31 de mayo de 2015

There are two ways of spreading light: to be the candle or the mirror that reflects it.

Broken glass on the floor.
A thousand pieces, maybe more.
Reflecting me and my inner thoughts,
so that you can see who I am.
Broken mirror - J. August


A veces me pregunto si solo soy un espejo roto que muestra distintos reflejos a aquellos que me miran, puesto que parece realmente que nadie me ve. A mí. Que solo ven lo que esperan ver o que solo obtienen un reflejo distorsionado de sí mismos.
No puede ser que todo el mundo se identifique conmigo. No puede ser que todos crean ver tan meridianamente claro a través de mí.
Que cada uno piense que soy esa, aunque no tenga que ver con la que los otros ven.

¿Soy eso?
¿Un espejo?
A base de agradar y poner buena cara, ¿me convertí en un reflejo de los demás o es que me oculto tanto de los demás que no les dejo verme?

30 de mayo de 2015

It is in your moments of decision that your destiny is shaped.


Otro año más llega el aniversario de mi Independencia.
Ya sumamos nueve.
A veces pienso que es muy tonto celebrar esto.
Pero no, no lo es, en verdad no.
Porque fue lo mejor que hice nunca.
Todo cambió a raíz de aquella decisión.
Y no me he arrepentido ni una sola vez desde entonces.

 

29 de mayo de 2015

No regrets, they don't work.

"¿Y tú cómo estás? -pregunta mientras la cafetera burbujea- Es que como nunca exteriorizas nada..."
Y ahí está, en su sonrisa de disculpa, el reproche que siempre acabo oyendo, la decepción. No hay nadie, y digo nadie, con quien mantenga una relación cercana que no me lo haya echado en cara alguna vez. Quizá con otras palabras u otro matiz, pero ahí está.
Me llaman discreta, callada, reservada, muy mía... Preguntan porqué no han sabido antes o, simplemente sabido algún suceso, plan o intención. Dicen que no cuento nada, que todo me lo guardo.
Y yo no lo puedo negar porque claro, es cierto. No suelo pedir consejo o, al menos, no se lo pido a todo el que me rodea sobre cualquier decisión que vaya a tomar y, en la mayoría de ocasiones no comprendo, sencillamente, para qué narices les voy a contar determinadas cosas (que me pensaba hacer mechas antes de hacérmelas, la lista de mi última compra en Ikea, la de vueltas que le di a comprar el coche sí o no...), pero la verdad es que sí, me callo todo lo que puedo. Incluso me enfado a veces cuando el Niño Bonito coge y, en su inocencia de ser humano normal, casca algo que yo no quería que los demás supieran.
Entonces, cuando llega el reproche, suelo hacer ojitos y vestirlo de timidez, dejar que lo añadan a mi lista de rarezas. Porque no puedo explicarles (ni por mí, ni por ellos mismos) que hubo un tiempo en que yo era distinta, que hubo personas a las que se lo conté todo. Todo, todo y todo. Personas que después aprovecharon cada sueño, plan e ilusión, para utilizarlos en mi contra o para burlarse de mí.
Cortándome la lengua en el proceso. Ni decirles que no confío demasiado en nadie y que tampoco conservo ninguna gana de volver a confiar de ese modo.

28 de mayo de 2015

You can't deny laughter; when it comes, it plops down in your favorite chair and stays as long as it wants.


Brote histérico de risa-llanto cuando el fichero excel -con el que tu compañera y tú lleváis trabajando unas tres horas- peta.
Y no se guardan los cambios.
Tú- Ya no sé si río o lloro.
Ella- Es como una gastritis facial. 

27 de mayo de 2015

There is a thin line that separates laughter and pain, comedy and tragedy, humor and hurt.


