Aquí estoy, esperando a que termine de hacerse una pizza que tengo en el horno.
Y es que no sé qué contaros.
O no sé por dónde empezar, porque soy de las que no se callan ni debajo del agua y algo pa contar siempre tengo.
Pero cada vez se me hace más cuesta arriba este blanco nuclear de la página de 'nueva entrada''.
Y es que tengo poco tiempo.
Y el que tengo lo dedico a leeros y a comentaros (que a veces os dejo comentarios que parecen post's).
Emma está bien (cruzaré los dedos que la última vez que dije que estaba genial se tiró todo el día siguiente vomitando).
Está más bonica que ná.
Y muy salá.
Lo bailá tó.
Un movimiento de hombros, de caderas y de culo que puedes llegar a pensar que practico con ella todos los días para que llegue a ser la nueva 'chaquira'.
Pero no. Es innato. O bueno, ha sacao los genes de las abuelas y la madre que somos muy bailonas y además, con algo de gracia.
Andar, anda. Pero no sola.
Como les dije a unas amigas blogueras (Equipo28, May&Cia.), estoy hasta las pelotas de que tó quisqui me pregunte cada 2x3=6:
-"¿Pero no anda sola?".
- Pos no. Pero te recita de carrerilla 100 poemas de amor y una canción desesperada de Neruda.
Me encantaría contestarles éso aunque sea para dejarlas pensando quién leches es Neruda.
Porque sí, son las madres (y abuelas) del parque de cabecera donde salimos Emma y yo a explayarnos las que preguntan insistentemente. Y eso que nos ven todos los días (o casi todos).
Abro inciso: Por cierto, antes de seguir y ya que las he nombrado, no dejéis de visitar a la Mariequipo y a la Marimay que son dos joyicas.
La primera una madre todoterreno 2x2. No me he equivocado. ES que es madre de dos niños gemelos y cada uno vale por dos.
La segunda una boquerona afincada en Sevilla que acaba de animarse a crear su propio bló. Sospecho que arengada por su santo que la quiere compartir con el resto de mortales con tal de no oirla durante 10 minutos. Cierro inciso.
Emma ya chapurrea algunas palabras.
Papá y guau-guau son universales.
Papá para cualquier señor sea como sea su apariencia y guau-guau para cualquier animal aunque tenga alas.
Al principio las utilizaba bien. Papá cuando veía a su padre y guau-guau cuando oía a Momo, a Kiyo o a cualquier perro ladrar. Pero se ve que es tan gandula para hablar como para andar, y como además la entendemos...
Ah! también dice "agua" "pepe" y "¿andetáaaaaaa?".
Entender, lo entiende tó.
Es más, pa mí que se hace la tonta muchas veces.
Sigue tirando las cosas al suelo. Sobre todo cuando se enfada y la única pataleta que puede hacer, es arrasar con lo que tenga delante.
Pero la adoro. Estoy enamorada de ella.
De esas pestañas tan largas que le llegan a las cejas.
De ese pelo que recién lavado es ensortijado y a la mañana siguiente liso-liso.
De esos ojos que ahora son azules y ahora son verdes.
De esa boca tan bien perfilada con labios rosas.
Con sus manitas rellenitas.
Con sus brazicos rechonchos.
Con ese culo respingón que te da envidia de lo bien que le quedan los pantalones.
Con esos dedicos de los pies que te los comerías uno a uno, que tienen unas uñas im.po.si.bles de cortar por la forma que tienen incluso cuando las dejo muy largas para que me resulte más fácil.
Mi niña me come genial.
Otra gran tranquilidad para una madre.
Y dependiendo de lo que esté tomando hasta me refunfuña porque lleva un rato con la boca abierta mientras yo miro la tele embobada con los dibujos.
Dibujos de los que me sé toooooodas las letras y sus músicas.
De Dora exploradora, de Fun boy y chum chum, de Nody, Pocoyó, Pat El cartero, Pop Pixie, Scooby Doo, Chuggington, Lazy Town, Bob Esponja, Caillou, Hero Kids, Asha, Angus y Cheril, Martín Martín, George of the jungle, el perro Vipo, Todo es Rosie, Arthur, los pingüinos de madagascar... y alguno que me dejo, seguro.
Desde el fin de semana pasado duerme en su propia cama.
Un diván de forja al que no le ha hecho falta una barandilla antivuelco porque se pegó por su lado abierto a la pared. Así se ha convertido en una maxi-cuna que Emma disfruta a tope.
Yo pensaba que no iba a verla dormir otra vez con el culo en pompa, pero me equivoqué. Se ve que la niña se siente cómoda en esa posición...
Desde el fin de semana pasado duerme en su propia cama.
Un diván de forja al que no le ha hecho falta una barandilla antivuelco porque se pegó por su lado abierto a la pared. Así se ha convertido en una maxi-cuna que Emma disfruta a tope.
Yo pensaba que no iba a verla dormir otra vez con el culo en pompa, pero me equivoqué. Se ve que la niña se siente cómoda en esa posición...
Al principio no sabía cómo titular el post porque pensaba hablar de varias cosas, pero acabo de hacerlo al repasar por encima antes de 'publicar'.
Se acaba de terminar lo del horno.
¡Hasta pronto!
Un besico desde el país que no existe.
Elly