30 de noviembre de 2014

Ven a mí que vas herido que en este lecho de sueños podrás descansar conmigo.

 

Hasta que una tarde, al ponerse el sol,
frente a aquel camino donde tantos años
atrás lo esperara, se hincó de rodillas
la triste enamorada.
Y entre aquellos brazos que tanto había ansiado,
con una sonrisa quedó desmayada.
Y en aquel instante, el tan esperado,
un beso dejó en sus labios posado…
Ni una lágrima, ni una palabra,
sólo una sonrisa con aire de quimera
ante una pregunta:
- ¿Fue larga la espera?…

(No sé de dónde lo saqué, pero no lo he escrito yo).

29 de noviembre de 2014

Alguien en mí dormido me come y me bebe

Sí, ella habita en mí.
Aunque no fuera yo quien la creara.
Lo cual es en sí perturbador por naturaleza.
Pero no la temo.
Ya no me asusta lo más mínimo.
De un modo u otro -más o menos doloroso- conseguí tenerla controlada.
Encontré una bonita caja de cartón con el fondo cubierto en terciopelo rojo.
Y allí habita.
En su mundo mi caja es una casa de muñecas.
Donde se entretiene imaginando pasados, presentes y futuros alternativos.
Un mundo en el que ella es yo.
Y supongo que, de algún modo, yo soy ella.
La cuestión es que de algún modo aprendimos a llevarnos bien y ahora ya no nos peleamos.
Ya no intenta colarse en mi vida. En mi realidad.
Nos quedó claro que no es factible ni saludable.
Así que se queda donde está y acepta su suerte.
Aunque a veces se pone traviesa, pues esa es su esencia -es ante todo, un ser juguetón- e intenta que le preste atención.
Sobre todo me habla en sueños.
Poblándolos de fantasías y cosas de esas que no le cuentas a nadie.
Y a veces intenta colarse en mis dedos cuando me pongo a escribir. 
Y algunas lo logra.

28 de noviembre de 2014

But on good days I am charming as fuck.

I, I'm not the prettiest you've ever seen
But I have my moments, I have my moments
Not the flawless one, I've never been
But I have my moments, I have my moments

 

Nunca fui, ni seré, tan hermosa como aquel día.
Aquel en que bailaba al ritmo de aquella nuestra canción.
Balanceándome despacio.
Quitándome la ropa para ti.
Que marcabas el son con una mano.
Y con la otra te acariciabas los labios.
De aquella forma que siempre me ha vuelto loca.
Nunca seré tan bella como en aquel momento.
Con tus ojos recorriendo mi piel desnuda.
Mordiéndome los labios para contener la risa.
Con las mejillas pintadas de mi característico rubor.
Pero dispuesta a hacer lo que tú me pidieras.
Cualquier cosa que me pidieras.


26 de noviembre de 2014

We're safe and sound



Parece mentira pero ya ha pasado otro año. Otro más... y ya tengo treinta!!!
Sonaba tan lejano eso de cambiar de década pero aquí está. No está nada mal para una gatita traviesa, no?

Tengo la manía de, llegado este día, buscar la entrada del año pasado y ver qué contaba por entonces.
Madre mía! Recuerdo que después del añito que habíamos llevado pensaba que ya había pasado lo peor, pobre ilusa... aún estaba tanto por venir... tanto, tanto...
Hablaba de aprender, de ser más fuerte, de superar crisis... qué sabría yo hace un año? Qué sabré de aquí a diez? La vida nos pone a prueba cuando menos lo esperamos, nunca debemos pensar que ya ha pasado todo, porque no tenemos ni idea de lo que está por venir.
Ha sido un año tan dificil... pero no todo han sido problemas, no, no. Ni mucho menos!
Sigo creciendo y aprendiendo que es, en realidad, lo importante para mí. (Eso y amar, claro).
Hay tantas cosas buenas en mi vida que no sabría ni por dónde empezar -ni terminar, si comenzara- a enumerarlas y creo que cada día las valoro más.
Habría hecho mucho de haber tenido más tiempo u oportunidad (no sabéis lo mucho que necesito viajar...).
Algunas cosas de las que sí he hecho me las habría pensado dos veces, de saber las consecuencias o desenlaces que tendrían, pero... no soy perfecta ni pretendo serlo, la verdad, solo intento hacerlo lo mejor que puedo y, siendo sincera (y un tanto ególatra, quizá) creo que no lo hago tan mal.
Y con eso me vale.