Esta noche me debe de haber picado la mosca de la risa (o la hormiga, que de eso sí hay) porque se me antoja bastante extraño el estado de ánimo con el que he amanecido.
Cantarina y danzarina, en la ducha, mientras desayunaba o bajaba conduciendo la carretera de curvas. Cantando a pleno pulmón las canciones más cuquis que se me han ocurrido (del estilo de la de abajo) y también esa con la que ando obsesionada. Encantada con mis brillantes uñas rojo sangre y  el sol recién salido acariciándome el rostro.
También podría ser el rebote típico que tengo tras un bajón como el de ayer.
Y podría cuestionarme qué viene ahora, caída o ingravidez.
Aunque lo cierto es que no importa. La clave está en disfrutarlo mientras dure.


26 de mayo de 2015

It is madness for sheep to talk peace with a wolf.


La parte enferma de mi mente está despierta, lleva dos o tres semanas muy activa.
Y hoy le han prendido fuego (sin querer, eso sí) avivándola hasta niveles casi insoportables.
Lo malo es no tener a nadie con quien hablar de ello.
Por mi propio bienestar me alejé de todo aquel que tuviera mi misma perturbación hace ya tiempo.
Y sé que hice lo correcto. De veras que lo sé.
Para no caer en la retroalimentación a menudo inconsciente.
Pero a veces necesitaría tener a alguien que me entienda de verdad.
Alguien que sepa lo que es.
Que no viese falsos reclamos en mis palabras.
Alguien que pudiera decir "jo, tía, menuda putada" con total y absoluta sinceridad.
Que comprendiese las conductas erróneas. 
Los pensamientos tóxicos, recurrentes y en espiral descendente.
Y luego me dijera que no me puedo dejar llevar con una sonrisa cómplice.
De esas que dicen "Nunca saldremos de esto pero hay que mantener la cordura en niveles aceptables".
Los demás lo intentan, no digo que no, pero no lo entienden. No pueden, simplemente.

25 de mayo de 2015

We write to taste life twice, in the moment and in retrospection.

 
Lo malo de ser una chica invisible es que tu entorno lo asume.
Interpreta o interioriza que no quieres o requieres de atención.
Eso hace que, habitualmente, se te peguen personas que sí la necesitan, especialmente aquellas que no saben estar sin ser el centro de conversaciones y miradas.
Lo cual, por lo general, te va bien, para qué negarlo. Mientras ellos destacan tú puedes permanecer tranquila, a un ladito, diciendo tan sólo que sí o que no con la cabeza.
Pero hay momentos en que, contradiciendo tu forma de ser, quieres que te escuchen o te hagan caso. La situación, el tema o tu interlocutor lo merecen. Pero los protagonistas no quieren soltar su preciada atención y te pisan, imponen su tono de voz (siempre más alto que el tuyo, por supuesto) o hacen preguntas tratando de volver a ellos, de que tu interlocutor vuelva a ellos.
Normalmente te das por vencida, callas y dejas que las cabezas vuelvan a su dirección habitual, pero a veces, resulta que el tercero impone tu presencia al protagonista, ignorándolo deliberadamente o encauzando de nuevo el diálogo hacia ti. 

Y tú te sientes genial, como salvada por un inesperado príncipe azul.

24 de mayo de 2015

Forgive me my nonsense, as I also forgive the nonsense of those that think they talk sense.

When people talk to each other, they never say what they mean. 
They say something else and you're expected to just know what they mean.
 -The imitation game-


