
En el trabajo aún no sé dónde paro. Soy nueva, llevo una semana y sé que lo normal es estar así (obsesa del control, lo sé), pero el otro día tuve una reunión con la jefa y cuando le pregunté cuál es mi rol en el equipo me dijo que está por definir, que ahora aprenda un poco
de todos y ya hablaremos en septiembre, que vale, está muy bien, me deja un mes y medio de ver y escuchar, pero por otro lado me explican muchas cosas que ni siquiera sé si, después, las haré alguna vez (y yo suelo aplicar a casi todo, en especial al trabajo, la ley del coste oportunidad).
Por otro lado no sé dónde vivo. Sí ahora hay dos pisos a mi disposición pero ninguno es mi casa. Todo o casi todo está en cajas, lo cual a la práctica supone que no sabes dónde está. Acondicionar el piso nuevo ha costado bastante más de lo que parecía en principio y, además, apenas puedo dedicarle tiempo (se suponía que tendría vacaciones dos semanas para hacerlo). Pero bueno, mañana es la mudanza "grande" y, sea como sea, ya dormiremos en el nuevo, lo cual es un buen paso hacia mi reubicación.