22 de abril de 2021

Cuando no sepas cómo decírmelo, mándame una canción @miguelgane

El duende de las canciones sigue enviándolas, hace mucho que no hablo de él, pero ahí sigue.

Nuestra relación ha variado de una forma sutil pero relevante: ahora yo también respondo con canciones. 

No hay periodicidad establecida, pueden pasar semanas o meses. 

No hay géneros prohibidos. Si bien él se ciñe más a ciertos estilos, lo mío es muy ecléctico.

No hay críticas. Si apenas algún comentario cuando nos gusta realmente lo que recibimos.

No hay casi palabras. Preguntamos por las respectivas familias en plena pandemia... nos felicitamos el año nuevo... poco más.

Es una relación extraña, lo sé. Pero me parece muy tierna. Qué mejor manera de decirle a alguien "sigo pensando en ti después de tantos años"?

18 de abril de 2021

Corazón -Ana Elena Pena-

Aquí mando yo,
desde que me levanto hasta que me acuesto.
YO,
reina absoluta de mi propio reino
(ingobernable a veces)
me castigo de vez en cuando
por insubordinada y rebelde,
me premio por fiel,
 

y me quemo por bruja.


 

14 de abril de 2021

Si no fuera por el amor, la vida sería un navío que no valdría la pena botarlo. -Edwin A. Robinson-

 

14 de abril. 

14 años juntos.

Cómo me sigues soportando?
Cómo sigues aquí conociendo como conoces a todos mis monstruos?
Mis peores defectos, ideas y opiniones?

No siempre es fácil, de hecho a veces es muy complicado, mantener una relación a flote, la pa/maternidad las pone muy a prueba. La vida y sus cosas, a menudo tampoco ayudan. La rutina y la pandemia... qué decir. Los años son triunfos y a la vez piedras en la mochila.

Pero sigo pensando que eres tú, sin duda alguna, de entre todos eres tú.

 Stephen Day - All Because of You 

 

12 de abril de 2021

Cuando te mueves a la velocidad de la vida, acabas por chocar con los demás. -Crash-



QUE SE MATEN LOS NUDOS

Hay nudos que se alojan
en la garganta
y que un día te tragas
para que nadie note
lo que abultan,
normal,
quedan mal sin cuello alto,
digo,
cuando una ya anda
cabizbaja.
Te los tragas
y ahí se quedan
en el estómago
como todo nudo
atando algo
atando
tristezas a penas
nervios a inseguridades
risas no reídas a
miedos y a daños
a sueños, que caducaron
y demás cosas que nos tragamos
para que nadie
las vea.
Y claro, el nudo, atado
trata de pelear
como un loco en una camisa
un animal en una jaula
pelea
sin muchos asaltos que ganar
pero pelea.
Y cuanto más crece
más pelea
a veces tanto que se escapa
y lo vomitas de repente
entero el nudo
con todas sus putas cuerdas
lo vomitas
a voces, a lágrimas, a silencios
a suspiros,
a ostias
a solas
o en público…
entonces
loca
te dicen
que te has vuelto loca
– no señora, loca no
es solo que no cabe más
dolor sin digerir
en este estómago,
entienda usted que
el polvo al menos lo mordemos
antes
de tragárnoslo.
(Creo que
debería existir un vertedero
una planta de reciclaje
una cárcel
o un planeta
donde depositar
los malditos nudos
y que se maten
peleando entre ellos)

