Dengue y Dengue grave si son infectados por un serotipo
diferente del virus, aún meses más tarde.
Pacientes menores de 1 año de edad infectados por el virus del Dengue pueden pre-
sentar manifestaciones clínicas que conforman cuadros de intensidad leve o moderada
38, 39, 41
e, incluso, enfermedad grave. En este grupo de edad, la mortalidad es más ele-
vada y algunos síntomas pueden considerarse infrecuentes en el Dengue tales como
42
las manifestaciones relativas al tracto respiratorio superior, diarrea o convulsiones; las 33
últimas casi siempre se diagnostican inicialmente como convulsiones febriles, aunque
43, 44, 45
pueden deberse a encefalopatía aguda por Dengue.
Cuando se produce transmisión vertical de la infección por Dengue; las y los recién
47
nacidos pueden permanecer asintomáticos o pueden desarrollar fiebre, exantema,
43, 48, 49
petequias, trombocitopenia, hepatomegalia y evolucionar sin complicaciones.
Sin embargo, existe un grupo que llega a desarrollar síntomas graves y presentar un
cuadro clínico semejante al de sepsis -que obligatoriamente debe tener un diagnósti-
co diferencial- con hipotermia en lugar de fiebre, derrame pleural sangrado digestivo,
40, 43, 50
insuficiencia circulatoria, hemorragia intracraneal y muerte. El tratamiento de es-
tos últimos casos consiste en la administración de soluciones polielectroliticas balan-
ceadas (acetato de Ringer y similares) con el fin de mantener la presión arterial media
51
dentro de los límites normales para la edad y sexo.
Aunque la edad no impone un mayor riesgo de contraer Dengue, la infección por Den-
gue en personas mayores de 60 años se asocia a un elevado riesgo de complicaciones
en relación a otros grupos de edad. Esta característica se debe principalmente a la ma-
yor incidencia de comorbilidades, presentaciones atípicas, complicaciones asociadas a
52
la enfermedad y a las particularidades fisiológicas e inmunológicas de esta población.
Los cambios en la respuesta inmune adaptativa relacionados con la edad, colocan a los
pacientes adultos mayores en mayor riesgo de infección, ya que los defectos tanto en
la inmunidad celular y humoral aumentan progresivamente con la edad, por lo que la
capacidad de respuesta en defensa específica y eficaz del huésped contra nuevos pató-
53
genos se encuentra disminuida en las personas de edad avanzada.
En los casos de Dengue grave y mortal, se ha identificado a la diabetes como una de los
La Hipoglucemia puede ocurrir en aquellas personas que debido al Dengue tienen po-
bre ingesta oral y continúan con sus antidiabéticos. El resultado es peor cuando se aso-
cia a afectación de hígado y/o páncreas. La absorción gastrointestinal de los hipogluce-
miantes orales es errática debido al vómito y diarrea durante el Dengue. La metformina
55 56
causa acidosis láctica y produce hepatotoxicidad. Por lo cual se recomienda realizar
controles glucémicos periódicos y de acuerdo a los resultados valorar la conducta a
seguir.
En caso de falla o injuria renal se debe tomar en cuenta antes del uso de volúmenes de
líquido, que estos pacientes pueden tener sobrecarga de líquidos lo que puede llevar
a edema agudo de pulmón e Insuficiencia Cardiaca Congestiva (ICC). Los diuréticos
tienen un efecto limitado en la enfermedad renal crónica. 35
Los pacientes que toman anticoagulantes orales, generalmente tienen o han tenido
un evento trombótico grave. Si este suceso trombótico ha ocurrido en los últimos 6
meses, puede valorarse la supresión de la anticoagulación o, si el riesgo es muy alto,
sustituir por heparinas de bajo peso molecular.
Anamnesis
• Motivo de consulta
• Fecha de inicio de los signos y síntomas
• Indagar la procedencia y residencia del paciente
• Indagar donde estuvo en las últimas dos semanas
• Indagar si estuvo en contacto con personas con síntomas similares (familia-
res, vecinos, etc.)
• Indagar sobre determinantes sociales (edad, vivienda, etc).
• Indagar sobre antecedentes patológicos (comorbilidad)
• Indagar sobre la tolerancia y cantidad de ingesta de líquidos 37
• Indagar sobre signos de alarma (dolor abdominal, vómitos frecuentes, irrita-
bilidad (Figura 2 y anexo C)
• Indagar sobre la diuresis (frecuencia en las últimas 24 horas, volumen y hora
de la última micción)
Los pacientes con fiebre en los que se considere la posibilidad de Dengue como diag-
nóstico, los estudios de laboratorio de acuerdo al nivel de atención deben incluir:
• Hemograma completo
• Recuento manual de plaquetas en cámara de Neubauer
• Tiempo de coagulación, tiempo de protrombina, tiempo de tromboplastina
parcial activado (TTPA INR), fibrinógeno
• Grupo sanguíneo y factor Rh
• Pruebas de función hepática: bilirrubinas, AST, ALT
• Examen de orina
• Glicemia
• Albúmina
• Ionograma sérico
• Urea y creatinina séricas
• Gases arteriales
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
• Enzimas cardiacas
• PCR
• VSG
Determinar la presencia del virus Dengue o sus antígenos en sangre en los primeros 5
días posteriores al inicio de la fiebre con las pruebas de ELISA NS1 y/o RTP-CR en Tiem-
po Real las cuales están disponibles en el laboratorio Municipal/Departamental y en
CENETROP respectivamente. Las pruebas serológicas IgM se realizan a partir del 6º día
de iniciados los síntomas en los laboratorios municipales y/o departamentales (Anexo
R: Algoritmo de diagnóstico de laboratorio municipal/departamental y nacional).
• ¿Es Dengue?
• ¿Qué fase del Dengue? (febril/crítica/recuperación)
• ¿Hay signos de alarma?
• ¿Tiene condiciones coexistentes?