A veces me gustaría que las personas fueran un poco más literales en su comunicación, por que a menudo siento que se me escapa por completo el convencionalismo del lenguaje.
Muchas veces hacen preguntas o afirmaciones a las que, sinceramente, no sé cómo o qué contestar y, entonces, me sale la ironía y el sarcasmo (ya, ya sé que no son un gran ejemplo de forma comunicativa literal) aunque me lo tengo que callar, que si no luego dicen que soy seca.  
Pero es mi respuesta natural a las afirmaciones o preguntas estúpidas, no puedo evitarlo. Como lo es intentar darle a vuelta a aquel que se cree poseedor de la más absoluta verdad o certeza.
¿Que eres infalible en tus argumentos? Bien, veámoslo. Ah, ¿que no puedes demostrarlo? Vaya...
También me pasa con la verborrea, la gente habla, habla, habla sin parar, como si no fueran capaces que compartir el espacio vital con otro ser humano sin comunicarse verbalmente. Y, si dijeran algo interesante... hay personas a quienes adoro escuchar, con quienes puedo pasarme una hora al teléfono o ante un café contribuyendo lo justo a la conversación para que no callen, pero la mayoría no dice nada, rellenan el silencio de palabras huecas, de conversación vacía.
A mí me gusta el silencio. Yo adoro el silencio. Ahí es donde descubres a las personas, cuando callan, cuando participan sin decir palabra en una conversación. Si los observas mientras sus rostros y sus ojos los traicionan mostrando cosas que probablemente no verbalizarían jamás. Cuando aprendes a distinguir la forma en que se les ensanchan los ojos o ese leve gesto en la comisura de los labios al oír algo que les gusta o que les desagrada. Esos gestos imperceptibles.

23 de mayo de 2015

De ti depende y de mí que entre los dos siga siendo ayer noche, hoy por la mañana.


Y pensar que ya hace un año...
Todo el mundo dice la de cosas que se acaban cuando el matrimonio empieza.
Todo lo que se pierde.
Pues nosotros debemos de ser muy raros.
Un auténticos perros verdes.
Pues más que perder hemos ganado.
Nunca habíamos estado mejor.

22 de mayo de 2015

Sutiles diferencias



- Ricard es muy callado, ¿no?
- Sí, es un chico tímido, además dicen que tiene depresión.
- ¿Ah sí?
- Sí, pero yo no lo entiendo. Le hemos dicho muchas veces que salga con nosotras cuando vamos a bailar salsa o hacemos algún plan, para que no se quede en casa... a ver, cuando me vine para España yo también estaba deprimida, lo había dejado todo allá, pero salía, buscaba cosas que hacer... 
- Oh, pero entonces es que tú no estabas deprimida, estabas muy triste.

21 de mayo de 2015

Prefiero caer entre los buitres que entre las garras de los aduladores, porque los buitres sólo acaban con los difuntos, y los aduladores devoran a los vivos.


Aquellos que digan sentir admiración por ti son de los que te tienes que cuidar.
Son los que, a la que puedan, intentarán cambiarte.
Te bombardearán a consejos, ideas y correcciones.
Los que, al mínimo defecto por tu parte, lo maximizarán y agrandarán.
Los que comenzarán a decirte cómo debes actuar o hablar.

20 de mayo de 2015

You're always such a fool...


You're always such a fool...
You always talk so smooth
and in your voice, so true
I hear the dream
I never had before.
 

19 de mayo de 2015

La diferencia entre la genialidad y la estupidez es que la genialidad tiene unos límites.


A veces te cruzas con algún imbécil.
Es así, no hay más.
Los hay por el mundo, sueltos por ahí, esperando a algún desprevenido.
Hombres que desprecian a las mujeres por sistema.
Y, si encima se pueden valer de "tener algo más" que tú (un título, un cargo, una posición...) apaga y vámonos.
Yo me crucé con uno ayer.
Uno que me trataba con condescendencia.
Que solo le faltó darse una palmadita en la pierna para que me sentara en sus rodillas.
Creo que si me llega a tocar ni que fuera de refilón le podría haber mordido.
Pero no, ya tenía suficiente con sus miraditas y el tono insultante de voz.
Como si hablase con alguien rematadamente estúpido o con un niño pequeño.
Sus "es que estás muy seria", los "de buen rollo", el "yo soy el poli bueno y estoy aquí para ayudar" y, para rematar, cuando le hablaba a mi jefe como si yo no estuviera delante.
Hacía mucho que no me recordaban que soy una mujer joven en un mundo de hombres.


18 de mayo de 2015

D'Oh (IV)


Darte cuenta, porque te te tiras cuerpo a tierra al ver a tu vecino de enfrente, de que cuando vas medio desnuda por el piso, no estás tan a salvo de miradas ajenas como creías.