-Nines B Rodriguez-

9 de abril de 2021

Raise your glass if you are wrong in all he right ways -Pink-

Otra cosa que me ha enseñado la maternidad es que se vive mejor (y haces descubrimientos alucinantes) cuando te permites ser sincera contigo misma. Sin medias tintas. Al 100%. Si aceptas las peores verdades que pasean por tu mente y anidan en tu corazón.
Admitámoslo: nadie quiere ser el malo en su propio cuento.
No, queremos ser el héroe o la princesa. No la bruja ni el villano.
Pero a veces, mis queridos amigos, somos los malos.
A veces nuestras ideas se desvisten de buenismo.
A veces, en nuestras cabezas, somos unos verdaderos engendros de la naturaleza.
A veces, nuestro corazón, es egoísta, envidioso, celoso, llorica, vago y un auténtico cabrón.
O simplemente, no somos tan buenos como nos pensábamos o nos queríamos pensar.
Y sabéis qué?
No pasa nada.
Si lo que supuestamente debería hacerte feliz... no te lo hace.
Si las cargas que deberías asumir con estoicismo y buena disposición te están consumiendo la vida.
Si admites, en tu fuero interno, que no te gusta tragar la medicina aunque cante Mary Poppins.
O que no quieres determinadas cosas y ya te bien que haya otros impedimentos que te sirvan de excusa. 

Tener esas ideas, asumirlas como propias, aceptar su verdad, no te hace mala madre, mujer, hermana, hija, amiga, nuera, cuñada, empleada, compañera... no. Solo eres humana. Y todos los humanos tenemos nuestro lado oscuro. 

Así que... cheers, my friends.

7 de abril de 2021

Es patético que no podamos vivir con las cosas que no entendemos. Que necesitemos que todo esté etiquetado y explicado y deconstruido. Aunque sea del todo inexplicable. -Chuck Palahniuk-

Últimamente estoy siempre cansada. No físicamente, no, todo está aquí arriba, en la azotea. Demasiadas cosas que no van bien, o no van como deberían. Ni siquiera demasiadas, quizá solo alguna pero importante. Quizá solo una, pero pilar en mi existencia. Quizá nada y solo sea mi estupidez intrínseca reclamando atención. Y ese es el poso en el que mejor crece y se alimenta esa voz interior que me machaca. La que me tiene al borde de las lágrimas a todas horas. La que tiene línea directa con mis miedos, traumas e inseguridades. Esa que imagino siempre de forma difusa, como algo con piel reptiliana, escurridiza, revolcándose en rincones oscuros y húmedos, en agua estancada. Algo con garras y dientes. Algo que me drena y me vacía. Y alimenta el caos, el desorden y el desbarajuste. Todas mis voces dicen la suya, lo cual no ayuda. Hablan a coro, a la vez, como cotorras. Cacarean sin orden ni coherencia. Todas mis voces temen a eso. Todas andan como locas de un lado para otro, sin saber qué hacer. Como pollos sin cabeza. Nave sin capitán. Timón sin timonel. (basta) Nos lleva la inercia y la inercia da miedo. La ausencia de control, (que no descontrol, sutil pero diferente...) siempre me es mala compañera.
Nadie lo diría observándome, es lo bueno (o quizá lo malo?) de aprender a vivir con una máscara: sabes hacer creer a todo el mundo que todo está bien aunque por dentro la tormenta arrecie destrozando todo a su paso. Será esta la tormenta perfecta? La que acaba con todo? No, no seas dramática. Busca el origen, el kit de la cuestión, lo elemental querido Watson. Porqué ahora? Qué ha pasado? Qué ha cambiado? Demasiadas preguntas sin respuesta. Ningún hilo consistente del que tirar. Debería sentarme a escribir. Debería vomitarlo todo. Esta entrada debería ser el exorcismo, la cura, el rayo de sol entre las nubes negras, pero como ahora me censuro, pues... no puedo. Joder No, no, aquí no se dicen tacos. M a g n í f i c o. Y sigo igual, tragándome esta masa informe, viva y pestilente, sin poder digerirla. Qué hay en este engrudo? Qué lo compone? Hay mucho de lo siempre (el monstruo con su discurso autolesivo... la sobrecarga de todos esperando de mí más de lo debido... mi autoexigencia... mi inconformismo natural... el exceso de algunas cosas... la falta de otras... bla, bla, bla...), y lo de siempre no debería ser más problema del habitual, qué es lo nuevo? Esa traza de sabor inmundo que no logro identificar es la clave, lo sé, la semilla de este mal que me atormenta. Es así, siempre lo ha sido, necesito encontrar la causa concreta, el porqué, el ingrediente principal, para poder empezar a ponerle remedio. Pero no lo encuentro, no lo encuentro... y la solución se me escapa...