Sigo intentando ser feliz, que no siempre es fácil, pero aprovecho a lo grande cuando me dejan.

Safe and sound - Capital cities- 

25 de noviembre de 2014

Mira dos veces para ver lo justo, no mires más que una vez para ver lo bello





Hay personas que te quieren de un modo extraño.
Como ese antiguo... ¿amigo? ¿Compañero de trabajo?
Ese que, después de tantos años, sigue enviándome canciones por email.
Eso, única y exclusivamente, un correo de vez en cuando con un enlace a youtube y unas pocas palabras.
No sé si aún vivirá en Barcelona, si seguirá trabajando en lo que lo hacía, si es feliz o si tuvo tres o seis hijos.
Nada sé de él, solo que de tanto en tanto, una canción -o su video- le hace pensar en mí y me la envía.
Esta (Steven Wilson - Drive Home) llegaba acompañada de una felicitación adelantada y la indicación de ver el video a pantalla completa.
Y no importa que la historia sea triste, bien sabía él que me iba a encantar...

23 de noviembre de 2014

If I had my life to live again, I'd find you sooner

I'm out of touch, I'm out of love
I'll pick you up when you're getting down
And out of all these things I've done I think I love you better now
 


Seis meses ya han pasado...
Llevo medio año casada con él. 
Parece mentira que haya dejado de sonar estrepitosamente extraño decir "mi marido".
(la de risas a mi costa que tuvieron en el trabajo con aquellos mi...nov...mari...)
Lo fácil que fue acostumbrarme a llevar este anillo.
Aunque a veces aún me sorprende, ahí, en mi dedo.
Lejos de cualquier mito estamos viviendo una especie de segundo noviazgo.
No sé bien motivado exactamente porqué.
Pero... la verdad...
¿a quién le importa el porqué?

22 de noviembre de 2014

And you've got your demons and darling they all look like me


Hay cosas que son de sí o no.
A las que, por mucho que quieras, no debes responder con divagaciones o evasivas.
No, cariño, no, a veces hay que decir sí o no.
Y el mundo no se desmoronaría, te lo aseguro. 
Te lo prometo. 
No se desharía bajo tus pies por que dijeras... que sí.
O que no.

21 de noviembre de 2014

And time is taking its sweet time erasing you



Hoy lo he vuelto a hacer, sabes?
He ido a aquel lugar donde nos contábamos historias.
Donde yo era tuya y tú eras mío, ¿te acuerdas?
Donde tantas veces me follaste e incluso alguna hicimos el amor.
Donde mi cuerpo era un bloque de barro que moldeabas a tu antojo.
Mi cuerpo... y mi voluntad.
Donde no había palabras prohibidas.
Donde tus dedos dibujaban cuentos en mi piel.
O me regalabas viñetas que solo nosotros podíamos entender.
Donde escribías, dibujabas y creabas para mí.
Y éramos libres como pájaros.
Volando alto, bien alto, sin el peso de nuestras cadenas.
Allí donde me poseíste.

20 de noviembre de 2014

Te encanta y lo sabes


Cuando el cansancio es tan, tan, tan grande que te sigues moviendo a base de golpes de voluntad. Venga, primero un pie, venga después el otro. Y tu cabeza flota como drogada, como si fuera a desconectar en cualquier momento. Pero entras en el dormitorio e incluso te cambias de ropa.
Te enfundas el pijama y abres las sábanas.
Te sientas, te colocas y, mientras te tumbas te tapas.
Entonces se produce ese momento casi orgásmico: tu cuerpo agotado se encuentra de repente entre una superficie blandita y mullida y un cálido edredón. 
Sientes como cada músculo gime de placer y te encoges como un cachorrillo.
Sí, sí, es esa sensación que te hace entornar los ojitos y suspirar profundo.
Justo antes de perder la conciencia hasta el día siguiente.

19 de noviembre de 2014

Los pequeños detalles que lo cambian todo.




Son los pequeños detalles los que duelen.
Esos que te hacen pensar "esto no está bien".
Lo cual no significa que puedas cambiar las cosas.
(Y, por favor, absteneros de decir que sí).
Como llegar tarde del trabajo.
Y digo muy tarde.
Digo a las tres de la mañana.