17 de mayo de 2015

The cruelest lies are often told in silence.


Como muñecas mecánicas se puede ver el mundo con ojos de porcelana y dormir año tras año, 
en una caja de terciopelo entre paletas y tul con el cuerpo relleno de paja se puede, 
a cada escandalosa caricia, sin ninguna razón gritar: Oh, que feliz soy! 
-Forugh Farrojzad-

16 de mayo de 2015

I'm not crazy, my reality is just different than yours.

La idea de la irrealidad me aturde.
Pero lo peor es que ni siquiera puedo ayudarme del lenguaje escrito o hablado para tratar de desentrañar esa insana paradoja.
Porque, cuando lo intento, me pierdo en un extraño discurso metafísico compuesto de divagaciones, argumentos e hipótesis, a favor y en contra.
¿Qué es lo real? ¿Qué lo irreal? ¿Qué determina la realidad de un suceso? ¿Y de un sentimiento?
¿Es este un problema de nuestra sociedad tan moderna y avanzada o ya sucedía en el pasado?
¿La realidad es relativa? ¿Relativa a qué?
¿Depende todo de la perspectiva del observador? ¿Entonces hay tantas realidades como sujetos?
¿Si alguien más lo ve o lo siente es real y, si no, es irreal?
¿Deberíamos tener entonces un "sujeto de control" que corrobore o desmienta nuestras percepciones?
¿Y si el sujeto de control miente entonces existen dos realidades? ¿La de verdad-de verdad y la otra falseada?
¿Cómo resolverlo si somos seres condicionados por el punto de vista?

15 de mayo de 2015

Don't you dare let our best memories bring you sorrow


Puede que lo nuestro fuera un error desde el minuto cero.
Sí, lo más probable es que sí que lo fuera.
Una de esas cosas que sabes que acabarán mal.
Pero a la que no puedes resistirte.
A la que no quieres resistirte, para qué negar la verdad.
Porque esas cosas suelen ser como fue lo nuestro.
Cautivadora y tremendamente bellas mientras son.
Y agónicamente dolorosas cuando terminan.
Es lo que pasa cuando algo te eleva tan y tan arriba.
Caer siempre duele, cuanto más alto peor.
Pero, si me equivoqué, he de decir que fuiste el error más consciente de mi vida.
Y del que menos me arrepentiré.
Que lo único que realmente me pesará es:
no haber podido aprenderme mejor cada milímetro de tu piel.

14 de mayo de 2015

Tus fantasmas me pueden resucitar.


Los pequeños objetos son trampas que nos pone la memoria o, muchas veces, nos ponemos nosotros mismos.
Alguien me habla de barquillos de nata y mi cerebro viaja muchos años atrás, a aquel perenne paquete de galletas guardado en el armario de la derecha, encima de la nevera, que tanto le gustaba a mi madre.
La misma tarde, mientras hago limpieza en un bolso, encuentro un pequeño papel, oculto tiempo atrás entre tarjetas de metro gastadas de Barcelona y de Madrid, un papel que me revuelve los recuerdos y el corazón. Y lo acaricio entre los dedos, sobando la memoria, dejándola correr. Y sé que no debo, que no, no debería, pero... solo un momentito, me digo, solo un momentito.

13 de mayo de 2015

If there’s no rest for the wicked well, then we’ll never get no sleep


Me gustaría decir que no te añoro.
Que ya no me importas.
Que arranqué esa página de mi libro y ya no significa nada.
Que no me quema tu ausencia llenando de cenizas algunos de mis días.
Que me he acostumbrado al vacío que dejaste tras de ti.
Que mis ojos no te lloran más.
Que me he dado cuenta de que no te necesito.
Ni a ti ni a nada de todo lo que tú significabas.
Que no pintas nada en mi vida y nada eres para mí.
Pero yo estoy hecha para la nostalgia.
Venía de serie con los rizos y los ojos verdes...