• ¿Cuál es el estado hemodinámico y de hidratación? ¿Está en choque?
• ¿El paciente requiere hospitalización?
Plan de acción: suministrar una tarjeta en la que se detallen los cuidados en el hogar y
los hallazgos en los controles (Anexo I)
5.2.2 Grupo B1. Dengue sin signos de alarma más condición asociada
o riesgo social (anexo J)
Criterios de grupo
Evaluar lo siguiente:
42 Plan de acción:
Los pacientes con signos de alarma deben ser controlados hasta que el riesgo pase
(hasta 48 horas después de que la fiebre desaparezca). Debe mantenerse un equilibrio
adecuado de líquidos y electrólitos.
En todos los países donde hay Dengue, la práctica médica, así como la bibliografía mé-
dica más reciente reconocen que la rehidratación por vía intravenosa es el tratamiento
más eficaz para evitar las muertes debidas a extravasación de plasma durante el Den-
59
gue grave . También hay consenso en cuanto a iniciar, en esos casos, el tratamiento de
60, 61
reposición de líquidos lo antes posible.
• Si, por el contrario, después del primer bolo de hidratación, el paciente con-
tinúa con signos de choque, repita la dosis de volumen de cristaloides a ra-
zón de 20 ml/kg a infundir en 15-30 minutos. Se debe reevaluar la condición
hemodinámica del paciente y tomar una nueva muestra para hematocrito.
Si con ese volumen de líquidos el paciente mejora, desaparece el choque y
disminuye el hematocrito, continuar con el aporte de líquidos tal como se
refirió anteriormente para el paciente con evolución favorable.
El cálculo de los líquidos para mantenimiento en pacientes con peso normal se descri-
be en el Anexo N.
En los casos de trombocitopenia severa, cuyo recuento plaquetario puede llegar a ma-
nos de 10.000 mm3, el paciente debe permanecer en reposo estricto en cama y tomar
medidas de protección contra traumatismos, para reducir el riesgo de sangrado. No se
deben aplicar inyecciones intramusculares, para evitar hematomas. Debe tenerse pre-
sente que la trombocitopenia en el Dengue es transitoria y autolimitada y no requiere
58
la administración de corticoides ni otra medicación. No se ha encontrado diferencia
en los recuentos plaquetarios posteriores al tratamiento con altas dosis de inmuno-
globulina intravenosa, tampoco en la duración de la trombocitopenia ni en los niveles
69
de anticuerpos antiplaquetarios. Con plasma fresco congelado se obtuvo un recuento
antiplaquetario mayor que con solución salina normal a las 12 horas después del trata-
70
miento, pero ese efecto no se mantuvo a las 24 y 48 horas.
La transfusión de sangre salva vidas y debe indicarse tan pronto como se sospeche o se
71, 72
compruebe una hemorragia grave. Sin embargo, la transfusión de sangre debe hacer-
se con cuidado porque existe el riesgo de sobrecargar de líquidos al paciente. Las reco-
mendaciones actuales son de usar glóbulos rojos empacados, salvo situaciones de emer-
gencia en las que no se disponga hemoderivados recomendados. No debe esperarse a
que el hematocrito caiga a niveles peligrosos antes de decidir sobre las transfusiones de
sangre. Tener en cuenta que la recomendación de las normas internacionales de manejo
de la sepsis grave y el choque séptico, de considerar un hematocrito menor de 30% como
indicación inmediata de transfusión sanguínea, no es aplicable en los casos graves de
Debe tenerse mucho cuidado al introducir una sonda nasogástrica, pues puede causar
hemorragias graves y bloquear las vías respiratorias. Una sonda orogástrica es preferida
y si va a cateterizar la vejiga una sonda bien lubricada minimiza el trauma durante su
introducción. Cuando sea indispensable la medición de la presión venosa central se
sugiere la colocación de un catéter periférico o central guiada preferentemente por
ecografía. Deberá evitarse al máximo la inserción de catéteres subclavios o yugulares y
procedimientos invasivos para el drenaje de volúmenes de plasma extravasados.
Estudios adicionales:
• Radiografía de tórax
• Electrocardiograma
• Gases arteriales
• Ecocardiograma
• Enzimas cardiacas
49
Plan de acción para el tratamiento de la sobrecarga de volumen:
• Hiperglucemia
• Hipoglucemia
• Desequilibrio Hidroelectrolítico y acido-base
• Infecciones concomitantes o infecciones asociadas a la atención en salud
(IAAS)
50
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
Antecedentes
La atención a pacientes que sufren de Dengue, en la mayoría de los casos, tiene como
característica que no requieren tecnología e instalaciones de mayor complejidad y cos-
to. Sin embargo, el abordaje oportuno del paciente, la correcta clasificación del caso y
su manejo son factores críticos para evitar la muerte de los casos graves.
Para ello, el equipo de atención médica debe estar sensibilizado y capacitado, para rea-
lizar acciones de vigilancia de pacientes en el hogar, la detección de casos mediante
visitas a domicilio y en establecimientos de salud, desde la atención primaria, pasando
por los servicios de emergencias, unidades de Dengue (en caso que se hayan habilita-
do) y unidades de cuidados intensivos (UCI). Por lo tanto, la recepción, la clasificación
de riesgos, debe ser hecha en todos los sitios de recepción y triaje, lo que reduce los
El acceso a los flujogramas, que son ampliamente distribuidos por el Programa Nacio-
nal de Prevención y Control de Dengue, Chikungunya y Zika; el acceso a los insumos,
a las pruebas clínicas y de laboratorio, la hidratación temprana, el aseguramiento y el
acompañamiento del enfermo son esenciales para una exitosa atención de los casos.