Y encontrarte la mesa puesta para cenar.

17 de noviembre de 2014

Una manera laboriosa de no ser nada, es serlo todo; de no querer todo; de no querer nada, es quererlo todo.

The ghosts are on the green
Each and every night
Oh, the distant light
That's the hardest part to take
That's the heart of all my pain
Lying in the cold
Oh, the distant light
In a hue we can't describe, still we know



Quedé con una amiga que soñó que yo no existía.
Se encontraba con personas que tenemos en común, les hablaba de mí, pero nadie me recordaba. 
Ella trataba de que alguien lograra acordarse de mí.
Pero no lo lograba, como si yo, efectivamente, nunca hubiera existido. 
Al final alguien le decía "Ah, sí, ella...".
Y la llevaban a un despacho donde esperaba una mujer.
Que no era yo.

16 de noviembre de 2014

Escondite


- ¿Cari? -oigo que me llama y me hace gracia- ¿dónde estás?
Sabe que estoy en casa, hemos venido juntos y no, no me he marchado.
Y el piso no es ni por asomo un lugar lo bastante grande como para no encontrarme.
Cinco años de convivencia deberían haberle enseñado que la única habitación en la que cierro la puerta tras de mí si no quiero que entre es el baño.
- Aquí -digo delantando mi posición- ¿dónde quieres que esté?
- Ah, no sé -dice todo inocencia- podrías haberte metido en cualquier parte...

15 de noviembre de 2014

When butterflies fell in love, do they have humans inside their stomach?

General sherman y cómo Sam Bell volvió de la luna - Zahara



Uno puede dar cosas buenas a aquellos a los que ama. Las palabras, el descanso, la diversión.
Tú me diste lo más precioso de todo: la ausencia. 
Me era imposible estar sin ti, incluso cuando te veía me faltabas todavía.

Si la traducción no está del todo bien lo siento, no domino el francés todo lo que quisiera.

14 de noviembre de 2014

El destino es aquello que buscamos, algunos nunca lo encuentran, otros son irremediablemente arrastrados hacia él


Una tarde de lluvia, a buen resguardo dentro del coche, en una calle poco transitada.
El sonido de las gotitas repiqueteando en el techo de metal, escurriéndose por los cristales.
Y tu voz en mi oído susurrando:
"Es tiempo de ver llover y no mojarse". 
Y yo pensando en lo bonito que sería salir a empaparme contigo.

13 de noviembre de 2014

Colonización



Hacer tuya una casa, un piso, la colonización del hogar en definitiva, es un proceso curioso.
Este espacio nuevo y diferente que te obliga a reubicarte.
La cama está al revés, ahora duermes junto a la puerta.
La bañera es más pequeña y la cortina lo tiene más fácil para agarrarse a ti.
La chaise longue que antes pasaba desapercibida se ha convertido en protagonista creadora de espacios.
Estas lámparas alumbran de otra manera.
Y este suelo brilla tanto...
Ya no desayunas mirando a la nada, pues las vistas desde el salón te cautivan.
Y aún no sabes qué harás con esa habitación vacía.
Cada acto en el nuevo piso parece un ejercicio de mnemotécnia, especialmente en la cocina donde todo ha cambiado de lugar o a la hora de vestirte, pero poco a poco las piezas van encajando.
Cada vez nos preguntamos menos eso de "¿Cari, dónde está...?", la respuesta correcta se encuentra en la primera puerta del armario que abrimos y empezamos a sentir este nuevo lugar un poco más "Casa".

12 de noviembre de 2014

You won't see me fall apart 'cos I've got an elastic heart



Resulta curioso como algo puede doler tanto que crees que te desarmará como un castillo de naipes hasta que un día deja de doler.

No hay un aviso, una alarma o una señal luminosa que diga "se acabó", no. Simplemente la herida va dejando de escocer, el objeto de tu pena deja de ser lo primero que aparece en tu mente al despertar, ni te persigue de camino al trabajo, no puebla cada minuto de inactividad de tu vida. Poco a poco se va retirando de tu presente inmediato, hasta que un día, al oír una canción, recordar algo, ver una película (...), sientes la herida picar y te das cuenta de que había dejado de hacerlo.

Respiras lentamente sintiendo ese ligero dolor, saboreando esa melancolía que es tuya y solo tuya.
Gozando de la sensación de triunfo, de haber pasado por ello.