12 de mayo de 2015

A smile is the chosen vehicle of all ambiguities



Comida de empresa.
A la que puedo me desplazo al rincón, donde menos se me ve.
A pesar de ello un compañero se gira, le sonrío.
- Qué buena pareces así -dice haciendo una imitación pobre de mi postura.
- Yo soy buena -respondo.
- Tú y yo sabemos que eso no es verdad -dice con tonito y veo varias cabezas pivotar hacia nosotros.
Y vete tú a saber porqué me enerva.
Quizá porque últimamente parece ser que me he convertido en objeto de discusión número uno y a la gente que me rodea le ha dado por transmitirme, con mayor o menor acierto y/o tacto, rasgos de mi personalidad o de lo que aparento ser.
Extiendo más la sonrisa.
- Tú y yo sabemos que sí lo soy pero que a mí tonterías las justas.

11 de mayo de 2015

Only enemies speak the truth; friends and lovers lie endlessly, caught in the web of duty.




"No quiero que te obsesiones", me dice.
Y yo me pongo la máscara de niña buena.
Y niego con la cabeza.
Dando argumentos por los que no, no me obsesiono.
Mintiendo, en definitiva.
Porque yo soy obsesiva.
Cuando quiero algo, cuando algo me interesa.
No es una opción.
Pero eso forma parte del espectro no visible.
De lo que nadie sabe, claro.

10 de mayo de 2015

Hay una carta para ti



Ayer volvíamos a casa de un evento familiar para arreglarnos e irnos a otro.
Metí un dedo en el buzón. "Hay algo dentro", dije.
El Niño Bonito lo abrió y sacó una carta para mí.
Mi nombre escrito a mano. "Qué raro", me dijo en broma.
Le di la vuelta. "Son los resultados", dije yo.
Mirada pavorosa el uno al otro. Qué bien.
Y cometí la insensatez de abrirlo al instante, mientras andábamos hacia el ascensor.
Antes si quiera de desplegar la hoja vi la palabra -al revés- "NORMAL" y respiré hondo.
Pero ¿y si no lo hubiera sido?
Hubiera montado un pitoste en vivo y en directo en el portal del edificio.
Se podría pensar que abrir una carta de estas cada tres meses, luego cada seis, debería de haberme inmunizado a hacerlo.
Pero no.
Sé bien que nunca las abriré del mismo modo.
Nunca más.
Ahora ya solo queda otra para poder ignorar al abismo.

9 de mayo de 2015

Ella se desnuda en el paraíso de su memoria, ella desconoce el feroz destino de sus visiones, ella tiene miedo de no saber nombrar lo que no existe

- ¿Cómo lo haces? 
- ¿El qué?
- Engañarlos a todos de este modo.
- Yo no engaño a nadie.
- Sí lo haces. Haces que crean que están a un palmo de ti cuando en realidad los mantienes orbitando a un par de metros de distancia. ¿Cómo lo haces?
- Casi siempre es fácil. La mayoría de la gente solo quiere que la escuchen, te pregunta cómo estás solo para que tú les preguntes lo mismo y poder explicarte esa cosa que anda revolviendo sus neuronas. Así que normalmente me limito a escuchar e ir motivando la conversación entorno a ellos con las preguntas adecuadas. 
- Pero no puedes matener un interrogatorio sin que se incomoden, hay algo más, ¿cómo haces que crean que confías en ellos?
- Les cuentas algo personal. Algo que parezca muy íntimo, importante, eso hace que lo piensen.
- ¿Pero si les cuentas algo íntimo no estás confiando en ellos?
- ¿Si les explicas un hecho relevante de tu historia personal que sabe todo aquel que te conozca?
- ¿Entonces qué es lo que reservas para aquellos a los que realmente sí confías?
- Mis ilusiones, mis miedos, mis inquietudes. Lo que me mata por dentro, lo que me hace reír y llorar. Lo que inspira mis sueños, mis fantasías, mi alegría y mi dolor. Lo que me habita. Lo que nadie ve.