Asimismo, garantizan una buena atención de los pacientes clasificados en los grupos
A (Dengue sin signos de alarma) y B2 (Dengue con signos de alarma). Para los casos
clasificados en el grupo C (Dengue grave), se requieren servicios de mayor complejidad
y costo. Hasta 90% de los casos pueden resolverse en los servicios de Primer Nivel de
Atención en coordinación con los otros niveles, incluidos los servicios privados. En este
sentido, la capacidad de gestión es esencial para que los servicios se articulen en una
sola Red, con acceso garantizado, seguimiento y calidad de la atención. El protocolo
contempla la competencia, la clasificación de riesgo de los casos, y asegura la referen-
cia oportuna del paciente (a las unidades de Dengue en los primeros niveles de aten-
52 ción, unidades de emergencia, sala de hospitalización o camas de UCI en los hospitales
de Segundo o Tercer Nivel de atención).
Para garantizar la atención oportuna, puede ser necesario suspender las actividades
Material:
• Sillas
• Asientos reclinables (si la unidad hace la hidratación para un período más
largo)
• Fuentes de agua potable bebible
• Disponibilidad de soluciones
• Camillas (sólo para pacientes en tránsito a la espera de traslado);
• Cilindros de oxigeno
• Glucómetro
• Teléfono/fax
• Balanza (adulto y pediátrica)
• Máscaras para el uso de O2
• Negatoscopio (si es posible)
• Termómetro (adulto y pediátrico)
Medicamentos:
a. Exámenes indispensables
d. Procesar las muestras y comunicar los resultados según los canales establecidos.
Organización de la atención
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La atención provista en estos servicios no debe ser un factor de riesgo para el paciente;
por el contrario, habrá de garantizar su observación, desde su primer contacto con el
servicio hasta su egreso, debido a la rápida evolución potencial a enfermedad grave y
las complicaciones del Dengue, particularmente, al final de la fase febril o al descenso
de la fiebre. En ese sentido, la recepción y abordaje del paciente en estas unidades
debe ser diferenciado y contar con mecanismos que garanticen tiempos mínimos de
espera, hidratación inmediata, y vigilancia constante antes y después de la atención
por la enfermera y o el médico.
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
El paciente debe contar, siempre que sea posible, con una profesional de enfermería y
profesionales médicos durante el turno de trabajo, que puedan evaluar su evolución.
La entrega de la guardia deberá ser hecha con una descripción lo más completa posible
del caso, de forma presencial entre los profesionales y descritos en la historia clínica.
6.3.1 Características:
Se trata de instalaciones provisionales que pueden ser creadas en cualquier área física
que tenga las condiciones adecuadas para el funcionamiento de la atención y condi-
ciones de seguridad para el paciente y el personal (unidad o servicio ya existente y reo-
rientado para este fin). Además, será la unidad de referencia destinada a la hidratación
de los pacientes, particularmente de aquellos que necesitan recibirla por vía intrave-
nosa (menos de 24 horas), tiempo necesario para la estabilización hemodinámica, o la
remisión a unidad de mayor resolución de complejidad. La decisión de esa referencia
no debe tomarse más que en el tiempo mínimo indispensable para reconocer que el
paciente necesita atención en unidades de atención de mayor complejidad.
Se recomienda que este servicio se implemente dentro, al lado o próximo a otra institu-
ción de salud que pueda proporcionar materiales y servicios de apoyo e interconsultas.
Deberá contar con personal las 24 horas del día o garantizar la referencia de pacientes
en caso de funcionamiento por 12 horas. Ya que los pacientes por su estado no pueden
retornar a su hogar.
De acuerdo a un estudio realizado en Brasil, los recursos necesarios en una ciudad o re-
gión, a partir de un número hipotético de casos clínicos de Dengue pueden calcularse
de la siguiente forma:
59
• Casos estimados de Dengue: 2% de la población de alto riesgo, 1% de pobla-
ción de mediano y bajo riesgo.
• Pacientes que serán atendidos en unidades de Dengue (atención primaria):
90% de los casos estimados de Dengue.
• Porcentaje de pacientes que requerirán intervenciones y cuidados médicos y
Debido a que el Dengue es una enfermedad aguda de evolución rápida y corta dura-
ción, el acceso a las camas pediátricas, de medicina interna y UCI debe ser garantizado
inmediatamente.
Los equipos de profesionales médicos de los hospitales también habrán de recibir ca-
pacitación en el manejo de pacientes enfermos de Dengue o con sospecha de la enfer-
medad, con hincapié en los signos de alarma, el paciente grave, el manejo del choque
hipovolémico -con las características propias del Dengue- y en los aspectos descritos
en los procesos asistenciales de los Servicios de emergencias y Unidades de Dengue
(salas de rehidratación).
Los hospitales que atienden enfermos con Dengue habrán de disponer de equipos, in-
sumos y materiales de laboratorio para realizar procedimientos especializados, según
la gravedad de los pacientes y sus complicaciones.
Exámenes específicos:
• Tomar las muestras de serología (IgM) a partir del sexto día de haberse inicia-
do la enfermedad, con base en la situación epidemiológica y según lo esta-
blecido por las autoridades sanitarias del lugar.
• Tomar las muestras para estudios virales a todos los pacientes graves: reali-
zar RT-PCR en Tiempo Real en los primeros 5 días de iniciada la enfermedad
o determinar el antígeno viral (proteína NS1) durante el mismo período. Se
necesita un número previamente determinado de muestras de casos sospe-
chosos de los lugares con situación de brote para documentar el serotipo
circulante y alertar sobre el ingreso de un nuevo serotipo (Este número de
muestras o porcentaje del total de casos se ajustará de acuerdo con el análi-
sis epidemiológico y la disponibilidad de recursos). 61
• Procesar las muestras y comunicar inmediatamente los resultados por los ca-
nales establecidos.