 Sia - Elastic heart

10 de noviembre de 2014

No existe ningún punto de partida si no se sabe bien a​ ​dó​nde ir.


¿Porqué, a veces, los amaneceres son así?
¿Negros como boca de lobo?
Abrir los ojos presa del desánimo sin motivo.
Y esperar a que suene el despertador.
Momentos y minutos en blanco.
Repasar los arañazos sin que ninguno parezca más abultado o rojo de lo normal.
Costras sequitas y en buen estado.
Cicatrices blancas.
La explicación/excusa hormonal no sirve, aún no toca. 
He dormido las horas suficientes. 
El calendario no chilla el día de hoy en rosa/verde/rojo/azul neón.
¿Entonces qué?
"El dolor es, a veces, como una mosca, zumba en tus oídos, se posa en tu piel molestándote, pero cada vez que intentas agarrarlo se te escapa entre los dedos", pienso con las bragas en las rodillas mientras, en la cocina, el café gira en el microondas. 
Me encomiendo al Dios de la cafeína y a la ducha caliente, a ver si así, le damos la vuelta a este inicio de lunes.

9 de noviembre de 2014

9N


Llevo días dándole vueltas a si hacerlo o no hacerlo, pues la política es uno de esos temas que me provoca sarpullido. Pero también es cierto que vivo aquí y más de uno de habéis preguntado cuánto de lo que se dice es verdad, lo que opino o, como el enfant terrible, se dedica a bromear sobre lo distinto que será todo cuando nos hayamos independizado.

Mi queridito John-O me pinchaba esta mañana para saber si voy a ir a votar o no, para contestarte a eso, bichejo, debo explicar lo que opino, no?
Pero lo primero que voy a decir es que esto son opiniones personales y que no quiero entrar al trapo en una discusión con nadie (ese es el principal motivo por el que no me gusta hablar del tema) y que no quiero que nadie se ofenda por lo que yo diga.

Es cierto que ha habido un auge del independentismo en Cataluña durante los últimos años y sí, creo que gran parte está motivado por la crisis económica aunque no del todo. La tercera fuerza política catalana siempre ha sido ERC, eso no ha venido con la crisis y algo tiene que significar. 
Pero el motivo por el que voy a ir a votar hoy, que sí que voy a ir, está al margen de si quiero la independecia o no la quiero.
Voy a ir a votar, en primer lugar, porque estoy harta (y me repatea cada vez que lo oigo) de oír a los políticos de un lado y de otro hablar de "la voluntad del pueblo catalán". Si alguien, en cualquiera de sus posicionamientos, quiere defender la voluntad de un pueblo primero tiene que saber cuál es. Estoy tan cansada de los que nos pintan como radicales que se pasan el día quemando banderas de España en Pl.Cataluña como de los que nos tratan de tontos que vamos siguiendo a Mas y Jonqueras como borreguitos estúpidos. La realidad aquí no es ni una ni la otra. Hay mucha gente a favor de la independencia y hay otra mucha en contra y creo que es necesario saber qué es lo que quiere la mayoría, saber qué quieren los catalanes de los que tanto se habla. 
Una vez se sepa lo que se quiere, entonces es cuando hay que sentarse en una mesa a negociar una separación o dejarlo pasar si el pueblo no lo quiere.
Por eso creo que desde el Gobierno Central se está gestionando muy mal este asunto, cuanto más se cierran en que no, en recurrir al constitucional, etc, más gente aquí se cabrea y más cancha le van dando a los independentistas. 
Esto me ha recordado que no hace mucho escuché a un granadino afincado aquí decir que la mayor campaña a favor del independentismo la estaba haciendo Wert con su política educativa. Y esa es la idea que intento expresar sin mucho acierto (jajajajajaja). 
Ni desde Madrid se puede negar el derecho a voto ni desde aquí se puede declarar la independencia unilateralmente, primero es fundamental saber lo que quiere la gente. 

Esa es mi opinión y por eso voy a ir a votar, independientemente de que mi papeleta diga Sí-Sí, Sí-No o No. Sé que esta noche o mañana la prensa catalana dirá que ha sido todo un éxito y el resto que ha sido un fracaso, lo sé, pero se nos está queriendo negar algo muy importante y creo que debemos oponernos a ello.