8 de mayo de 2015

Este huracán sin ojos que lo gobiernen



- Hoy estoy floja, tengo ganas de llorar.
- ¿Porqué?
- No sé.
- ¿Qué te ha pasado?
- Nada.
- ¿Entonces?
- No hace falta un motivo.
- ¿No?
- No.
- Joder.

7 de mayo de 2015

Plain Jane


Me gusta Ángel.
Ángel es un compañero de trabajo que un día, de repente, comenzó a hablarme. Literalmente, un lunes compartíamos espacio en silencio en la cocina mientras yo me preparaba un café y él bebía agua y, el martes, entró en el despacho y comenzó a darnos conversación. Es alto, inteligente y divertido. Y me gusta cómo viste.
Pero lo que me gusta de verdad es la forma en que pone su mano en mi hombro cuando me saluda amablemente. A veces se mete con las demás. Conmigo no, siempre me pregunta con esa voz grave y ligeramente rasposa suya cómo estoy y luego dice algo que me hace reír.
Me gusta Ángel pero a él le gusta Sonia. La alta, esbelta, rubia de ojos verdes azulados (y tetas operadas) Sonia. Y es lógico, es más divertida que yo y más guapa y se le dan mejor los hombres, sin duda alguna.
Ya me pasó con Cristian, el joven Cristian que se pasaba horas y horas sentado a mi mesa, bromeando, ahogando risas para que el jefe no nos oyera, que se sentaba siempre a mi lado a la hora del desayuno y me puso aquel apelativo cariñoso. Pero a él le gustaba Silvia.
O con Toni, que me acompañaba desde el instituto a casa para que le hablase de Ada. Ada con la que siempre jugábamos a fingir que éramos hermanas por lo mucho que nos parecíamos, aunque ella era, claro, mucho más guapa que yo.
Es la historia de mi vida. Conmigo se llevan bien mientras se acercan a otra, soy un puente, la eterna amiga.

6 de mayo de 2015

Te mentiría si negara hoy que​,​ desde entonces​,​ solo sueño contigo.

- pero si no la conozco.
- claro que la conoces!
- desde cuándo?
- desde siempre... en tus sueños


No imagino sonido más bello que el de tu corazón latiendo en tu pecho mientras mi oreja, pegada a tu piel desnuda, lo escucha.

5 de mayo de 2015

All of my kindness is taken for weakness




Se tocaron.
Contra todas las leyes y normas.
Unieron sus dedos tan solo un instante.
Las manos se acariciaron hasta quedar palma con palma.
Los dedos se entrelazaron.
Mientras la piel de sus dueños echaba chispas.
Se tocaron.
Y durante medio minuto fue increíble.
Cumplir un deseo, un ansia, una necesidad.
Sintieron desbordarse sus corazones.
Y treinta segundos después el mundo colapsó.
Ardiendo entero en llamas.

4 de mayo de 2015

Life will not break your heart. It'll crush it.