La persona a cargo de notificar cada caso es miembro del personal médico o de enfer-
mería que atiende el caso al momento del diagnóstico clínico. Esa responsabilidad
se enmarca en esta norma nacional y en el Reglamento Sanitario Internacional. Con
la notificación se inicia el proceso de vigilancia epidemiológica y se desencadenan las
medidas de prevención y control. La detección oportuna y su informe son indispen-
sables para mejorar la eficacia del sistema de alerta y respuesta.
Persona que vive o haya viajado los últimos 14 días a zonas con transmisión de Dengue
• Nauseas / vómitos
• Cefalea / dolor retroorbitario
• Mialgias / altralgias
• Exantema
• Petequias o Prueba del Torniquete positiva
• Leucopenia
Es todo caso de dengue que presenta cerca de, o a la caída de la fiebre o en las horas
siguientes uno o más de los siguientes signos:
Es todo caso de Dengue que tiene una o más de las siguientes manifestaciones:
64 Es todo caso sospechoso de Dengue confirmado por laboratorio (ELISA NS1, técnicas
moleculares como RT-PCR en Tiempo Real y aislamiento viral, seroconversión de IgM o
IgG en muestras pareadas o aumento de 4 veces el valor de la IgG).
Es todo caso sospechoso de Dengue que resida en un perímetro de 200 metros de otro
caso confirmado por laboratorio en los 21 días anteriores o posteriores al diagnóstico
por laboratorio.
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
Todo paciente que cumpla con la definición de caso sospechoso o confirmado que
fallece como consecuencia del Dengue.
Se recomienda que a todo caso de muerte por Dengue se le realicen pruebas de labo-
ratorio específicas para la infección. De igual forma, todas las defunciones por Dengue
deben ser analizados por un Comité Técnico – Científico.
8.1 El agente
Los cuatro serotipos del virus del Dengue (DENV-1, DENV-2, DENV-3 y DENV-4), como
los demás flavivirus, son virus esféricos y envueltos que contienen una simple cadena
de polaridad positiva de ARN como genoma, la cual codifica tres proteínas estructu-
rales (cápside C, membrana M y envoltura E) y siete proteínas no estructurales (NS1,
NS2a, NS2b, NS3, NS4a, NS4b y NS5). La proteína E tiene una función importante en el
desarrollo de los anticuerpos y la respuesta inmune protectora, así como en el fenó-
meno de la inmunoamplificación viral. La proteína NS1 se presenta asociada a la célula
infectada en su superficie y en forma extracelular y puede detectarse en los primeros
momentos de la infección y marcar la réplica del virus.77
Dado que las infecciones por un serotipo de DENV confieren inmunidad prolongada
solo contra ese serotipo, un individuo puede contraer hasta cuatro infecciones por vi-
rus del Dengue a lo largo de su vida.78
La infección primaria por Dengue afecta al individuo sin exposición previa a ningún
flavivirus. La infección secundaria se da principalmente en aquellos individuos previa-
mente infectados por alguno de los restantes serotipos, pero también en individuos
inmunes a otro flavivirus.79
El aislamiento viral, la detección del genoma viral (mediante RT - PCR en Tiempo Real) y
de alguno de los antígenos del Dengue, así como el estudio de la respuesta serológica
permiten realizar el diagnóstico de la infección por Dengue.85
Muestras clínicas:
Aislamiento viral:
Diagnóstico molecular:
Detección de antígeno:
68 Los métodos que permiten realizar el diagnóstico temprano con sensibilidad y especi-
ficidad altas son un apoyo al manejo clínico del paciente. Además, el diagnóstico tem-
prano sirve para tomar rápidamente medidas de control del vector para disminuir la
transmisión. Aprovechando que la proteína NS1 es un marcador de la replicación viral
que se detecta en suero y plasma en la etapa aguda de la enfermedad, recientemente
se han producido varios estuches comerciales en formato de ELISA y tiras inmunocro-
matográficas.
Sin embargo, debe aclararse que los resultados negativos no excluyen la infección por
Dengue y para ello se requieren las pruebas serológicas. En esas muestras puede in-
tentarse detectar anticuerpos IgM (se ha informado que en los primeros cuatro días
de la fiebre la determinación de ambos parámetros, NS1 y anticuerpos IgM, permite el
diagnóstico del caso en más de 80% de las muestras).
De obtenerse resultados negativos, deberá estudiarse por serología una nueva mues-
tra con más días de evolución antes de descartar la infección por Dengue.
Sin embargo, la presencia de altos títulos de anticuerpos IgG en una muestra de suero
o la seroconversión o incremento de cuatro o más veces del título de anticuerpos en un
suero pareado obtenido de un caso clínicamente sospechoso de Dengue indica infec-
ción reciente o infección confirmada, respectivamente. Ese criterio podría ser de suma
utilidad en los casos de infecciones secundarias que no muestran niveles detectables
de anticuerpos IgM.87
Los anticuerpos detectados mediante ELISA muestran reactividad cruzada entre varios
flavivirus, aspecto que debe considerarse tanto en el diagnóstico del paciente como en
la vigilancia de laboratorio.
Descargado por Valeria Valdez (valevaldez1997@gmail.com)
TIPO DE
MÉTODO OBSERVACIONES
DIAGNÓSTICO
Detección del virus, de alguno de sus componentes o producto de la replicación viral
Cultivo de células Para la identi昀椀cación viral, pueden utilizarse la técnica
de mosquitos de inmuno昀氀uorescencia indirecta con anticuerpos
Aislamiento viral
Aedes albopictus, monoclonales especí昀椀cos para cada serotipo viral y la
C6/36 prueba RT - PCR. en Tiempo Real
RT – PCR y RT – Existen diferentes protocolos que muestran una
Diagnóstico
PCR en Tiempo sensibilidad entre 80% y 90% y una especi昀椀cidad
molecular
Real cercana al 100%.
La proteína NS1 es un marcador de replicación viral
70 ELISA y pruebas
presente en el suero del paciente y en la super昀椀cie de
Diagnóstico rápidas para
la célula infectada.
antigénico detección de la
Existen diferentes estuches comerciales que requieren
proteína NS1
de una mayor evaluación.