Hace dos o tres semanas estuvo Jordi Évole en el Hormiguero hablando del tema, si lo queréis ver, él expresaba estas ideas mucho mejor que yo. 

8 de noviembre de 2014

Cosas buenecitas


Mi café por la mañana y las formas que dibuja la espumita.
Calentarme los pies acercándoselos sigilosamente, en la cama.
Despertar y que aún falte una hora (o más) para levantarme,
hacer de rollito y seguir durmiendo.
Descubrir que puedo hacer cosas que creía que no podía.
Cantar en el coche, aunque me vean desde los vehículos vecinos y me dé vergüenza.
Esos momentos en que me doy cuenta de algo que se les estaba escapando a personas que considero más listas que yo (ego, lo sé).
Tender la ropa al sol, con el olor a ropa recién lavada envolviéndome.
La muestras de afecto de la gente que quiero.
Cuando mis rizos tienen Ese día.
Esas canciones que erizan la piel.
Darle de comer a los pecitos.
Las imágenes que emocionan.
Ese huequito en su cuello.
Una mañana al sol, con un libro.
Cuando me llama "cariño".
Las manos de mi padre.
La nariz de mi gordito. 
Los ataques de risa.
Pintarme las uñas.
La lluvia, siempre la lluvia.

7 de noviembre de 2014

Y ahora que soy medio dos y el antídoto es peor que mi adicción a ti.



Cómo decir que durante aquellos tiempos fuiste mi comida favorita.
La mejor forma de empezar el día.
La nana de mis noches de plácido sueño.
Mi primer y último pensamiento.
La voz de mi conciencia y mi serpiente pecadora.
Que tus manos eran como la caricia del viento.
Y tu cuerpo los mejores ropajes con los que cubrirme.
Que no quería mirarme en otro lugar que no fueran tus ojos.
Ni escuchar otra cosa que tu voz.

6 de noviembre de 2014

Que sí, que sí

 (Esta mañana, frente a la puerta de casa, 7:20 aprox).

Que en este pueblo hace frío es un hecho consumado, pero, por si hiciera falta ahí están las pruebas. 

5 de noviembre de 2014

Mica en mica s'omple la pica

Es lo que tiene que la vida no se detenga, que siga avanzando, quieras o no, pase lo que pase.
Dejé el que era mi hogar sin problemas, finalmente (solo faltaría con la paliza que nos tuvimos que dar).
El nuevo piso comienza a parecer eso, un piso y no un almacén. Hay algún mueble a medias, muchas cajas y maletas llenas, pero ya se puede habitar en él. Solo que, a veces, hay que rebuscar un poco para saber dónde está algo.
Aún no controlo los tiempos, por ejemplo, desde aquí a otros lugares como el trabajo, ni los espacios, pero me voy adaptando felizmente.
Mi padre está ya en casa. Ayer le dieron el alta. Desde un punto de vista objetivo y clínico ya puede estar en casa, no tiene ninguno de los síntomas que hubieran alargado el ingreso, así que... 
Como hija, me parece pronto, lo veo débil y, como encima es cabezón, quiere estar en su casa él solo. 
Por suerte, con el ingreso previo al verano, aprendí que hay cosas contra las que no debo luchar, porque no puedo, de modo que me mantengo expectante a ver qué sucede y cómo se van dando las cosas.
Comienza el fin de año que siempre es muy duro en mi empresa, comienza a notarse, pero es bueno, significa que hay trabajo. Aquí también hay que verlas venir un poco e ir sobre la marcha.
Al fin ha terminado este verano cansino que no se quería ir, eso sí, de una forma abrupta, incluso para mí que prefiero mil veces el frío. La semana que viene media ciudad estará resfriada, seguro, igual que ahora andan todos renegando de la temperatura, de la lluvia y del fin estival (todos menos yo y algunos pocos). 

3 de noviembre de 2014

Resumiendo


Muchos días lejos del blog.
Días en los que ha habido de todo.
Personas que enternecen con su interés por mi padre. Otras que agobian.
Exceso de trabajo con el Niño Bonito y fascinación ante lo bien que lo llevamos.
Otros que por fin parecen entender determinadas cosas.
Preocupación.
Ideas, montones de ideas.
Paz y tranquilidad en mi nuevo nidito.
Semipiño con el coche, susto por la que me van a pegar en el taller y alivio ante el importe de la factura.