No me mientas, no es necesario que me cuentes cuentos, historias idílicas de príncipes a lomos de sus corceles, blancos o negros, de princesas de fresa o de brujas malvadas. De amores y amistades eternos a prueba de balas y bombas nucleares. Conozco a mis monstruos y los comprendo. No hay temor.
No me digas lo bellísima que soy, ni lo especiales que son mis ojos verdes. Sé de sobra que mi belleza no destaca y que mis ojos son poco mejor que mediocres.
No digas que me quieres. Todos me quieren, un rato. Después se cansan y se alejan con mayor o menor elegancia. Recientemente, la excusa más bonita que me han dicho es que soy demasiado intensa, la más triste ha sido ser un daño colateral.
No finjas o quieras creerte que mis cicatrices de niña rota te atraen. No quieras descifrar la sombra que se otea tras mis ojos tristes o desvelar el misterio que esconde mi máscara de porcelana, pues te lo aseguro: no lo hay. Solo soy una de tantas que disfruta arrancándose cicatrices y se mantiene entera a base de empeño, no hay nada más. Me desangro demasiado a menudo a base de lágrimas que me dejan vacía e inerte. A menudo no sabrás porqué y yo no encontraré las palabras para explicártelo.
Sí, a veces me fascina la mayor simplicidad y eso gusta. Da sensación de vida, de pequeño milagro.
Y sí, haré que te sientas el centro de mi universo, un ser único y especial como nunca antes lo hubo.
Pero si te acercas, si te quedas, si yo dejo que lo hagas, harás promesas -el ser humano es así- que después no cumplirás, cosas que yo aseguraré a ti y a mí, a ambos, no creerme pero que se grabarán a fuego en mi corazón, generando esa endiablada cosa llamada expectativa.
Luego mi ciclotimia te cansará o te asustará la vehemencia de mi cariño o, simplemente, encontrarás otra cosa mejor en la que invertir tu escaso tiempo. Ambos sabemos cómo acabará: tú inventando excusas y yo un poco más herida, reprochándote, preguntándote porqué o pintándome otra falsa sonrisa mientras veo como te alejas.
Hazme caso, no te compliques, no valgo tanto la pena.

3 de mayo de 2015

A los elefantes les cuesta mucho adaptarse, las cucarachas sobreviven a todo.

El sol entra por el balcón. A través de la cortina veo cómo calienta a mis plantitas rojas y me apetece salir y sentarme con ellas.
Llevo un buen rato en blanco, quieta sin hacer nada más que respirar, mientras mi cerebro divaga.
Son las ocho de la mañana de un domingo (¿qué hago despierta?), el Niño Bonito duerme arriba después de una noche de trabajo, la nevera ronronea en la cocina y se oyen, ahogadas, como muy lejanas, dos voces masculinas en la calle. Nada más.
Me invade una sensación de paz, de quietud, la que me reafirma siempre en la decisión de mudarnos.
Mi mente comienza a elaborar una lista en segundo plano de todo lo que tendría que hacer hoy.
Mis ojos prefieren la pereza y observan a los tres peces que aún/solo (no sé cuál es la preposición adecuada) nadan en el acuario. 
Tengo ganas de llorar, llevo tres días así, con los ojos amenazando tormenta.
Sé que no tengo un motivo real, así que culpo a las hormonas combinadas con este resfriado que me tiene negra e hiperpasiva. Ignoro a mis heridas mal cerradas o supurantes, la que más duele no tiene razón de ser y lo sé. Qué estúpido es saber todo lo que necesitas respecto a algo, tomar decisiones racionales y, aún así, que siga escociendo de esta manera estúpida y lacerante. Últimamente el reflejo en el espejo me lo recuerda mucho, lo reincidente que soy.
Aún no le he cogido el truco al nuevo microondas y la taza arde, tengo que esperar a que se enfríe.
Me parezco un poco tonta por ese hecho pero ayer comprendí uno de esos fenómenos astronómicos que siempre me han fascinado y eso compensa. Necesito a un físico en mi vida, lo pondré en la próxima carta a los reyes magos.
Toco tentativamente la taza, se deja coger, perfecto. Un domingo sin café no es lo mismo.
Feliz día amiguitas y amiguitos.

2 de mayo de 2015

A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante. Oscar Wilde

The embrace - Ron Hicks

No sé qué es.
Si el ambiente frío que les rodea.
Si lo indefinido de sus formas.
Pero me han atrapado.
En ese beso que intuyo a veces desesperado.
Otras lleno de una ternura que me rompe algo por dentro.
¿Por el tiempo que llevaban esperándolo?
¿Porque es el último que se darán?
¿Cómo saberlo?


1 de mayo de 2015

Quémalo todo

O la desagradable sensación de releer algunas entradas.
Saltando de enlace en enlace al azar por los últimos dos años.
Y sentirte avergonzantemente estúpida.
Tan, tan, idiota, que te dan ganas de borrarlo prácticamente todo.