Diagnóstico serológico
ELISA de captura Es el marcador de infección reciente utilizado con
Detección de de IgM mayor frecuencia. Utiliza una sola muestra de suero.
anticuerpos IgM (MAC ELISA) y Varios estuches comerciales en formato ELISA han
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
El total de muestras que habrá que procesar como parte de la vigilancia de laboratorio
dependerá de su capacidad y situación epidemiológica. Así en situación de brote y
epidemia, se procesará el 10% de las muestras.
Serología x x x
– ELISA x x x
Fuente: Programa Nacional de Prevención y Control de Dengue, Chikungunya y Zika, 2017
Como parte de la vigilancia, todos los casos sospechosos, incluso los que no sean ana-
lizados en laboratorio, deben ser notificados al Sistema de Información en Salud de
forma oportuna.
De las muestras obtenidas en los primeros cinco días de iniciados los síntomas, podrá in-
tentarse el aislamiento viral, la RT - PCR en Tiempo Real y la detección de la proteína NS1.
No es necesario realizar los dos exámenes con todas las muestras ni realizarlos simultá-
neamente. A partir del sexto día de iniciados los síntomas se realizará la serología IgM.
Cada muestra será procesada inicialmente para Dengue en los laboratorios municipa-
les y departamentales. En caso de resultado negativo o positivo, si las muestras co-
rresponden a población priorizada son enviadas al Laboratorio de Referencia Nacional 73
(CENETROP) para diagnóstico diferencial de Zika y posteriormente de Chikungunya
(Figuras 3 y 4).
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82
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
85
Acortamiento de la
Presión diferencial <10 mmHg
Presión arterial Presión diferencial presión diferencial
Presión arterial inmedible
media (adultos) normal para la edad (≤20 mmHg),
Disminuida
hipotensión postural
Frecuencia Disnea, polipnea o respiración
Normal para la edad Taquipnea
Respiratoria de Kussmaul
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
Definición de hipotensión:
Presión arterial sistólica < 90 mmHg o presión arterial media < 65 mmHg en adultos o
una disminución de la presión arterial sistólica > 40 mmHg o menor de 2 desviaciones
estándar por debajo del intervalo normal para la edad. Presión diferencial ≤20 mmHg.
En los casos de adultos, es muy significativa la disminución de la presión arterial media
asociada a taquicardia.
En niños hasta los 10 años de edad, el quinto percentil para la presión arterial sistólica
se puede determinar mediante la fórmula: 70 + (edad x 2) mmHg
Presión arterial media en Mujeres y Varones con Edades entre 1 Semana y 18 Años
Mujeres Varones
Presión arterial Sistólica/Diastólica Presión arterial media Presión arterial Sistólica/Diastólica Presión arterial media
Edad
Míni-
Mínima Media Máxima Media Máxima Mínima Media Máxima Mínima Media Máxima
ma
≤ 7días 62.5/42.1 71.8/50.5 81.1/58.9 48.9 57.6 66.3 63.1/42.2 72.5/51.1 82.3/60.0 49.2 58.3 67.4
8 – 30 69.7/39.2 81.7/50.7 93.7/62.2 49.4 61.1 72.7 79.9/39.1 82.0/50.3 93.1/61.5 52.7 60.9 72.1
días
1–5 79.8/38.9 92.0/49.5 104.2/60.1 52.5 63.7 74.8 81.1/36.6 93.0/47.8 105.9/59.0 51.1 62.9 74.6
meses
6 – 11 79.9/42.9 94.5/52.5 109.1/62.1 55.2 66.5 77.8 80.6/43.3 95.4/53.3 110.2/63.2 55.8 67.3 78.9
meses
1 año 80.2/43.2 93.0/52.4 105.8/61.6 55.5 65.9 76.3 81.4/44.0 93.6/53.0 105.8/62.0 56.5 66.5 76.6
2 años 83.7/48.2 94.6/57.0 105.5/65.8 60.1 69.5 79.1 84.2/47.9 95.0/56.5 105.8/65.1 60.1 69.3 78.7
3 años 79.9/45.3 92.6/55.1 105.3/64.9 56.8 67.6 78.4 80.8/44.9 93.5/54.3 106.2/63.7 56.9 67.4 77.9
4 años 77.6/45.3 90.7/54.5 103.8/63.7 56.1 66.6 77.1 78.7/44.5 90.8/53.9 102.9/63.3 55.9 66.2 76.5
5 años 83.5/47.4 94.1/57.3 104.7/67.2 59.4 69.6 79.7 83.4/47.7 94.3/57.4 105.2/67.1 59.6 69.7 79.8
6 años 84.9/49.1 95.5/59.3 106.1/69.5 61.1 71.4 81.7 86.1/48.5 96.2/58.5 106.3/68.5 61.1 71.1 81.1
7 años 86.1/49.4 96.4/59.7 106.7/70.0 61.6 71.9 82.2 87.4/50.5 97.8/60.7 108.2/70.9 62.8 73.1 83.3 87
8 años 88.0/50.9 98.3/61.0 108.6/71.1 63.3 73.4 83.6 88.7/51.6 98.7/61.6 108.7/71.6 64.1 74.1 84.1
9 años 89.4/52.5 100.2/62.7 111.0/72.9 64.8 75.2 85.6 90.6/52.6 100.7/62.6 110.1/72.6 65.3 75.3 85.1
10 años 90.9/53.2 101.8/63.1 112.7/73.0 65.8 76.1 86.2 91.4/54.1 101.9/63.6 112.4/73.1 66.5 76.4 86.2
11 años 93.5/54.4 104.6/64.5 115.7/74.6 67.4 77.9 88.3 92.4/53.6 103.2/63.4 114.0/73.2 66.5 76.7 86.8
12 años 96.0/57.4 107.5/67.1 119.0/76.8 70.3 80.6 90.7 95.0/55.8 105.8/65.6 116.6/75.4 68.9 79.1 88.9
Fuente: Horan M. J., BonitaF., Kimm SYS et. al. Report on the Second Task Force on Blood Pressure
Control in Children. 1987. Pediatrics 1987.79:1-25
Rogers MC, Nichols DG. Ed. Textbook ok Pediatric Intensive Care. 3th ed. Baltimore, Williams & Wilkins, 1996.
Presión Arterial Media= (Presión Diastólica)+(Presión Sistólica – Presión Diastólica)/3 ó PAM = PD+(PP/3)
PAM= PD ([PS.PD]/3
PAM= (PS + [2PD])/3
Nota: se programa el intervalo de tiempo en que se toma la presión arterial media de acuerdo con las con-
diciones del paciente, entre 15 minutos, para los casos graves, a 4 horas, para los estables. Cuando la presión
arterial media baja por debajo del valor mínimo, se debe iniciar la infusión de cristaloides, según el protocolo.
Cuando la presión arterial media tiende a elevarse por encima de la máxima normal hay que suspender la
infusión de líquidos para evitar la sobrecarga de volumen.
Criterios de hospitalización
Presencia de Signos de alarma Cualquiera de los signos de alarma (anexo C)
- Deshidratación, tolerancia inadecuada por la vía oral, mareos o
Signos y síntomas relacionados hipotensión postural
con la hipotensión (posible - Sudoración profusa, síncope, postración durante el descenso de la fiebre
extravasación de plasma) - Hipotensión arterial o extremidades frías
- Derrame pleural y ascitis
Hemorragia
- Sangrados espontáneos, independientemente del recuento de plaquetas
- Infección asociada
- Diabetes
- Hipertensión
Comorbilidad presente - Ulcera péptica
- Anemias hemolíticas o de otro tipo, etc.
- Neumopatías (asma, EPOC, etc.)
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
- Embarazo
Condición asociada - Obesidad
- Menor de un año o edad avanzada
- Vivir solo
Determinantes sociales - Vivir lejos de los establecimientos de salud
- Sin medios adecuados de transporte
*Las autoridades de cada región deberán definir si se instalaran salas de atención de Dengue específicas de
acuerdo a necesidad.
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
Clínicas:
- Sin fiebre por 48 horas sin antipiréticos
- Mejoría del estado clínico (bienestar general, apetito, estado hemodinámico,
diuresis normal, sin dificultad respiratoria)
De laboratorio:
- Tendencia ascendente en el conteo de plaquetas
- Hematocrito estable sin líquidos intravenosos
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
89
Frecuencia cardiaca
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
Esta tarjeta debe incluirse en la historia clínica de cada paciente. La impresión de esta
tarjeta es responsabilidad de las autoridades de los establecimientos de salud.
Condiciones asociadas: embarazo, niña o niño menor de 1 año de edad, personas mayores de 65 años de edad,
obesidad mórbida, hipertensión arterial, diabetes mellitus, daño renal, enfermedades hemolíticas, hepatopatía
crónica, paciente que recibe tratamiento anticoagulante, otras.
Riesgo social: persona que vive sola o lejos de donde puede recibir atención médica, falta de transporte, pobreza
extrema.
Pruebas de laboratorio:
• Hemograma completo en los primeros tres días de iniciada la enfermedad (hematocrito, plaquetas por
método automático o recuento manual en Cámara de Neubauer y leucocitos)
• Muestra para NS1, RT-PCR en Tiempo Real e IgM, al primer contacto. Repetir la prueba de IgM, 10 a 14
días después de la primera muestra, si ninguna de las pruebas virales fue positiva.
• Pruebas de función hepática: bilirrubinas, AST, ALT
Tratamiento:
• Mantener hidratado al o a la paciente enferma por vía oral. En caso de intolerancia a la vía oral, iniciar
tratamiento intravenoso con cristaloide (lactato de Ringer o solución salina (0,9%) a dosis de manteni-
miento: (2 a 4 ml/ kg/hora) y reiniciar la vía oral lo más pronto posible.
92 • Dar tratamiento sintomático igual al Grupo A
Además, el paciente:
• Hará uso estricto de mosquitero en la fase febril
• Recibirá información como en el Grupo A
Para la condición asociada dar atención específica supervisada
Vigilar/evaluar:
• Signos vitales: pulso, frecuencia cardiaca, frecuencia respiratoria, temperatura, presión arterial
• Curva de temperatura
• Equilibrio hídrico: ingresos y egresos (informar las veces que orina)
• Signos de alarma (principalmente el día que cae la fiebre)
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
• Laboratorio: según el tipo de condición asociada (hematocrito, leucocitos, glucosa, electrolitos, entre
otros).
• Hematocrito, plaquetas y leucocitos cada 24 a 48 horas
• Educación sobre los signos de alarma
Citas de control
• Ver Grupo A (anexo H).
Criterios de referencia al hospital (véanse más detalles en el anexo F)
• Presencia de cualquier signo de alarma
• Presencia de cualquier signo o síntoma relacionado con la extravasación de plasma (posible hipoten-
sión)
• Sangrado espontáneo
• Cualquier dato de disfunción orgánica
• Presencia de enfermedad concomitante (embarazo complicado, infección asociada)
Notificación a epidemiología en un plazo de 24 horas y al Sistema de Información en Salud (SNIS).
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
Criterios de grupo:
Es todo caso de dengue que presente uno o más de los siguientes signos o síntomas cerca de la caída de la fiebre y
preferentemente a la caída de la fiebre:
• Dolor abdominal intenso o a la palpación del abdomen
• Vómitos persistentes
• Acumulación de líquidos (ascitis, derrame pleural o pericárdico)
• Sangrado de mucosas
• Letargo/irritabilidad
• Hipotensión postural (lipotimia)
• Hepatomegalia > 2 cm
• Aumento progresivo del hematocrito
Pruebas de laboratorio:
• Hemograma completo antes de hidratar al paciente
• Muestra para NS1 o RT – PCR en Tiempo Real (primeros cinco días de la enfermedad) e IgM (a partir del sexto
día del inicio de la enfermedad). Si los resultados de las pruebas NS1 o RT - PCR en Tiempo Real son negativos,
repetir IgM 14 a 21 días después de haber tomado la primera muestra.
• Pruebas de función hepática: bilirrubinas, AST, ALT
• Glicemia
• Grupo sanguíneo y factor Rh
Tratamiento:
El no disponer de un hematocrito no debe retrasar el inicio de la hidratación. 93
• Administrar lactato de Ringer o Hartmann o solución salina 0,9%: 10 ml/kg en 1 h.
• Reevaluar: si persisten los signos de alarma y la diuresis es de menos de 1 ml/kg/h, repetir la carga con
cristaloide isotónico 1 o 2 veces más.
• Reevaluar: si se observa mejoría clínica y la diuresis es ≥ de 1 ml/kg/h, reducir el goteo a 5-7 ml/kg/h y
continuar por 2 a 4 h. Si continúa la mejoría clínica, reducir a 3-5 ml/kg/h por 2 a 4 h. Luego continuar
el goteo a razón de 2-4 ml/kg/h por 2 a 4 horas según las necesidades del paciente.
• Reevaluar el estado clínico del paciente. Repetir el hematocrito y, si continúa igual o tiene un aumento
Criterios de grupo
Todo caso de Dengue que tenga una o más de las siguientes manifestaciones:
1. Choque o dificultad respiratoria debido a extravasación grave de plasma. Choque evidente por: pulso débil o
indetectable, taquicardia, extremidades frías y llenado capilar >2 segundos, presión de pulso ≤ 20 mmHg:
hipotensión en fase tardía.
2. Sangrado grave: según la evaluación del médico tratante (ej: hematemesis, melena, metrorragia voluminosa).
3. Compromiso grave de órganos: tales como daño hepático (AST o ALT ≥ 1000 UI), sistema nervioso central
(alteración de conciencia), corazón (miocarditis) u otros órganos.
Pruebas de laboratorio
• Hemograma completo
• Muestra para NS1 o RT – PCR en Tiempo Real (primeros cinco días de la enfermedad) e IgM (a partir del sexto
día del inicio de la enfermedad). Si los resultados de las pruebas NS1 o RT - PCR en Tiempo Real son negativos,
repetir IgM 14 a 21 días después de haber tomado la primera muestra.
• Otras pruebas según el órgano afectado, por ejemplo: transaminasas, gases arteriales, electrolitos, glicemia,
nitrógeno ureico y creatinina, enzimas cardiacas, cultivos, radiografía de tórax, ultrasonografía torácica o ab-
dominal o ambas, ecocardiograma, electrocardiograma.
Tratamiento del choque
Obtener un hematocrito antes de hidratar al paciente; el no disponer de hematocrito no debe retrasar el inicio de la
hidratación.
94 • Monitoreo de signos vitales cada 5 a 30 minutos
• Oxigenoterapia
• Iniciar hidratación intravenosa con cristaloide (lactato de Ringer o solución salina 0,9%) a 20 ml/kg en 15 a 30
min. (a la embarazada y a los adultos mayores de 65 años los bolos se administran a 10 ml/kg en 15 a 30 min.).
• Si desaparecen los signos de choque, disminuir el volumen de líquido a 10 ml/kg/h; continuar por 1 a 2 h.
Repetir el hematocrito.
• Si la evolución es satisfactoria, disminuir el goteo a razón de 5-7 ml/kg/h, por 4 a 6 h; continuar a razón de
3-5 ml/kg/h por 2 a 4 h, luego mantener a 2-4 ml/kg/h, por 24 a 48 h.
• Si no hay mejoría, administrar un segundo bolo con lactato de Ringer o solución salina 0,9%a 20 ml/ kg en 15
a 30 min. (a las embarazada y los adultos mayores de 65 años, 10 ml/kg). Si hay mejoría, disminuir el goteo a
10 ml/ kg/h y continuar por 1 a 2 horas. Si continua la mejoría, disminuir el goteo a 5-7 ml/kg/h, por 4 a 6 h y
continuar la hidratación como se señaló anteriormente.
SERIE: DOCUMENTOS TÉCNICO NORMATIVOS
• Si no hay mejoría repetir un tercer bolo con lactato de Ringer o solución salina 0,9% a 20 ml/kg en 15 a 30 min.
• Si hay mejoría, disminuir el goteo a 10 ml/kg/h y continuar el goteo por 1 a 2 horas. Si continua la mejoría,
disminuir el goteo a 5-7 ml/kg/h, por 4 a 6 h y continuar la hidratación como se señaló anteriormente.
• Repita el hematocrito. Si continúa alto en comparación con el de base, se puede continuar con cristaloide
o cambiar la solución IV a coloide. Reevaluar después de la reanimación. Si se observa mejoría, cambiar a
solución cristaloide 10 ml/kg/h, por 1 a 2 h y continuar la reducción del goteo como se mencionó antes.
• Si el paciente continúa en choque, administrar coloide por segunda vez en la misma dosis y tiempo ya señala-
dos. Continuar con cristaloide, según se indicó anteriormente.
• Si el paciente sigue inestable, revisar al hematocrito tomado después de cualquier bolo anterior. El hema-
tocrito que ha disminuido bruscamente y la inestabilidad hemodinámica sugieren sangrado y la necesidad
urgente de tomar una prueba cruzada y transfundir sangre o derivados inmediatamente.
Tratamiento de la hemorragia: glóbulos rojos 5-10 ml/kg o sangre fresca a 10-20 ml/kg
• Si el paciente no mejora, evaluar nuevamente la situación hemodinámica.
• Evaluar la función de bomba (miocardiopatía, miocarditis) defina el uso de aminas.
• Evaluar las condiciones médicas concomitantes (cardiopatía, neumopatía, vasculopatía, nefropatía, diabetes,
obesidad, embarazo). Estabilizar la afección de base.
• Valorar la acidosis persistente y el riesgo de hemorragia oculta y tratarlas.
Notificación a epidemiología en un plazo de 24 horas y al Sistema de Información en Salud (SNIS).
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
Con base en los tres ensayos controlados de asignación aleatoria que comparan los
tipos diferentes de esquemas de reanimación con líquidos en el choque por Dengue
en niñas o niños, no hay ventaja clara del uso de los coloides en relación con los cris-
taloides en lo que se refiere al resultado final. Por lo tanto, las soluciones cristaloides
(solución salina al 0,9% o lactato de Ringer) son de elección para la reanimación de un
enfermo con dengue.
Sin embargo, los coloides pueden ser la opción preferida si la tensión arterial tiene que
ser restaurada urgentemente, es decir, cuando la presión diferencial pulso es menor de
10 mm Hg. Se ha demostrado que los coloides son superiores para recuperar el índice
cardiaco y reducir el hematocrito más rápidamente que los cristaloides, en los pacien-
43-45
tes con choque intratable .
Un líquido fisiológico ideal es uno que se parezca a los líquidos de los compartimientos
intracelular y extracelular.
Sin embargo, los líquidos disponibles tienen sus propias limitaciones cuando se usan 95
en grandes volúmenes. Por consiguiente, es necesario conocer las limitaciones de estas
soluciones para evitar sus respectivas complicaciones.
Soluciones cristaloides
La solución salina al 0,9% (solución salina “normal”) tiene una osmolaridad de 308 mOs-
mol/L y contiene un elevado nivel de sodio y cloro (154 mmol/L, cada uno).
El cloro del plasma normal va de 95 a 105 mmol/L. La solución salina al 0,9% es una
opción conveniente para el inicio de la reanimación, pero, cuando se utilizan grandes
volúmenes, puede llevar a la acidosis hiperclorémica. La acidosis hiperclorémica puede
agravar o puede confundirse con la acidosis láctica del choque prolongado. El control
de los niveles de cloro y lactato ayuda a dilucidar el problema.
Cuando el nivel de cloruro del suero excede el rango normal, es aconsejable cambiar a
otras alternativas, como el lactato de Ringer.
Lactato/Acetato de Ringer
El lactato/acetato de Ringer tiene menos sodio (131 mmol/L) y cloruro (115 mmol/L) y
una osmolaridad de 273 mOsm/L, por lo que no es conveniente para la reanimación de
pacientes con hiponatremia grave. Sin embargo, es la solución conveniente para com-
pletar el tratamiento después de que se ha administrado la solución salina al 0,9 y el
Soluciones coloides
Los coloides son soluciones basadas en gelatina, dextrán o almidones. La razón para no
utilizar coloides o utilizarlos excepcionalmente en pacientes con Dengue, es que cual-
quiera que sea la solución coloide, ésta va a filtrarse al espacio extravascular y aumen-
tar la presión oncótica en dicho espacio, lo cual puede perpetuar el choque y hacerlo
irreversible.
Otra de las preocupaciones más grandes con respecto a su uso, es la alteración que
producen en la coagulación. Los dextranos poseen una actividad antitrombótica por su
acción sobre la hemostasia primaria (disminuyen la agregación plaquetaria) y sobre los
factores de la coagulación (facilitan la lisis del trombo). Estos efectos aparecen cuatro
a seis horas después de su administración y perduran por unas 24 horas. De todos los
coloides, la gelatina tiene el menor efecto en la coagulación pero el riesgo más alto de
reacciones alérgicas. Las reacciones alérgicas, como fiebre y escalofríos, también se han
96 observado con el dextrán 70. El dextrán 40 puede causar una lesión renal osmótica en
los pacientes con hipovolemia.
10.15 Anexo O. Peso corporal ideal estimado para pacientes obesos o con
sobrepeso
RIESGO
Normal 150 – 450 x 103 µL
Leve 149 – 101 x 103 µL
Moderada 100 – 50 x 103 µL
Grave 49 – 11 x 103 µL
Muy grave ≤ 10 x 103 µL
Fuente: Adaptado de “Dengue, Guías para la atención de los enfermos en la región de las Américas”. OPS/OMS 2016
Dosis (µg/Kg/
Medicamento Observaciones
min)
Noradrenalina 0.05 – 2 Causa vasoconstricción e incremento del gasto cardiaco (agonista
alfa y beta). Es útil en algunos casos de ineficacia de la dopamina y la
adrenalina. Buena combinación con dobutamina (beta1).
Dopamina 5 - 10 Predomina efecto inotrópico (beta1).
Predomina efecto vasopresor (alfa1).
Los límites de las dosis que se señalan son aproximaciones. Puede
haber variaciones individuales en la respuesta cardiovascular de los
pacientes, especialmente neonatos.
Adrenalina 0,01 – 3,0 Efecto beta predominantemente hasta 0,3 μg/kg/min; efecto alfa
creciente con dosis mayores de 0,5 μg/kg/min. Excelente opción en
estado post paro cardiorrespiratorio y en pacientes que no responden a
98 dopamina. Su utilización requiere monitorización EKG y hemodinámica
muy cercana.
Dobutamina 5,0 – 20 Efecto inotrópico beta, virtualmente puro. Pueden requerirse dosis
superiores a 20 μg/kg/min.
Nitroprusiato 1,0 – 10 Vasodilatador que puede llegar a utilizarse en el choque séptico como
coadyuvante en el tratamiento de la falla de bomba asociada con
resistencias vasculares aumentadas (reduce la postcarga).
A menudo requiere cargas de volumen simultáneas. Su uso prolongado
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